....¿Casualidad o acción táctica para desestabilizar?.
A 1.056 días del inicio de la contingencia en la República Bolivariana de Venezuela producto de la pandemia global de la Covid 19, en la finalización de la semana 150 de esta contingencia, y siendo el domingo 05 de febrero de 2023, quiero llamar la atención sobre un evento que ocurrió el día de ayer y que no puede pasar por debajo de la mesa.
En estos últimos días, la celebración de la Serie del Caribe "Gran Caracas" se ha convertido en un punto de encuentro para los y las amantes del deporte, y también para quienes, por encima de cualquier diferencia, apuestan por el avance de Venezuela.
El pasado 2 de febrero, día de La Candelaria y gracias a buenos hermanos de la vida, tuve la oportunidad de ser uno de las 35.691 personas que ingresó al estadio monumental de Caracas "Simón Bolívar". Un estadio grande liga que no tiene nada que envidiarle al de EEUU o a Japón, por sólo mencionar dos países donde hay ligas fuertes de beisbol profesional del mundo.
Indudablemente, hay elementos y ejecutorias del Gobierno Bolivariano que hoy encabeza Nicolás Maduro que hay que criticar. Desviaciones que se han cometido y del que hay que volver y enderezar el rumbo; de descontentos que hay que escuchar y atender, pero entendiendo que es sólo por el camino de la Revolución y no por otro por el que esos errores y fallas pueden ser corregidas.
Mi hermano de camino y luchas, Omar Hernández, con quien fue uno con los que compartí dicha jornada y de observar a nuestros amados Leones del Caracas, representantes de Venezuela en esta edición número 65 del Clásico del Caribe, me señaló: "Hermano este estadio nos los merecíamos, este juego nos lo merecíamos". Y tiene muchísima razón, ya que el deporte es un elemento que contribuye a drenar tensiones y constituye una distracción sana como parte del derecho a la recreación que tenemos todas y todos.
Sobre todo en tiempos donde el pueblo venezolano resiste ante agresiones, bloqueos y asedios y de enemigos que pretenden robarle su tranquilidad y su paz.
Esta Serie del Caribe número 65 "Gran Caracas" ha demostrado un extraordinario despliegue y el dispositivo logístico, de traslado a los estadios y el regreso de los fanáticos a sus casas por los diversos sistemas de transporte multimodal por lo observado por mí, han funcionado a las mil maravillas. Sobre todo en lo que concierne a la seguridad, y esto ha sido un gran acierto no sólo para los organizadores del evento en sí sino para el Gobierno Bolivariano. Por lo menos yo que asistí al juego Leones del Caracas de Venezuela versus Federales de Chiriquí, representantes de Panamá, así pude constatarlo.
Pero, como lo expresaba un famoso personaje del programa cómico "Cheverísimo" transmitido por el canal Venevisión, "El serrucho de Perucho", interpretado por ese gran revolucionario de la actuación como lo es Perucho Conde: "Que baile que nunca falta un bendito pero", recuerdo que mi buen camarada Rehyner Medina me advertía y señalaba su preocupación sobre las posibilidades de que pudiesen haber personas que estuviesen muy interesadas en sabotear este torneo deportivo donde se realza la capacidad organizativa y el gentilicio de nuestro país: Venezuela.
Hay que ver lo que costó, el daño pero sobre todo el inmenso dolor cuando como parte de las agresiones contra nuestro país, en el año 2019 que correspondía a nuestro país la celebración de la edición número 61 de la Serie del Caribe, y que si mal no recuerdo iba a ser en la ciudad de Barquisimeto en el estado Lara, como parte de las acciones de ataque y boicot a nuestro país, nos fue retirada la sede de la Serie del Caribe y la misma se terminó celebrando en Panamá y retirando incluso la representación de Venezuela. Por eso le doy la razón al compañero Omar en su sentir y expresión que imagino es la de la inmensa mayoría de las venezolanas y venezolanos que habitamos en esta tierra de gracia.
Pues bien, retomando las advertencias del hermano Rehiner, estábamos como conscientes de que hubiesen sectores que pudiesen tratar de aprovechar la tribuna que un evento deportivo de estas características da, para agredir a la Revolución Bolivariana, y los intentos no se han hecho esperar.
El primero fue el mismo día del juego inaugural en el que este humilde servidor junto a otros compañeros y compañeras asistimos al juego inaugural de los Leones de Venezuela y Federales de Panamá. En el juego y en el palco presidencial estuvo presente nada más y nada menos que el propio Presidente Nicolás Maduro y su esposa, la Primera Combatiente Cilia Flores. Inmediatamente los operadores de la derecha editaron videos en los que se escuchaban gritos de supuestos fanáticos gritándole al Primer Mandatario Nacional insultos y consignas contrarrevolucionarias tales como: "Y va a caer, y va a caer, este gobierno va a caer", cuando en realidad los que estábamos en el estadio lo que hicimos fue saludar la presencia del Jefe de Estado venezolano, y dicho saludo fue tan alegre y efusivo que no le quedó de otra al presidente Maduro que responder con respeto y afecto nuestro saludo y mensajes de respaldo y aliento.
Ayer, un poco antes del inicio del juego entre Leones del Caracas de Venezuela y Agricultores de Cuba, mientras observaba la transmisión por el canal Televen, observé a los compañeros Junior Cordero y María Alexandra Bastidas en la antesala del juego hacer sus comentarios y hablando de las bondades en la organización de esta actividad, cuando a los pocos minutos se observó una interrupción no programada e intempestiva en el servicio eléctrico del estadio monumental Simón Bolívar de Caracas en La Rinconada, por lo que el estadio empezó a ser iluminado por las luces de los celulares del público que se apersono al estadio. El gesto de Bastidas y Cordero fue más que elocuente ante esta situación, que afortunadamente fue solventada en muy pocos minutos.
Pero el detalle está en que también pude enterarme que previo al juego de estos equipos, en el que se escenificaba en el mismo escenario entre las representaciones de Colombia y México, también se reportaron fallas en el servicio eléctrico.
No tengo los suficientes elementos en la mano para asegurar, sin pelos en la lengua, que estas fallas sean producto de una acción de sabotaje o de una falla casual y fortuita del servicio eléctrico y en ese estadio en particular.
Pero por lo que hemos vivido en estos últimos años en Venezuela, más otros elementos que algunos y algunas analistas hemos venido observando, investigando y después que hemos tenido conclusiones, presentándolas a la opinión pública, no podría descartarse sobre posibles intentos de sabotaje para empañar un evento tan bien organizado y que ha servido como vitrina de nuestro país en el exterior.
Dios quiera que se haga una investigación seria y se determine las causas de esa falla eléctrica presentada en el estadio monumental de Caracas "Simón Bolívar".
No se trata de paranoia ni de exacerbar el paroxismo sobre cosas que pueden o no pasar. Pero tampoco está de más estar alertas, para evitar sorpresas de última hora o no "previstas".
El enemigo es muy habilidoso y no descartará cualquier espacio que pueda aprovechar con tal de hacer daño.
Y eso, además sin descartar que ciertas y determinadas operaciones terroristas según algunos continúan, y que podrían darse acciones "tácticas" para lograr los fines de los planes para lograr un cambio de régimen en Venezuela.
Ahí se las dejo.
¡Bolívar y Chávez viven y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!
¡Independencia y Patria Socialista!
¡Viviremos y Venceremos!