Podemos entender como
Revolución, como la transformación radical de las estructuras de Estado
y sus instituciones, creadas en sintonía con los intereses de las clases
dominantes. La revolución comprende cambios en positivo, a favor de
las clases oprimidas, que dan lugar al nuevo rol de las instituciones
públicas y de la administración de justicia y las riquezas de la Nación,
garantizando igualdad de posibilidades a todos los venezolanos. Ruptura
del viejo modelo de relación Estado-Sociedad y de la dependencia política
del país de centros de poder imperialista (Eustoquio Contreras, Principios
y Valores del Proceso Bolivariano).
Ahora veamos que podemos
entender como Reformismo: es una corriente política partidaria de los
cambios graduales y no cree en los cambios revolucionarios. Ideológicamente
los reformistas son personas comprometidas con determinados intereses,
a los cuales defiende de la posibilidad de ser afectados por cualquier
cambio radical. Los reformistas se esfuerzan por contener las luchas
revolucionarias aplicando una artificial política de conciliación
entre las clases con intereses contrapuestos. El reformista colabora
con la burguesía en la realización de reformas parciales, que no afectan
sus intereses de clase y de paso entretiene a las clases explotadas
con el espejismo de las reformas, que irán resolviendo poco apoco los
problemas de los oprimidos y explotados (Eustoquio Contreras, Principios
y Valores del Proceso Bolivariano).
Vemos a lo largo de nuestra
historia, que la Revolución y el Reformismo se han hecho presentes
en pugna, que ha moldeado el hilo de nuestro devenir histórico. El
1ero de septiembre 1846 (el pasado 1ero de septiembre del presente año
se cumplieron 164 años de este histórico día), fecha histórica para
la vida de los venezolanos y las venezolanas, en la cual el General
del Pueblo Soberano, el comandante Ezequiel Zamora (Revolucionario),
junto a un pueblo revolucionario en armas (palos, cuchillos, lanzas),
inician una gesta histórica denominada la Insurrección campesina (una
revolución).
Revolución campesina,
porque realmente el pueblo estaba; porque, además, es el pueblo que
quiere, el pueblo que obra, y el pueblo que puede.
Años mas tarde (1858-1859)
el pueblo en armas convertido en Ejercito Federal, junto al General
del Pueblo Soberano y otros oficiales (revolucionarios) destacados como
Prudencio Vázquez, José Bradford, Francisco Iriarte, entre otros patriotas;
con las banderas de Tierras y Hombres Libres, combatieron al godo malandrín,
usurpador y tirano (Oligarca).
Sin embargo, el transcurso
de la historia nos ha demostrado que en las filas revolucionarias nunca
ha faltado un traidor (Reformista) que venda los intereses del pueblo
para ponerse de “limpia botas” de la oligarquía. Tenemos como ejemplo
a Páez o Santander (Reformistas).
En el caso de la Revolución
Campesina Zamorana, nos encontramos con un Juan Crisóstomo Falcón
(Reformista), que a pesar de que “defendía” las banderas de la
federación, coqueteó con el poder oligarca, cuando su plan era capitular
con Julián Castro (Oligarca) y legar a una “solución pacífica”
del conflicto de clases sociales que se vivía en la época, siendo
su sedicioso objetivo el obrar en contra de Zamora (Revolucionario)
y convertirse en presidente de la República a espalda de los intereses
del pueblo.
En los actuales tiempos
de revolución en el estado Yaracuy, y a pesar de los enormes logros
radicales y revolucionarios en materia agraria, se nos siguen presentando
hechos y situaciones que son tristes efectos de la cadenas del pasado,
tal como lo expresaba nuestro padre libertado Simón Bolívar (Revolucionario).
El 12 de Febrero del
año 2009, Luis Gallo (oligarca), lleno de rencor y odio en contra Nelson
López (Revolucionario), dio el golpe mortal, porque nunca lo absolvió
por haber dirigido junto a otros lideres campesinos revolucionarios
como Argenis Carballo y Gregorio Peralta el rescate del fundo Pele El
Ojo, del municipio Arístides Bastidas en el estado Yaracuy.
Sin embargo, a pesar
de haber de haber sido capturados los autores materiales de este infame
hecho, la corriente reformista dentro de las instituciones de administración
de justicia, ha frenado el proceso que confiera sentencia definitiva
a los criminales que accionaron el gatillo que dispararon las balas
que cegaron la vida del líder campesino revolucionario Nelson López.
Agrego aquí que se ha mostrado poco efectiva la acción de los cuerpos
policiales, ya que, Luis Gallo ha permanecido prófugo de la justicia
por más de un año.
En el año 2007, Argenis
Carballo, Gregorio Peralta “El Vale” y Nelson López (revolucionarios),
junto a veinte cooperativas de campesinos y campesinas, épica
y heroicamente revierten el hilo histórico de opresión y rescatan
fundo Pele El Ojo (tierras usurpadas por el oligarca Luis Gallo). Gracias
a la valentía y espíritu del lucha de los campesinos Yaracuyanos
y campesinas Yaracuyanas, le fueron sembradas 180 has. de maíz
de la noche a la mañana, tal cual batalla de Santa Inés, cuando al
despuntar el alba, nuestro pueblo entonaba en este predio el “Oligarcas
Temblad”. Haciendo justicias con los campesinos (as) de los pueblos
de Pele El Ojo y Tasajal, barridos por la cuarta republica para favorecer
a la infame oligarquía. Jubilo sintieron El Rey Miguel de Buría,
Andrés López del Rosario “Andresote”, Simón Bolívar, Ezequiel
Zamora, Prudencio Vázquez y Faustino Parra.
Lamentablemente la mano
del reformista enquistado en la Revolución Bolivariana, las apetencias
personales y familiares que socavan las bases del movimiento revolucionario;
las traiciones a la memoria histórica de un pueblo, impidieron y han
impedido la consolidación productiva de las tierras del Pele El Ojo
(actualmente parte de sus tierras están ociosas y otras arrendadas
a la empresa capitalista Mayagro). El oligarca se valió de de la miseria,
necesidad y falta de claridad ideológica de los pobladores de Tibana,
para expulsar del predio a Argenis Carballo, Gregorio Peralta “El
Vale” y Nelson López (revolucionarios), así como a nuestros ancestros
desalojados por Tejera y los Hernández (oligarcas), ello lamentablemente
con la posición reformista de los directores de las instituciones adscritas
al MPPAT, especialmente del ex coordinador regional de FONDAS, Luis
Arriechi.
Tras el nefando asesinato
del líder campesino revolucionario Nelson López por parte del godo
oligarca Luis Gallo, la Asociación Cooperativa Hermanos Compartidos
R.L., efectúan ante la Oficina Regional de Tierras (ORT) del INTI,
la denuncia de tierras ociosas del Fundo El Ramal, ubicado en el municipio
Manuel Monge del estado Yaracuy, tierras que venían siendo usufructuadas
y ocupadas ilegítimamente por el oligarca asesino Luis Gallo.
Nuevamente la corriente
reformista se hace presente en el seno de las instituciones del gobierno
bolivariano, para asestarle un duro golpe a las esperanzas campesinas.
El 16 de septiembre del 2009, después de largo batallar, la cooperativa
denunciante logra que la ORT efectúe inspección técnica al mencionado
predio, desprendiéndose de la misma un informe avalado por el jefe
del área técnica del ORT Jorge Coronel (reformista), el cual concluye
de manera muy vaga que el Fundo El Ramal es productivo.
Ahora bien, el invalorable
conocimiento ancestral de los campesinos revolucionarios denunciantes
asegura que estas tierras están ociosas, entonces me pregunto: ¿no
vasta que este predio estaba siendo ocupado ilícitamente y sus tierras
usufructuadas por el oligarca Luis Gallo para que las mismas fuesen
inmediatamente intervenidas?, o ¿es el comandante Chávez el único
con la suficiente morfogénesis, para sobreponerse a los preceptos y
paradigmas, y ordenar la inmediata intervención del Fundo La Carolina
del municipio Nirgua del estado Yaracuy?, tierras igualmente ocupadas
ilícitamente y usufructuadas por el oligarca asesino Diego Arría.
Solo me queda a través
de este opúsculo, hacer un llamado al Ministro de Agricultura y Tierras
Juan Carlos Loyo, y a la presidenta del Tribunal Supremo de Justicia
Luisa Estela Morales, para que hagan una revisión de todos estos casos
que he mencionado, para que la corriente reformista no socave mas las
bases de la revolución, para que no se apague la llama revolucionaria
que aviva las esperanza de nuestro pueblo zamorano. Casos como estos
y muchos otros más ponen en peligro la mayoría a favor del socialismo
del siglo XXI en la asamblea nacional. Por ello todos y cada uno de
los hombre y mujeres del pueblo de Bolívar debemos salir a movilizarnos
con la fuerza del alma, la conciencia y la razón, el próximo 26 de
septiembre, por los candidatos del comandante Chávez, solo así se
podrá garantizar la confección de leyes que permitan extirpar definitivamente
la corriente reformista del seno de la revolución, acabar con las tres
I (Incapacidad, Ineficiencia e Ignorancia), e implantar la tres R (Revisión,
Rectificación y Reimpulso Revolucionario).
Viva Cristo, Viva Bolívar, Viva Miranda, Viva Rodríguez, Viva Zamora, Viva Nelson…Patria Socialista o Muerte… ¡Venceremos¡
abrahamcoiman@gmail.com