Si señor presidente, que le vaya muy bién no solamente en su nueva gira por Brasil, Ecuador y Cuba, si no también en el espectacular voltereta que usted le estad dando a la conducción de las relaciones internacionales y a la forma de hacer socialismo en nuestra patria. Este cambio experimentado por usted, si para muchos les es extraño, para mi no lo es. Ya que usted viene desde hace algún tiémpo dando muestras de su decaimiénto ideológico de izquierda y está mostrando claramente visos de ser un presidente tipo Lula y tipo Cristina fernández, o sea un presidente social demócrata con reminiscencias de izquierda.

Usted con su cambio de actitud, está poniendo en peligro la consolidación de todo lo hecho por usted en ese tiémpo. Digo en peligro, por que usted está despojando a todas las misiones del hecho socialista y las está convirtiendo en feudos del capitalismo por que las ha puesto en manos de personas que lo practican a diarios con su estilo de vida corrupto, derrochador y consumista. Personas que enseñan pero no educan para lograr que la persona haga y que no sean son fáciles de engañar y mucho más fácil de comprar.

Usted señor presidente ha cambiado tanto que ya no tiene estrategia ni presenta un equipo socialista para hacer el socialismo y se está desplazando peligrosamente hacia el centro para seguir conviviendo con el estado burgues. Usted mantiene una política fantásticamente derrochadora a través de unos beneficios sociales que a la larga solo producirán frustración en los beneficiados, por que las ayudas que se les da, no vienen acompañadas de la educación requerida para que puedan mantener en el tiempo dichos beneficios. Recuerde usted señor presidente: que con organización y estudio, todos podemos ser intelectuales, para que tengamos responsabilidad crítica con respecto a nuestros representantes. La misiones como tales, solo están preparando a hombres y mujeres, para que sean sumisos y obedientes.

Usted como buen estratega político que es, nos ha hecho ver que usted aún se mantiene en el campo de la izquierda, pero para una una persona como yo que lo ha seguido desde su aparición el 4-2-1992 hasta la fecha, su cambio ideológico no me parece nada extraño. Ya que usted siempre ha sido una persona ambivalente en su discurso. Discurso que acomoda de acuerdo a sus necesidades y según las circunstancias del hecho y del momento. Más, sin embargo, siempre lo he seguido apoyando, por que no se puede volver al pasado después de todo lo que yo he vivido.


aponwuao@hotmail.com

En lo que respecta a su política internacional de la cual siempre me sentía orgulloso, por no estar esta atada a ningun interes extraño y que sirvió para que muchos otros pueblos de sur américa despertaran y siguieran su ejemplo, ahora veo con mucho dolor y tristeza que hasta en ello usted ha cambiado. y aquí es en donde su cambio ha sido más fuerte. Aún, en ese campo seguimos sin ataduras internas y foraneas, pero es indudable que su discurso ya no es el mismo.

Usted ya no es aquel hombre apasionado que con sus discursos llenó de esperanzas a hombres y mujeres al sur de Venezuela, contando en que nuestra revolución también llegaría a sus patrias trayendo consigo la buena nueva del socialismo. Pero todo cambia y nada queda señor presidente y lo nuestro ahora es seguir trillando los caminos que usted poco a poco ha abandonado. Usted ya se olvidó de los Bush, los Obamas, los Netanyau, los Sarkosy,de los Porfirios Lobos y sobre todo se olvidó de Uribe y de quién es y de donde viene su mejor amigo Santos. Solo le queda un discurso de anti imperialista que en boca de usted ya suena como un saludo a la bandera.

Este cambio brusco y sin ninguna explicación de las relaciones de Venezuela con Colombia, han dejado en todos los revolucionarios honestos y decentes un sabor a hiel que será muy difícil que usted logre quitar. Ahora, usted hace pactos secretos (que según usted no se puede consultar con el pueblo, que fue quién lo eligió) con nuestro peor enemigo que no es otro que el gobierno colombiano. Ahora usted tuvo el descaro en decirnos que un hombre como Santos, que es un criminal confeso, quién fue el cerebro de la operación para invadir el territorio ecuatoriano, cofundador de los paramilitares con su padre putativo Uribe. Creador con el mismo barito de los falsos positivos, acusados de crimenes de lesa humanidad y de quién usted en muchas ocasiones acusó de todos los males de la tierra, repito ahora usted nos dice que es su nuevo mejor amigo.

Permítamele decirle señor presidente, que ese vulgar asesino que es el presidente colombiano, será su muevo mejor amigo, pero no lo es de la mayoría del pueblo venezolano. Salga y pregúntele al pueblo que aún confía en usted que opina de esto, y le garantizo que se llevará mayúscula sorpresa. Por todas estas cosas es que le digo: adios señor presidente que le vaya muy bién en su nuevo rol de centro delantero en un gobierno que cada vez se hace más burgues y capitalista.

Recuerde señor presidente: un revolucionario nace, no se hace. Un pueblo desencantado, engañado y sin ninguna educación, es capáz de
votar hasta por sus propios verdugos, tal como sucedió en el Perú, no vaya a hacer que nos suceda lo mismo en el 2012. Hasta Itsvan Mezaros y James Petras se han dado cuenta de su cambio ¿los tratará a ellos como contra revolucionarios?