Si, querido camarada, así como lo lee. La mentira
que escogió la oposición como candidato, tiene a muchos “camaradas”
perdiendo el tiempo escribiendo artículos sobre su etérea
personalidad sin darse cuenta que el peligro para la revolución
no son los opositores: son los reformistas que se apoderaron del
gobierno, quienes no quieren saber nada de socialismo. ¿Qué
hacemos con ganarlas con diez millones de votos, si la revolución
se nos convierte en los próximos seis años, en un sarao pecaminoso
entre burgueses de viejo y nuevo cuño? Por eso es que digo: que
el próximo año, será el de las definiciones políticas.
Ese año, veremos si el gobierno se enrumba definitivamente por el camino
socialista, o se mantiene en el campo que cada día gana más terreno:
reformismo. A, partir del próximo año, veremos si el presidente
quiere ser como LULA y el PESUV un partido como
la vieja AD. ¿Por qué digo esto? Por que hay quienes confunden, nacionalismo
y progresismo con socialismo y son totalmente diferentes.
En el gobierno, no hay nadie que quiera estimular de verdad el
cambio en la conciencia social y la ideología de nuestra sociedad que
en el curso de una revolución, debe tomar, cada vez con mayor fuerza
un papel decisivo. Lo mismo pasa con su partido: el PESUV. Partido convertido
en una maquinaria clientelar con el único fin de ganar elecciones para
mantener a los reformistas burócratas de ese partido en el poder.
Partido que para nada promueve dentro de sus filas, la importancia de
estimular y desarrollar la lucha ideológica revolucionaria sobre la
base de los principios y en función de la búsqueda de la verdad. Lo
cual ha conducido a las bases y dirigentes que apoyan al proceso a la
división y a las peleas intestinas, que objetivamente solo ayuda
a nuestros enemigos. Los dirigentes del PESUV, no han promovido
una lucha de opiniones consecuente en su seno y entre los partidos revolucionarios
y no veo que tengan intención de hacerlo. Por eso es importante hacer
grandes esfuerzos para promover un combate ideológico de altura que
profundamente desenmascare de raíz las distintas desviaciones ideológicas,
políticas y organizativas que existen en las filas revolucionarias.
Para hacer una revolución hay que ser revolucionario, y además tener
un partido que promueva la democracia dentro de el. La crítica y la
autocrítica deben de constituir el camino para desarrollar la unión
de ese partido. Sus militantes deben mantener una corrección total,
dedicación y conducta ejemplar, para estar a la altura de un partido
que ejerza el gobierno. Deben de estar dispuestos a realizar tareas
de vanguardia y a luchar por el progreso. Deben contribuir a la construcción
socialista y tener en cuenta que la educación del pueblo es fundamental.
Tienen que ser leal al pueblo y al partido. Pregunto: ¿Ha visto
usted apreciado camarada todas estas cualidades revolucionarias en los
altos y medios dirigentes del Pesuv? ¿La ha observado en las
bases? Actualmente en el Pesu, lo que Reyna es la división y las ansias
de poder. Con un partido así, jamás se podrá hacer una verdadera
revolución. Los burócratas reformistas que lo dominan, serán sus
enterradores en el futuro.
¿Por que no se ha dado esta discusión dentro de los partidos que apoyan
al proceso? Por que a la dirigencia alta y media del PESUV, no les interesa
para nada. Si esta discusión se llegase a dar, todos ellos, se verían
desenmascarados ante las bases y todos veríamos verdaderamente lo que
son: unos arribistas revolucionarios. Por eso y aunque a muchos no les
guste, es que pongo en duda el carácter socialista de esta “revolución”.
Allende fue un burgués, que hizo una revolución socialista de verdad.
El no le mintió a su pueblo y cumplió con su palabra, esto le costó
la vida. Pero quedó sembrado para siempre en el corazón de todos los
revolucionarios del mundo. Todo hombre que llegue al poder dentro de
un sistema burgués y diga ser socialista, sabe que su vida corre peligro
y tiene que estar consciente de ello. Tiene que estar preparado para
lo que sea, pero jamás puede traicionar la palabra empeñada. Cuando
se comienza a titubear para cumplir con ella, comienza el fin de la
revolución que se propuso hacer. Por más bienestar que se le otorgue
al pueblo. Por más dignificación que se haga de su vida. Por más
felicidad que se le de al pueblo, si todo esto no va acompañado de
una revolución social de verdad, no se estará haciendo nada, ya que
la maldita semilla capitalista que nos sembraron por más de quinientos
años, germinará con más fuerza y volveremos a ser victimas
de la maldición de Sísifo.
El comandante Chávez, en su afán de mantener una unidad revolucionaria,
ha creado varios frentes progresistas, el último de ellos, el GPP,
¿Ha, servido algunos de ellos para algo que no sea que ganar elecciones?
Ya que estos frentes o polos como se le llamen, solo son convocados
cada vez que se acerca una de ellas. Supongo que una alianza como estas,
se hacen con el único fin de terminar de conquistar el poder, político-económico,
si no, no tendría justificación alguna su formación. Ya que para
hablar paja y perder el tiempo, vasta con ir a una reunión del
Pesuv. El único frente justo por incómodo que sea, es entre revolucionarios
socialistas, ¿cumple el GPP con esto? Nada que ver. Todos los frentes
formados hasta ahora, han estado conformados por puros partidos nacidos
de la derecha (salvo el PCV) llenos de dirigentes venidos de AD y COPEY
que no han cambiado para nada. Siguen siendo los mismos bandidos y ladrones.
Con esos dirigentes y partidos, es que Chávez está tratando de hacer
una revolución. ¿Entonces si yo estoy haciendo una revolución con
dirigentes que no tienen nada de socialista, puedo lograr una sociedad
socialista? ¿Verdad que no? ¡Coño! para hacer una revolución socialista,
tienes que hacerla con socialistas, no hay otra, lo demás es crear
falsas ilusiones en las masas. Una revolución debe ser el producto
de de luchas populares y revolucionarias y no el resultado de una decisión
entre camarillas. Esta revolución debe abrir perspectivas a una alternativa
completamente distinta al reformismo burgués que impera en la gestión
actual. Por eso mi gran duda de que esta revolución pueda ser
socialista.
¿Por qué digo que no esta revolución no es socialista? Porque
pudiendo acabar en gran parte con el sistema burgués-capitalista, cada
día se nutre más de el. Porque, se ha escondido tras la prudencia
y las indecisiones para tratar de desatar el nudo que aún une al gobierno
con el capitalismo. El proceso desde sus comienzos, fue tomado por los
viejos burgueses y aunque se ha ido decantando, sigue tomado por estos.
En el proceso, se han creado organizaciones políticas nutridas
de personajes de la vieja política cuarto republicana, ejemplo: MVR
que luego se mimetizó en el PESUV. Se ha aliado con partidos (salvo
el PCV) llenos oportunistas y ladrones, como PODEMOS y PPT. Partidos
que luego regresaron a la oposición de donde nunca salieron. Los dirigentes
de todos esos partidos, nutrieron las arcas de los opositores, quienes
utilizaron lo robado para enriquecerse y para conspirar.
Últimamente, me he puesto a pensar por que esta "revolución"
no avanza hacia el socialismo, y la conclusión a la cual he llegado
es que ella en si, no socialista. Una revolución para que
lo sea, tiene que ser social que según Nuñez Tenorio, sucede. "cuando,
entran en contradicción las fuerzas productivas materiales y las relaciones
de producción inherentes a una sociedad llegan a una fase conflictiva,
en la cual la única salida es la revolución social". En la actualidad,
¿Usted a visto por algún lado estamos entrando en la fase conflictiva
de la cual nos habla Nuñez Tenorio? ¿Verdad que no? Al contrario,
las dos fuerzas de producción, parecen que se están llevando muy bien
ya que el estado está complaciendo a ambas partes, para que nunca entren
en conflicto. La alianzas con capitalistas nacionales y extranjeros,
la renovación de la concesión a Venevisión y la que viene para Televen
y Globovisión. La entrega de miles de millones de dólares por medio
de CADIVI a la parasitaria burguesía importadora, es un claro ejemplo.
A los burgueses los consienten para que se callen y no echen vaina (Polar,
Banqueros, importadores, Fedeindustria, Empreven y otros) La política
reformista del estado, mantiene dividida a la clase trabajadora. La
nueva ley del trabajo a pesar de sus múltiples beneficios,
los trabajadores siguen siendo explotados por los patronos
privados y del estado.
A partir del 2006, yo de verdad creí que íbamos hacia el socialismo,
hoy en día, pie (como dije en mi último artículo) pienso,
que es solo una quimera. Me dejé llevar por la emoción del triunfo
de Chávez aquel año, sin hacer un análisis desapasionado de la forma
de como estaba marchando las cosas en el país para esos
momentos. No se por que causa el presidente Chávez quiere seguir
haciendo una revolución con las armas melladas del capitalismo y esa
es la principal causa que no ha permitido crear las condiciones
básicas para el nacimiento de un Estado popular, con dirección
obrera y campesina, que convertiría automáticamente al sector de la
industria básica estatal, en el núcleo del desarrollo indefinidamente
de nuestra economía por la senda de la edificación socialista. Por
eso es que estamos en presencia de un monstruoso estado capitalista
con empresas "nacionalizadas" gerenciadas por mentes burguesas
reformistas. Muchos dirán, que en muy poco el tiempo que tenemos en
"revolución" para conseguir tal estado popular, pero también
son muchos los que dicen: "En la perdida de tiempo, es que está
el peligro" Mientras tanto, queda en suspenso, hasta el dos
mil trece, el camino que llevará la revolución.
¿De quien es la culpa de que el reformismo se haya apoderado todas las instituciones del estado? ¿Del presidente? Del ¿PESUV? Creo que la respuesta todos las conocemos, por lo tanto no hace falta que yo la repita aquí. ¿Quién es responsable de la burocratización y corrupción institucional que poco a poco está matando lo bueno que tiene este proceso? La respuesta, se las dejo a ustedes. Lo único que puedo decir, es que si no se acaba definitivamente con estos males. La revolución, perecerá con el tiempo. En fin, el gobierno tiene que definirse entre reformismo o socialismo. El tiempo apremia y la revolución peligra. Todos estos conceptos, son emitidos por mí, en el marco de la crítica y autocrítica que debe de existir en una revolución. Espero que solo sirvan para el debate y no para las descalificacione.
aponwuao@hotmail.com