El humo blanco sale del hospital militar diariamente, esa jauría opositora que reclama pruebas de vida lo que quieren es pruebas de muerte o incapacidad, son los que apuestan a su fin creyendo, infantilmente, que en ese supuesto negado, ellos tendrían alguna posibilidad de hacerse del poder.
Que Chávez no pueda hablar no se traduce en que se quedó mudo o parapléjico, para su desgracia señores manitas blancas, no se equivoquen.
Seguramente que alguna vez tuvieron un familiar enfermo, pero fingen demencia ante la enfermedad de nuestro comandante, o sea, se hacen los locos. Lo quieren asomado a la ventana del Hospital Militar como si fuera el papa esta mañana despidiéndose de la iglesia en su último Angelus. Chávez ni es el papa ni ha renunciado a su cargo.
Chávez no habla, temporalmente, pero hablará. Chávez escucha, lee, piensa, escribe y se comunica. Sabe mandar como siempre lo supo, quizá ahora más que nunca.
El comandante seguro que se está riendo bastante al ver las ridiculeces de los manitas blancas y la pelea de gatos de los mismos majunches de siempre peleándose la supuesta candidatura al anunciarse su dimisión. Chávez ha visto a la militancia del PSUV acudir a la elección de sus candidatos a alcaldías, ve a su pueblo esperarlo y rogarle no se impaciente ante su recuperación, que aquí quien está desesperado por ver o escuchar a Chávez son los opositores.
Si Chávez pudiera hablar en este instante le bastarían cinco minutos para pulverizar a todas las sabandijas opositoras, el sonar de su voz tronaría como mil rayos y correrían como cucarachas asustadas todos estos payasos manos blancas, con el perdón de las cucarachas.
Si Chávez pudiera hablar, como podrá en pocos días, bastará su voz de comandante para acallar a estos vende patrias y hacer salir el pueblo a las calles para que se sienta UN PUEBLO QUE PROFESA AMOR REVOLUCIONARIO.
Si Chávez pudiera hablar, los mandaría largo, al carajo!!!
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