“…llegó la hora de que convoquemos a la Quinta Internacional. Frente a la crisis capitalista y la amenaza de guerra que poner en peligro el futuro de la humanidad…”
Cmdte. Chávez
Como antecedentes del llamado a construir una internacional revolucionaria, vamos a reseñar los planteamientos realizados por el Cmdt. Chávez en dos eventos realizados en el mes de Noviembre del 2009.
El primero fue el "Encuentro Internacional de Partidos de Izquierda" en Caracas donde asistieron partidos, organizaciones revolucionarias y progresistas, de América Latina, el Caribe, Europa, África, Asia y Oceanía. El dicho evento el Cmdte Chávez hizo el siguiente llamado:
“Asumo la responsabilidad ante el mundo. Creo que ha llegado el momento de convocar la Quinta Internacional, y me atrevo a hacer la llamada, que creo que es una necesidad. Me atrevo a pedir que creamos mi propuesta”
"La Quinta internacional debe ponerse a la altura del clamor de los pueblos y convertirse en un instrumento de unificación para salvar este planeta en medio de la crisis mundial del capitalismo"
“…llegó la hora de que convoquemos a la Quinta Internacional. Frente la crisis capitalista y la amenaza de guerra que poner en peligro el futuro de la humanidad, la unidad de partidos de izquierda y revolucionario dispuesto a luchar para el socialismo “es un clamor del pueblo”
“…construcción de la Quinta Internacional Socialista “como una instancia de los partidos y corrientes socialistas y movimientos sociales del mundo en la cual armonicemos una estrategia común para la lucha antiimperialista, la superación del capitalismo por el socialismo…”
Y el segundo evento, casi simultáneo, fue la instalación del Primer Congreso Extraordinario del PSUV en Noviembre de 2009, donde el Cmdt. Chávez reiteró la propuesta de crear la V Internacional Socialista que agrupe a los movimientos revolucionarios y progresistas del mundo para enfrentar la estrategia imperialista y salvar a la humanidad de una catástrofe.
En tal sentido planteo lo siguiente:
“Pido a este I Congreso Extraordinario del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) que incluya en su agenda de debate, la propuesta de convocar a los partidos políticos y corrientes socialista a crear la Quinta Internacional Socialista como una nueva organización que se adecué al tiempo y a los desafíos que vivimos, y se convierta en un instrumento de unificación y articulación de la lucha de los pueblos para salvar a este planeta”
En el caso de la actividad de los partidos de izquierda, esta concluyó con un conjunto de resoluciones enmarcadas en el llamado COMPROMISO DE CARACAS, suscrita por 55 partidos de izquierda de 39 países, destacando en nuestro caso, el siguiente planteamiento unitario:
2. CONSOLIDACIÓN Y DESARROLLO DE UNA PLATAFORMA DE ACCIÓN CONJUNTA ENTRE LOS PARTIDOS DE IZQUIERDA DEL MUNDO
2.1. Conformar un espacio de articulación de partidos y organizaciones de izquierda y progresistas, que permita coordinar políticas contra la agresión a los pueblos, el repudio a las agresiones contra los gobiernos legítimamente constituidos, la instalación de bases militares, la violación de la soberanía de los Estados y la xenofobia. La lucha por la defensa de los derechos de los inmigrantes del mundo, de la paz, del ambiente, de los movimientos de campesinos, trabajadores, indígenas y afrodescendientes”
En torno a la construcción de la V INTERNACIONAL en el referido COMPROMISO DE CARACAS, se estableció un acuerdo específico sobre este aspecto, reseñado en la declaración como “DECISIÓN ESPECIAL”:
“El Encuentro Internacional de Partidos de Izquierda efectuado en Caracas los días 19, 20, 21 de noviembre de 2009, recibida la propuesta del Comandante Hugo Chávez Frías de convocar la V Internacional Socialista como una instancia de los partidos y corrientes socialistas y movimientos sociales del mundo en la cual armonicemos una estrategia común para la lucha antiimperialista, la superación del capitalismo por el socialismo y la integración económica solidaria de nuevo tipo, valora dicha proposición en términos de su dimensión histórica que propugna el espíritu de un nuevo internacionalismo y acuerda, a los efectos de concretarla en el corto plazo, crear un GRUPO DE TRABAJO conformado por aquellos partidos y corrientes socialistas y movimientos sociales que suscriben esta iniciativa, para preparar un agenda donde se definan los objetivos, contenidos y mecanismos de esta instancia mundial revolucionaria, convocándose un primer evento constitutivo para el mes de abril de 2010 en esta Ciudad de Caracas. De igual manera, aquellos partidos y corrientes socialistas y movimientos sociales que no se han expresado, someterán la propuesta a la consideración de sus órganos directivos legítimos”
Más allá de los altibajos de la anterior convocatoria y la no continuidad del proceso de construcción de la internacional revolucionaria planteada por el Cmdt. Chávez, esta tarea pendiente es clave para enfrentar la nueva estrategia imperial, que amenaza con destruir la humanidad.
En esa dirección, vamos a describir sintéticamente el actual contexto de la crisis orgánica del capitalismo y la nueva estrategia imperial que viene siendo promovida por la administración de Obama.
I.- CRISIS ORGANICA DEL CAPITAL Y ESTRATEGIA IMPERIAL (*)
En artículos anteriores sobre el legado del Cmdte Chávez hemos sostenido que el régimen de producción capitalista tiene como móvil central la obtención de plusvalía y su conversión en ganancia. Esta es la lógica de la acumulación y la reproducción ampliada del capital, siendo el nudo conflictivo de su metabolismo ya que orgánicamente articula un sistema de contradicciones:
- Conflicto entre la producción colectiva y su apropiación privada.
- Anarquía del mercado, dicotomía entre valores de uso y valores de cambio
- Contradicción en la división del trabajo: separación del trabajo intelectual del manual
Este sistema contradictorio es el punto de partida de las “crisis periódicas”, siendo el verdadero origen o causa del bloqueo de la valorización y de la acumulación del capital, manifestándose en las coyunturas y en sus movimientos cíclicos de la siguiente manera:
- Restricciones en la succión de la cuota de plusvalía (denominada también como trabajo no pagado, trabajo excedente o plusvalor) por la resistencia de los trabajadores a la explotación o por los cambios en la composición orgánica del capital, donde las maquinarias y equipos (capital constante ) sustituyen franjas significativas de fuerza de trabajo plusvalía.
- Caída de la tasa de ganancia, por las anteriores restricciones en la obtención de plusvalía o trabajo excedente.
- Sobreproducción de mercancías, por la no correspondencia entre la producción y el consumo.
- Subconsumo, por los límites en la capacidad adquisitiva.
- Sobreacumulación de capitales que se quedan ociosos, al no ser lucrativa la inversión.
- Desproporción entre los diversos sectores económicos (agricultura, industria, comercio)
Históricamente el capitalismo ha empleado una serie de medidas anti-crisis, inscritas en lo que Marx denominó “CONTRATENDENCIAS A LA CAIDA DE LA TASA DE GANANCIA”:
- Incremento de la explotación del trabajo. Desvalorización del salario
- Expoliación de materias primas en diversos territorios colonizados
- Conquista de mercados y reparto del mundo
- Desvalorización del capital constante o desgaste prematuro de los bienes de producción.
- Intervención creciente del Estado
Estas contratendencias a la caída de la tasa de ganancia, han implicado conflictos de toda naturaleza en la historia del capitalismo, pudiéndose hacer una reconstrucción del forcejeo entre el capital y el trabajo, de la tenaz lucha entre los imperios y los pueblos subyugados, del conflicto y contradicciones entre las propias fracciones del capital:
- En la lucha contra la explotación, los trabajadores han resistido a la ofensiva del capital, obstaculizando la extensión de la jornada de trabajo o su intensificación. Igualmente han batallado contra la desvalorización del salario.
- Los pueblos oprimidos se han resistido a entregar sus recursos naturales o abrir las compuertas de sus mercados.
- Entre las mismas fracciones del capital, se ha desatado una diversidad de conflictos por el reparto del mundo.
En este contexto global de la crisis del régimen capitalista, el Estado imperial cada día se corporativiza más y se privatiza bajo la tutela de los monopolios financieros, los carteles mediáticos, el lobby petrolero y el complejo industrial-militar. En este último caso, la experiencia histórica enseña que una de las políticas anti – crisis empleada por el capital (al lado del incremento de la explotación del trabajo, la conquista de nuevos mercados y el saqueo de las riquezas naturales de los países del llamado tercer mundo) en estos momentos tiene que ver con la promoción de los conflictos bélicos, donde la venta de armamento y los servicios logísticos, particularmente la inteligencia humana y tecnológica, la manipulación mediática y las operaciones psicológicas, sirven de motor para reanudar los ciclos productivos en momentos de recesión. Por ello se puede sostener que son estos monopolios de la industria militar privada quienes incentivan y se benefician de los planes guerreristas, siendo las actuales guerras de baja intensidad o guerra contra el terrorismo y el narcotráfico, formas específicas de un intento de aplicar paquetes anti-crisis.
De allí la importancia que posee su caracterización para la revolución venezolana, continental y mundial, haciendo evidente sus múltiples concreciones en las formas de intervención imperial, tomando en cuenta que sus manifestaciones no son visibles ni obvias, sino que requieren ser descubiertas y contextualizadas en sus rasgos teóricos-prácticos, que de suyo son encubiertos o clandestinos
Los anteriores planteamientos en torno al nexo de la crisis capitalista y la guerra, particularmente las nuevas tendencias en la actual coyuntura histórica, permiten comprender los cambios en la doctrina intervencionista de los EEUU.
La intervención político-militar de los EEUU en diversas latitudes del mundo posee ahora nuevas premisas. El marco conceptual de este nuevo enfoque está recogido doctrinariamente en el “FM 3-24. US ARMY FIELD MANUAL”, elaborado por el ex - director de la CIA David Petraus en el año 2008. Se trata de un balance que surge de la experiencia del imperio en su intervención en Afganistán y que pauta el curso de acción que están siguiendo en los actuales momentos. En esa perspectiva, el tradicional desembarco de marines es sustituido por el desarrollo de la INTELIGENCIA TECNOLOGICA, LA GUERRA PSICOLOGICA Y LAS OPERACIONES ENCUBIERTAS CON FUERZAS ESPECIALES focalizado tal esfuerzo en explotar los conflictos internos y convertirlo en un vector de acumulación de fuerzas combinando diversas formas de lucha
El siguiente decálogo extraído del “FM 3-24. US ARMY FIELD MANUAL” sistematiza las lecciones donde se intenta adecuar las tácticas y las estrategias sobre las bases de las derrotas que han sufrido históricamente el imperio:
• I.- Profundizar las contradicciones interna y explotar las diferencias étnicas-culturales del país a intervenir
• II.- Organizar a los actores oponentes en lo interno y en el exterior.
• III.- Promover el desgaste político-electoral y promoviendo el desconocimiento de resultados y señalando prácticas fraudulentas.
• IV.-Incentivar paros y movilizaciones de calle, empujando la conflictividad social para convertirla en un vector de la acumulación de fuerza en lo militar.
• V.- Inducir deserciones y divisiones en las fuerzas en el poder.
• VI.-Construir corredores fronterizos y promover operaciones extraterritoriales.
• VII.- Ejercer el control territorial en algunas ciudades o regiones que sirvan de GOBIERNO PARALELO.
• VIII.- Impulsar el aislamiento internacional del gobierno a derrocar
• IX.- Infiltrar y posesionar los equipos de fuerzas especiales.
• X.- Entrenar y dotar de armamento, al igual que apoyo logístico a las fuerzas oponentes.
Estas premisas de la nueva estrategia imperial, parte del reconocimiento de las limitaciones políticas y militares que han tenido las intervenciones o invasiones unilaterales por parte de los EEUU:
1.- Recoge el “síndrome de Vietnam”, donde el pueblo norteamericano y la opinión pública mundial rechazó la intervención yanqui. Particularmente en el caso de los ciudadanos norteamericano tal comportamiento estuvo influenciado por el número de bajas (muertos, heridos, desaparecidos, neuróticos de guerra), lo prolongado del proceso y la incertidumbre sobre el final de la guerra prolongada, proceso este que deslegitimó la escalada guerrerista del pentágono e hizo pagar un alto costo político a la élite gobernante. De allí la necesidad político-ideológica de darle otro marco justificativo a las intervenciones, agresiones o invasiones, donde no se comprometiera indefinidamente el empleo de grandes cantidades de tropa y sin violar abiertamente los dispositivos legales y el apoyo de la opinión pública.
2.- La naturaleza de las mayorías de los conflictos en la postguerra, son de resistencia locales con raíces sociales, étnica o nacionales, luchas focalizadas territorialmente, pero con un enemigo invisible y escurridizo donde se expresan variadas formas de lucha, con predominio de la guerra de guerrilla. Estas características inutilizan las formas convencionales de guerra, con el empleo de armas tradicionales basadas en el volumen de fuego y gran despliegue de tropas.
3.- La intervención unilateral se deja como último recurso, pero en general se trata de darle legitimidad institucional para actuar bajo el mandato de la comunidad internacional o a través de múltiples alianzas.
4.- De igual forma, en este marco doctrinario, se trata de copiar los procedimientos y tácticas empleadas por la insurgencia, manejar el terreno para imponer el control territorial, sacarle partido a algunas costumbres y tradiciones, aprovechando las diferencias étnicas, culturales o religiosas. De allí el reconocimiento del contexto socio-cultural y las especificidades locales y nacionales, por lo que intentan dar respuestas concretas a situaciones singulares. Esto permite trabajar los conflictos inter-étnico y las diferencias regionales.
II.- AGUDIZACION DE LA CRISIS ORGÁNICA DEL CAPITAL Y LA RESISTENCIA A LA EXPLOTACIÓN.
Hoy en día, cualquier lector consigue en la prensa diaria múltiples indicadores de la crisis global que vive el sistema capitalista:
-- Por un lado, está el déficit fiscal, acompañada de recesión y desempleo en los EEUU, pasando por el colapso financiero de países europeos como Grecia, España, Italia, Francia donde al mismo tiempo que sube el desempleo y bajan los salarios, los respectivos gobiernos aplican medidas de austeridad que han eliminados los seguros de desempleo, han afectado las jubilaciones, en fin, vienen aprobando paquetes para recortar el gasto público y eliminar la seguridad social.
-- Por el otro, abundan informaciones sobre la conflictividad social en ascenso: huelgas, paros, emergencia de los “indignados”, protestas de los explotados y oprimidos defendiendo sus condiciones de vida y de trabajo. Esta onda expansiva de la lucha social llegó a los EEUU y se extendió a nivel planetario: en 82 países hacen suya la protesta de los ‘indignados’, manifestándose contra la crisis.
-- Tampoco están ausente las graves manifestaciones de la hambruna planetaria, la crisis energética y el impacto del cambio climático.
-- No podían faltar los síntomas de la anomia social: pérdida de identidad, drogadicción, criminalidad, clima de violencia y neurosis colectiva.
-- No se deja de reseñar, por supuesto, las guerras de rapiña impulsada por el imperio en diversos países, incluida la última aventura militar en el caso de Libia.
En su conjunto estos son señales fragmentadas del colapso histórico del régimen de producción capitalista, donde han fracasado las formulaciones y justificaciones ideológicas neo-liberales o neo-keynesianas que comúnmente presentan versiones atomizadas y dispersas de tal realidad. Para los apologistas burgueses hoy le resulta embarazoso explicar este proceso de deterioro creciente del sistema, montada sobre la lógica del mercado y la especulación financiera.
Por ello, no puede resultar paradójico que después de algunas décadas donde se decretó la MUERTE DEL MARXISMO Y LA DESAPARICIÓN DE LUCHA DE CLASES, hoy estemos en presencia del resurgimiento de ambos:
* Las formulaciones realizadas por Marx en su crítica a la economía política y particularmente sus distintas lecturas de las crisis capitalistas y su carácter orgánico, poseen hoy una extraordinaria vigencia.
* La confrontación entre el capital-trabajo en todo el globo terráqueo se ha acentuado, lo que hace pronosticar el ascenso de lucha social y una nueva oleada de conflictos de diversas magnitudes, apareciendo lo que Engels denominó “GUERRA CIVIL ENCUBIERTA”: miles de muertes diarias por hambre y desnutrición, por exclusión social y enfermedades, por drogadicción y violencia criminal. En el marco de la lógica del capital no aparece en el horizonte otra cosa que muerte y destrucción si no logramos su derrota a tiempo, teniendo vigencia la consigna “SOCIALISMO O BARBARIE”.
Como ya observamos, en diversos territorios del globo terráqueo, la crisis orgánica que confronta el régimen capitalista afecta de diversas maneras a una importante franja de explotados y oprimidos, agudizando las contradicciones político-sociales y incrementándose los conflictos, movilizaciones y protestas. Estas luchas se expresan en diversas dinámicas cotidianas:
-- Dinámicas de sobrevivencias, como es el caso de las movilizaciones ante la hambruna y otros padecimientos crónicos.
-- Dinámica de resistencia, frente a la ofensiva del capital para desvalorizar el salario y precarizar el empleo. Por ejemplo, en Grecia, España e Italia, las políticas anti-crisis afectan la seguridad social y detonan procesos de movilización con huelgas y paros. Igualmente se manifiestan en luchas de liberación nacional frente a las agresiones imperialista que buscan apoderarse de los recursos naturales.
-- Dinámicas alternativas, con expresiones anti-capitalista, las cuales abarcan desde la esfera de la producción y distribución de bienes alimenticios proponiendo el “consumo responsable” hasta la esfera política donde se reivindica la democracia directa, tal como surgió en España con los “indignados”.
En los actuales momentos, globalmente se estructura un mapa de conflictos, donde se involucran una diversidad de actores sociales: clases, etnias, nuevos movimientos sociales, naciones.
En su conjunto, cada sector responde a su manera ante la crisis capitalista, en muchos casos de manera fragmentada y aislada, sin poder ubicar su origen estructural y sus responsables:
- Para los apologistas del capital o sus agentes tarifados, la actual crisis es pasajera y se resuelve con algunos ajustes de corte monetarios o fiscales, eliminando capitales ineficientes, igualmente racionalizando el gasto y aplicando políticas de austeridad al estilo FMI - BM.
- Para los reformistas de todo cuño, también conciben la crisis como fenómeno temporal, la cual puede solucionarse preservando el “Estado de bienestar”, es decir, una especie de capitalismo con rostros humano.
- Para los revolucionarios, la crisis orgánica del capital, está asociada a un conjunto de contradicciones estructurales cada vez más agudas, tal como lo reseñamos anteriormente: formas privada de apropiación del trabajo ajeno o excedente, mercantilización y anarquía en la producción, división social del trabajo cimentada en un sistema de contradicciones: proceso de valorización y proceso de trabajo, valor de uso y valor de cambio, trabajo intelectual y trabajo manual.
Sin superar estas dicotomías que están en la génesis y estructura de la crisis del capital, históricamente no hay salida para el capitalismo, por esto dijimos al comienzo: SOCIALISMO O BARBARIE.
Por supuesto el derrumbe del capitalismo no es automático, ya que su liquidación global demanda un creciente nivel de conciencia y organización de los explotados, la construcción de una nueva subjetividad que hace inexcusable la batalla por construir una internacional revolucionaria.
III.- EL COMPONENTE ANTI-CAPITALISTA DE LA INTERNACIONAL REVOLUCIONARIA.
Como hemos venido sosteniendo nuestro punto de partida es el reconocimiento del régimen de producción capitalista, como un sistema que se sostiene sobre la EXPLOTACION DEL TRABAJO, pero que también integra otros aspectos en la estrategia de subordinación: LA OPRESION POLITICA, EL DOMINIO CULTURAL. Y LA EXPLOLIACION DE LA NATURALEZA. Por esto, cualquier proyecto liberador anti-capitalista necesariamente tiene que destruir la sustentación o base del capitalismo desde una perspectiva global:
- Emancipar el trabajo de las relaciones de sumisión (subsunción formal y real): producción de plusvalía, búsqueda de máxima ganancia, mercantilización y cosificación de las relaciones humanas, enajenación del trabajo.
- Superar la enajenación política a través del ejercicio de la democracia directa y desarrollo de nuevas formas de participación. Reabsorber la sociedad política en la sociedad civil, construyendo un nuevo nexo entre el Estado y el ciudadano por la vía de la democracia directa. Estas premisas se concretan en EL ESTADO COMUNAL Y LA REPUBLICA DE CONSEJOS.
- Construcción de una nueva hegemonía socio-cultural que permita superar la alienación consumista, el monopolio del saber, la estética de la mercancía, implicando una REVOLUCION CULTURAL, LA CONSTRUCCION DE LA SUBJETIVIDAD REVOLUCIONARIA .
- Desarrollo de una relación armónica con la naturaleza en la perspectiva del ECOSOCIALISMO.
En tal sentido, es indispensable construir una plataforma programática donde se articulen las finalidades emancipatorias de largo aliento con las demandas y necesidades de los explotados y oprimidos en la coyuntura.
En esa perspectiva, el programa transformador debe incorporar las reivindicaciones democráticas, anti-imperialista y anti-monopolistas sin abandonar los objetivos del socialismo revolucionario y de igual manera, integrar el conjunto de propuestas y proyectos alternativos que han surgido de las luchas y las resistencia cultural, tales como: la reivindicación de la diversidad étnica, el enfoque de género, la agroecología, la pedagogía y comunicación alternativa, entre otros. Esta plataforma programática es un componente básico del Buen Vivir, que articula en su seno la múltiple expresión de lo nacional, lo clasista, lo étnico y la diversidad de movimientos sociales.
Aquí es necesario establecer puentes entre las dinámicas cotidianas de los explotados y oprimidos (dinámicas de sobrevivencia, de resistencia y alternativas como ya señalamos) estando conscientes que muchas veces estas luchas no rebasan el nivel de lo reivindicativo o se focalizan en las dinámicas de sobrevivencia como son los casos de los reclamos por mejores servicios, empleo, salario, etc.
Se trata de una corriente ideológica presente en cualquier latitud del planeta, la cual en su conjunto de expresiones (individualidades, colectivos, movimientos) emerge en el marco de la UNIDAD EN LA DIVERSIDAD, posibilitando la construcción de un BLOQUE SOCIAL REVOLUCIONARIO compuesto por trabajadores, campesinos, indígenas, ecologistas, intelectuales y cultores populares, movimiento de mujeres, comunicadores y redes de medios comunitarios, movimiento pedagógico, los cuales pueden dar un salto en la coordinación y enlace de las luchas.
En el esfuerzo por construir una internacional revolucionaria es indispensable empujar el poder de confrontación de la teoría crítica y las experiencias anti-capitalistas en todo el mundo. Profundizar la investigación y el debate en torno a las actuales tendencias del capital y la activación de las políticas anti-crisis. Este programa investigativo contempla la caracterización del patrón de acumulación y de reproducción del capital: modalidad de obtención de plusvalía, su impacto en el empleo y en el salario, exigencias técnico-científicas, las nuevas tendencias en la distribución y consumo de mercancía.
IV.- ESTRATEGIA Y PROCESO DE ARTICULACION DE UNA CORRIENTE POR UNA NUEVA INTERNACIONAL
Desechando la fórmula de decretar la constitución de la V INTERNACIONAL, apostamos al desarrollo de REDES DE REDES, como parte de una CORRIENTE POR UNA NUEVA INTERNACIONAL, basado en los siguientes principios teóricos y metodológicos:
1.- Deben construirse espacio para los encuentros de colectivos y militantes afines en lo ideológico, tanto en el planteo anti-imperialista como socialista.
2.- Se trata den una red internacional de colectivos en lucha por propuestas alternativas al capitalismo y de confrontación a la estrategia imperial.
3.- En este contexto diverso se debe partir del reconocimiento de las diferencias y las semejanzas.
4.- Se trata de redes que unifican el esfuerzo solidario y el apoyo mutuo.
5.- Un elemento básico de la identidad programática es el reconocimiento de los enemigos y las fuerzas afines:
- En el caso del campo enemigo, se encuentran el imperialismo yanqui y sus aliados, el sionismo israelí, la derecha alemana, inglesa y francesa, el FMI, BM, OMC.
- De igual manera, en el otro polo se identifica los actores y sujetos sociales alineados con el cambio revolucionario: trabajadores del campo y la ciudad, campesinos pobres: sindicalistas clasistas, equipos del movimiento de mujeres, colectivos revolucionarios, ecologistas, cristianos por la liberación, movimientos indígenas y afrodescendientes, organizaciones no gubernamentales (ONGS), intelectuales.
- En esa misma dirección, se plantea identificar áreas de coincidencia con la insurgencia guerrillera , con los PC de todo el mundo y las diversas internacionales, donde se incluyen las variantes de la IV trotskistas y la Internacional de la Esperanza Zapatista.
- En el campo de las alianzas estratégicas hay establecer un sistema de relacionamiento con espacios geopolíticos como el ALBA, UNASUR, CELAC, MERCOSUR.
6.- En el terreno de la unidad de acción con el anterior cuadro de fuerzas afines, se plantea una metódica que se orienta de la siguiente manera:
- Distinguir los nexos entre revolucionarios, de las articulaciones como pueblos, movimientos sociales y nexos diplomáticos como Estados.
- El sistema de relaciones debe viabilizarse de lo simple a lo complejo, de lo cercano a lo más lejano.
- Aquí cabe distinguir lo que es la unidad, las alianzas y los acompañamientos.
- Todo este proceso tiene un desarrollo desigual, en oportunidades asimétrico desde el punto de vista social-territorial. En algunos casos puede lograrse una unidad estratégica, en otros una simple alianza táctica o acompañamiento puntual.
7.- Esta corriente internacional debe estar cimentada en la UNIDAD EN LA DIVSERSIDAD, con estructuras flexibles, sin rigideces burocráticas o sectarias.
8.- Como parte del esfuerzo unitario, se debe elaborar una estrategia político-militar común para enfrentar las políticas guerreristas e intervencionistas del imperio en forma permanente, coordinando el esfuerzo a través de campañas y jornadas políticas.
9.- Manteniendo cada quien su identidad, respetando ritmo y tiempo de cada experiencia, es necesario el esfuerzo por elaborar una plataforma programática que permita sostener la unidad desde un punto estratégico. Aquí hay que explorar la identificación de ejes temáticos comunes: lucha contra la explotación del trabajo, la opresión, política, la dominación cultural y la expoliación de la naturaleza.
10.- Para solidificar la unidad y las alianzas, se debe impulsar el debate centrado en la investigación y la formación permanente, creando espacios específicos para tales fines.
11.- De igual manera, se deben establecer mecanismos para los encuentros de experiencias, para la puesta en común de los resultados de las diversas políticas, planes y proyectos donde está inmersa la corriente.
12.- Construcción de redes de comunicadores que permita enfrentar las distorsiones informativas y la guerra psicológica.
21 de Agosto de 2013
(*) “LA CRISIS ORGANICA DEL CAPITALISMO COMO TELON DE FONDO Y LA EMERGENCIA DE NUESTRA AMERICA” Reseñado en PARA CAMBIAR LA VIDA. Noviembre de 2012.
( *) “LA ACTUAL ESTRATEGIA DE INTERVENCION IMPERIAL:THE OUTSOURCING OF INTELLYGENCE.” Enero de 2010