Si uno de los elementos centrales del socialismo es desarrollar los mecanismos más adecuados para socializar los medios de producción, ¿Cómo hacer socialismo cuando no existen medios de producción sino, medios de distribución y comercialización, unos medios de producción petrolera estatizados y muchos productos importados?
La única manera de que en nuestro país exista una vía clara hacia el socialismo es que existan medios de producción socializados o que puedan serlo, dejando claro que estos medios de producción son aquellos recursos con los cuales el hombre y la mujer se hacen productivos, transformando materias primas en cosas útiles para el resto de la sociedad con el objetivo de fortalecer el valor de uso y de cambio. Y ¿Qué tenemos hoy en nuestro país?, mucho petróleo, alguna capacidad de extracción, otra poca capacidad de procesamiento, alguna producción incipiente en otros rubros y mucho dinero mal distribuido que se debe gastar en cosas que no producimos y por tanto debemos importar.
Hoy, en el marco de unas medidas administrativas desarrolladas por el Presidente Maduro, que atienden un problema de acceso a bienes que se han convertidos en "una necesidad", se hace aún más necesario entender los riesgos de una acción que siendo absolutamente correcta y que goza del más amplio apoyo popular, nos pone ante varias disyuntivas que deben ser resueltas: Al bajar los precios de los electrodomésticos, etc. ¿hemos logrado que quienes necesitaban de determinados productos accedieran a ellos? o ¿Hemos estimulado que sin una necesidad sentida, una serie de consumidores compulsivos hayan logrado comprar productos que después podrán ser nuevamente objeto de acciones especulativas pero ahora en un nivel tan miscroscópico que el Estado no pueda intervenir para corregir el problema?
El otro dilema que estoy seguro debe ser parte del diagnóstico que permita resolver el gran reto que se presenta en el muy corto plazo es: Si hemos develado la condición de usura de una gran parte de los dueños de los centros de venta más grandes del país, ¿Estamos organizados social, política y económicamente para sustituir a estos usureros por importadores y distribuidores honestos que tengan la infraestructura inmediata para resolver el suministro regular de estos bienes, sin que esto se convierta en un sistema burocratizado que nos conduzca a colas y corruptelas detestables?
En mi artículo anterior: "Saqueo" ( http://evansnicmer.blogspot.com/2013/11/saqueo.html ), formulé una serie de recomendaciones que atienden estos y otros asuntos, y los invito a remitirse a ellas para captar la visión integral de las propuestas. Hoy quisiera sugerir otra serie de medidas complementarias que pueden afinar las acciones ya emprendidas, entendiendo que si no se acompañan las medidas administrativas tomadas, podríamos ir a un terrible fracaso de la primera acción popular exitosa del Presidente Maduro y su impacto en las elecciones municipales podría ser fatal, y por el contrario, el éxito de las mismas en un primer lugar es beneficioso para todo el país y podría servir de "envión" para el reimpulso revolucionario y socialista que necesitaba el gobierno de Maduro, por ello:
1. Se debe generar un espacio político de debate sobre las próximas medidas económicas a tomar: propiciando un ambiente democrático con sectores partidistas aliados y espacios críticos y comprometidos con el avance en la construcción del socialismo para así democratizar las acciones que garanticen la continuidad de una política pública determinante para el futuro del país.
2. En el marco de la Ley Habilitante, se debe restablecer el Precio de Venta al Público (PVP) como obligatorio en el marcaje de la fabricación o importación de productos, incluido de una vez en el empaque de fábrica o en el empaque sustituto de la empresa de importación, donde se especifique con que dólar fue adquirido, cuanto es el costo de producción y cual es el porcentaje de ganancia que se aplica en la cadena de producción y/o distribución: En la actualidad el Precio de Venta Sugerido es considerado una burla al consumidor, ya que debemos recordar que la existencia del PVP fue aplicada mucho antes de la llegada del Presidente Chávez al poder y esto empoderó a la población de la capacidad de generar control a la especulación. En la actualidad el marcaje y remarcaje es absolutamente impune, ya que estas etiquetas no tienen referencia fija en el empaque del producto, para así reclamar con elementos probatorios rápidos y contundentes.
3. Generar una campaña de concienciación a la población venezolana sobre los tipos de consumo, que permita develar al consumismo y convoque a un consumo racional: Existe el consumo capitalista, que se subdivide en el consumo acumulador: adquisición de bienes innecesarios como consecuencia de la necesidad creada de poseer por culto a la cantidad de lo que se tiene; el consumo acaparador: que se genera por temor al desabastecimiento, el consumo especulador: que acumula con el fin de esperar el mejor momento para revender; el consumo hedonista: poseer por placer de tener; el consumo inducido: generado por la publicidad y los medios de comunicación; el consumo clasista: desarrollado a partir de la pretensión de obtener estatus social, y existe otro tipo de consumo tal como, el consumo necesario: basado en la realidad de una condición vivida; el consumo planificado: aquel que preve el uso en un tiempo determinado con base en la posibilidad de compra; y el consumo consciente: que es la síntesis de los dos anteriores más la capacidad de entender realmente lo que se requiere para vivir bien o vivir viviendo. Con base en estas categorías puede desarrollarse una campaña que estimule las últimas tres categorías, pretendiendo corregir los estilos de consumo inadecuados, pero sin hacer culpable al ciudadano de la escasez, el acaparamiento o la especulación.
4. No se debe permitir que la lucha contra la corrupción sea arrebatada por la oposición venezolana, asumiendo como nueva bandera el develar y exigir justicia ante la desproporcionada estafa denunciada por el Ministro Giordani sobre el "robo" o desfalco de más de 20 mil millones dólares del Sitme: la denuncia del Cadivismo, encabezado por el Presidente Maduro ha generado expectativa de lograr la publicación de los responsables del desfalco más grande que se ha denunciado en nuestro país, por ello, asumir esa bandera sería la estocada final a la cruzada contra la duda que pueda existir sobre la voluntad real de lucha contra la corrupción.
Las medidas que ya he recomendado y las que sigo recomendando no son medidas económicas socialistas, son simples acciones que podrían fortalecer las medidas administrativas (tampoco socialistas) tomadas por el Presidente Maduro, en miras a la recontrucción de un camino extraviado al socialismo.