Ahora si torció la puerca el rabo, me dije, cuando oí al Dr. José Vicente Rangel esta mañana afirmar esto, frente a Luis Vicente León de DATANALISIS. Ya con el doctor Giordani casi me caigo de nalgas y ahora y sin que nadie se lo estuviera preguntando, mi ídolo intelectual, hace tremenda afirmación sobre las expropiaciones realizadas durante las últimos 15 años por el gobierno revolucionario del Comandante Chávez.
Fue tan duro el impacto de la afirmación de José Vicente, que el entrevistado trató de remendarle el capote, diciéndole que no podía opinar si eran injustas o no, sino que habían sido ineficientes, pues todas las empresas expropiadas habían involucionado para atrás y ahora no producían sino corrupción.
Yo no podría afirmar si existen expropiaciones injustas y/o justas, lo que sí sé, es que para poder acabar con el latifundio y el capitalismo depredador a alguien hay que quitarle los medios de producción para asignarlos a los trabajadores y que estos sean los dueños de lo que le han robado y han puesto a producir. Decir que las expropiaciones realizadas por el Comandante fueron injustas, es igual a afirmar que todos los que hemos acompañado este proceso revolucionario fuimos manipulados por un hombre, que como encantador de serpiente nos “bajeó” y nos engañó como niños.
Para mi es inaceptable que hombres, de la talla de José Vicente y Giordani, que han estado durante 15 años apoyando un proceso, jugándose la vida por él y teniendo responsabilidades protagónicas, de pronto descubran que la cosa no era, como era; sino que ahora se dieron cuenta que las cosas no debían marchar como marcharon y llegó el tiempo de rectificar. Que digan que algunas cosas no salieron como debieron haber salido, debido a que los seres humanos no somos perfectos, eso es aceptable; pero de allí a decir que la actuación del Comandante fue motivada por la injusticia y no por lo contrario, esa sí que no me la calo.
Yo he leído casi todos los artículos de Toby Valderrama y Aponte, acusando a Nicolás Maduro de estar volcado hacia la derecha, haciéndole concesiones a los empresarios y he salido en defensa de Nicolás, porque considero que las condiciones económicas dejadas por el Comandante, asesorado por Giordani, no permitían que el heredero de Chávez pudiera cazar una pelea frontal contra un capitalismo, que lo que hizo fue potenciarse durante los últimos 15 años.
La actitud de José Vicente, dándole la razón a todos los señalamientos que hacia el presidente de Datanalisis, no argumentándole en contra y sobre todo , afirmar que las expropiaciones han sido en su mayoría injustas, me quebraron por dentro. Perder dos ídolos en menos de 15 días pega duro y más cuando hemos puesto nuestra fe en ellos.
Quedarse callado frente a alguien que afirma que el Desabastecimiento y la Inflación es sólo responsabilidad del gobierno de Nicolás Maduro y que éste debe hacer concesiones y dialogar , si quiere que éstos problemas dejen de existir es aceptar el chantaje como práctica política, sabiendo además que la producción y distribución de los productos de primera necesidad están en manos de la empresa privada.
Si aceptamos que las expropiaciones fueron injustas, que los capitalistas se han enriquecido más y que el país está viviendo una crisis por el mal manejo del Estado, entonces bajemos la Santamaría y cerremos el negocio revolucionario. Nadie que tenga cuatro dedos de frente va a apoyar un régimen de gobierno, que durante los últimos 15 años ha ido de fracaso en fracaso y además ha sido injusto creando miseria y desolación. Ese discurso no podemos comprarlo.
