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¿Qué está detrás del interés de frenar la constitución de los Consejos Comunales de Planificación en Políticas Pública (CCPPP), mejor conocidos como Consejos Comunales?. ¿Es acaso posible comprender ha estas alturas que intereses mueven el constante retardo en la definición de estrategias para la constitución de los CCPPP?.
Recordemos cosas claves para el desarrollo de esta idea. Los Consejos Comunales de Planificación Pública (CCPP), nacen como espacios públicos de participación popular, que permiten la articulación de todos los sectores, agrupaciones y organizaciones sociales, con el único fin común de mejorar la calidad de vida de la comunidad con una visión colectiva.
El establecimiento de Los Consejos Comunales de Planificación en Políticas Públicas (CCPPP), gira en torno al concepto de comunidad que se construye a partir de una realidad común tanto de espacio físico, de relación humana, de identidad social, de historia común, de servicios públicos comunes, de tradiciones culturales similares, y de problemas compartidos en áreas tales como la económica, la social, la urbanística, etc..
Los Consejos Comunales de Planificación Pública (CCPP), nacen del espíritu de las asambleas de ciudadanos y ciudadanas, consagradas en el artículo 70 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela como medio de participación y protagonismo del pueblo en ejercicio de su soberanía en lo político, además de atribuirle valor vinculante a las decisiones dadas en este espacio. Cuando hablamos de vinculante, le imprimimos a las decisiones de las asambleas un carácter de mandato popular, que implica el obligatorio cumplimiento por parte de las instituciones públicas vinculadas a la decisión asumida.
Nada puede estar por encima de las asambleas de ciudadanos y ciudadanas, y Los Consejos Comunales de Planificación Pública (CCPP), están subordinadas a las decisiones que ellas tomen, sin embargo, los CCPP son el brazo operativo y ejecutor de las decisiones que en las Asambleas de Ciudadanos y Ciudadanas (ACC) se asuman. Es importante aclarar esto en función de comprender donde radica el verdadero poder popular.
Sin embargo, a esta altura, este proceso de democratización todavía no posee tecnología para su aplicación y dudamos que exista una verdadera voluntad política, por parte de algunos sectores locales, para su instalación como instancia primigenia y fundamental de consolidación del “poder popular” tan vilipendiado por el uso demagógico que se le ha dado últimamente.
Es importante destacar que en Caracas se realizó un importante esfuerzo por cohesionar múltiples esfuerzos que se estaban realizando por parte de distintas instituciones gubernamentales, llamada “cuatripartita”, que lamentablemente fueron incapaces de asumir su papel de facilitadores del proceso de constitución de los CCPPP, y vieron en ellos una estructura más, capitalizable como otras, para demostrar el control político de facciones que pretenden atribuirse el poder popular como una extensión de su poderío tendencioso y partidista.
Visiones como esta, utilitaristas y pragmáticas desde una perspectiva politiquera, seguro arroja saldos políticos importantes a la hora de mostrar músculo político aparente ante el jefe, pero la verdad es que a mediano o largo plazo las consecuencias son fatales. Le estamos declarando la muerte a la soberanía popular, y estamos dejando en manos de ineptos cuartorepublicanos con boinas rojas la responsabilidad de enrutar a nuestro país hacia el nuevo socialismo.
Esto, seguro se deriva de personajes capaces o no, pero seguro, hedonistas del poder, gozones de la política que a manos llenas y capacidad mediática, canalizan sus perversiones y miserias humanas ante lo que para otros es verdaderamente la salida de escape ante tantos engaños politiqueros y tantas frustraciones acumuladas por profundas desgracias electorales, los CCPPP.
¡Cáigale a quien le caiga!, permitir que los CCPPP se conviertan en otros “círculos patrióticos”, “círculos bolivarianos”, “Unidad de Batalla Electoral”, etc. pone en riesgo el verdadero socialismo del siglo XXI, su naturaleza es otra, es ser la organización de las organizaciones populares.