Ningún país del mundo ofrece tantas ventajas al sistema económico capitalista como el que se les se da en la República Bolivariana de Venezuela. Veamos las razones por las cuales se podría considerar a nuestro país el paraíso donde el capitalista obtiene las mayores ganancias a su inversión y en el más corto tiempo:
Lo primero a constatar es que El Capitalista, de la nacionalidad que sea, no tiene que hacer ninguna Inversión en dinero o bienes de Capital. El Estado le provee dólares para que pueda adquirir las materias primas que necesite, tanto sea para producir o importar el tipo de mercancía que se le pueda ocurrir. En todos los demás países del mundo los capitalistas deben hacer inversiones propias, estudios de mercado, crear infraestructuras, preparar mano de obra, hacer publicidad, crear el mercado, Seguridad para sus vidas y la legalidad para sus acciones, Etc. En Venezuela todo eso ya fue hecho por el Estado venezolan durante los últimos 56 años.
En todos los demás países del mundo los Capitalistas entran en pánico y sufren de pesadillas porque tienen stock de mercancías sin venta, por los sindicatos que exigen mejoras salariales, por los impuestos que les pecha El Estado, por la Mano de Obra Calificada, por el hampa lumpen y por la corrupción de funcionarios públicos. Todos esos problemas que sufren los demás capitalistas del mundo, en Venezuela ya fueron solucionados y veamos cómo funciona la cosa:
1.-Toda mercancía producida e importada tiene asegurado un mercado cautivo y con compradores, preparados psicológicamente y poder adquisitivo, capaces de morir en una cola esperando y rogando que se las vendan al precio que sea. En todos los demás países del mundo, los capitalistas deben hacer inversiones en publicidad para que la gente vaya a sus negocios a comprar y crean sistemas de bonos acumulativos para incentivar las compras. En cuanto a los Precios El Estado les obliga a colocar un 30% mínimo de ganancia y de allí para adelante los que le venga en gana. En todos los demás países del mundo los Capitalistas tienen que competir a muerte en un Mercado nada seguro, donde son sometidos a las Leyes de la Oferta y la Demanda para fijar precios y correr infinitos riesgos en las inversiones que hacen para colocar sus mercancías.
2.-Los Sindicatos de Trabajadores aquí no son problemas y resultan los aliados más firmes con que cuentan los Capitalistas. Para guardar las apariencias, se colocan etiquetas de “bolivarianos y revolucionarios” e intentan asustar a los dueños de las empresas, pero estos se ríen de ellos, pues saben que El Estado los protege y ante cualquier demanda salarial inflacionaria, El Estado les hace el trabajo, fijándoles salarios mínimos, que mantiene quietos a los trabajadores durante los próximos subsiguientes 12 meses, tiempo que aprovechan los capitalistas como excusa, para aumentar 10 veces más los precios de las mercancías, por encima de los salarios decretados. En todos los demás países del mundo los Sindicatos luchan por mejoras salariales, condiciones de trabajo dignas, seguridad social y van a paros. En Venezuela esas reivindicaciones son manejadas por El Estado y para asegurarse que así sea, tanto El Presidente de la República como el Ministro del Trabajo son sindicalistas y lo que más les importa es la Paz Social.
Los Capitalistas que operan en Venezuela muy pocos pagan impuestos. El IVA se les cobra al comprador y el empresario No da facturas y el cliente no tiene forma de hacer denuncias ni reclamos. Gran parte de los funcionarios recaudadores viven muy bien y algunos son muy amigos de los dueños de las empresas, es tal que llegan hasta emparentarse en primer grado de consanguinidad.
Por la mano de obra calificada los capitalistas no sufren. El Estado tiene y mantiene las mejores Universidades y Tecnológicos del país para preparárselos. Es tal que uno de sus logros es tener el reconocimiento de ser el 5to. País del mundo con mayor matrícula universitaria. Es tal la cantidad de egresados universitarios, que se han convertido en materia prima de exportación y gran parte de ellos son contratados por capitalistas de otros países para ayudar al desarrollo de sus empresas.
En cuanto al hampa lumpen y el matraqueo que a veces incurren funcionarios corruptos, El Estado los mantiene bajo control con OLP y cambios a puestos fronterizos. Toda una política de Seguridad Integral para proteger a los Capitalistas y permitirles vivir en El Paraíso que es Venezuela.
Siendo todo verdadero lo anteriormente descrito, ¿cómo es eso que ahora, como en los tiempos de Adán y Eva, los Capitalistas quieran más y se estén dejando tentar para probar el fruto del árbol prohibido del “Golpismo”, que les ofrece el demonio del Norte y que según él, si llegan a comerlo, tendrán el mismo Poder de “Dios Estado”; creador y dueño del Paraíso?. ¿Llegará a tener éxito el Demonio y como en el pasado serán expulsados los que prueben el fruto prohibido?. He ahí la gran incógnita que en Venezuela estamos dilucidando en estos momentos cruciales para la humanidad.