"Todo en el Estado, nada contra el Estado, nada fuera del Estado". Benito Mussolini…
No deja de sorprender que el fascismo sea parte de la izquierda política venezolana, y esto lo afirmo de una manera no ligera, pero que no son desmentidos por los políticos de ambos bandos, muchos que han sido víctimas del adoctrinamiento, y del lavado de cerebro por el totalitarismo marxista caribeño.
Más allá del debate intelectual, el término "fascista" está siendo utilizado, por la izquierda criolla, como descalificación política entre gobierno, y la oposición. Aunque es notorio que son más fascistas que los que intentan descalificar a sus adversarios con la gastada palabrita. Así se desenvuelve este rebaño politiquero, sin más pelos y señales que el odio y la descalificación pueril. A falta de argumentos, utilizan el insulto como la razón suprema de la descalificación. Fascismo puro, fascistas con sobre peso sin que los afecte la grave situación económica del país...pero siguen utilizando la desgastada palabreja del fascismo. Además, se utilizan la radio y la televisión a mansalva deformando la libertad de expresión, la tolerancia, la crítica, y el fundamento, dejando en claro la decadencia de dónde ha llegado el debate político.
No hemos avanzado nada en la formación de una nueva camada de dirigentes, sino formando aplaudidores de oficio (focas políticas) aquí solo se ven insultos el debate no existe. "Hijo de Puta" es el supremo argumento que utilizan los fascistas bien enchufados que no quieren enterarse de la grave crisis socio económico que se vive en Venezuela.
Es harto conocido que el poder político totalitario se sustente en la domesticación de las masas, y existen varias métodos para ejecutar este aberrante proceso; donde destaca el uso de la violencia, la demagogia, las colas para todo hasta en los puntos de venta para cancelar cualquier producto, y lo mas perverso: cuando se manipula el lenguaje, y se tergiversan los hechos históricos, porque el fascismo sabe que está mandando mensajes a las masas de personas ignorantes en temas como: la economía, la historia, y la sociología.
Muchos no se habrán dado cuenta que de las recientes visitas del presidente a Cuba la izquierda opositora ubicada en la mud no ha criticado en nada esa visita, ya que en su competencia por el poder, obvia su artimaña con la retórica, que consiste en etiquetar de nazis, y fascistas a sus adversarios en el psuv, y estos utilizan la falacia que pretende equiparar al fascismo con la llamada derecha endógena, con el objeto de desacreditar la reputación de sus dirigentes mas claros no militantes de la izquierda marxista totalitaria, frente a sus simpatizantes, y ganar mas lumpen político a su causa, generalmente con dos fines: el de mantener el poder del Estado. Solo basta con analizar la coyuntura política actual para darnos cuenta que esta estrategia, bien sucia, le ha resultado positiva a estos innobles politiqueros de oficio. La ignorancia del pueblo es uno de los recursos que el fascista explota con gran audacia. Soy formado en la izquierda cristiana por si acaso de una mala interpretación por este comentario, muy alejado de los petudos socialistas marxistas, y fascistas estalinistas: los eternos amantes del estado totalitario corporativo.
El fascismo es una ideología cargada de perversas connotaciones negativas, donde el estalinismo se ha dedicado a propagar la idea de que el marxismo estalinista frente al fascismo son ideologías antagónicas, pues ha sido un trabajo planificado por el estalinismo totalitario cubano interesado en distraer la atención del pueblo venezolano quien sufre eta grave crisis económica. Mi opinión equivocada para unos y acertada para otros es un deber indeclinable como demócrata militante de la izquierda no marxista fracasada, develar ante el pueblo venezolano la verdadera naturaleza antidemocrática, y totalitaria del fascismo.
Es necesario entender que la lucha que se ve en Venezuela entre los que defienden este marxismo-militar- fascista, que estamos viendo, no es precisamente una lucha de ideas, o de aspectos trascendentales de fondo sobre filosofía política, o de principios éticos en los manejos del gobierno, es una lucha pragmática de retención del poder con fines socios económicos. Estas fuerzas enfrentadas no todos sus dirigentes como es obvio, son polos opuestos, ni visiones contrapuestas de utopías desfasadas, son el complemento bien definido de pares: con el mismo programa totalitario de dominación de las masas, peleándose por el control, del Estado venezolano.
Si oteamos rápidamente esto, sustentados en trabajos de grandes ideólogos estudiosos de este tema, el padre del fascismo como doctrina política fue Benito Mussolini; cuyo efecto tiene su origen directo en el marxismo, hasta el punto que se sostiene que en el aspecto de su teoría, y de su praxis política económica las diferencias de aproximación son mínimas. Donde el proyecto fascista de gobierno proyecta la unidad proletaria en el marco nacionalista en su identidad con la patria.
Mientras que el partido comunista, sostiene que la patria es un concepto burgués, ya que los trabajadores no cuentan con patria alguna, y buscan la internacionalización de la clase proletaria en una unidad suprema.
El fascismo como gobierno convive con la propiedad privada de los medios de producción, pero con un mercado controlado, aplicando un régimen proteccionista-asistencialista bajo el control de un Estado corporativo, en pocas palabras la propiedad privada con el control perverso del Estado, generando como resultado: la escasez, especulación, corrupción, inflación, a diferencia del proyecto comunista que es el de abolir la propiedad privada.
Ahora bien los políticos de la llamada izquierda (psuv) bolivariana insisten en etiquetar a ciertos dirigentes de la mud como fascistas de derecha, son muchos los que les creen, pero muy pocos los que interpretan sus palabras, cuando se investiga con la paciencia de Job los orígenes del fascismo, se encuentran con un movimiento radical, y violento de izquierda como lo vimos en las actuaciones de las guarimbas, y los colectivos, con muchas afinidades en la Italia de Mussolini, y desbordándose sus malas actuaciones como rio en conuco por toda Venezuela.
En la Italia de Mussolini la pugna de los partidos de izquierda por el poder fue muy dura, que desembocaba en enfrentamientos entre los Facci di Combatimento, los grupo de choque del fascismo, y los grupos de choques violentos de los comunistas, así como la agresión física de dirigentes políticos, de ambos bandos.
El fascismo busca el control absoluto del sistema educativo, bajo el esquema de la formación del hombre nuevo, donde se pretende aniquilar la individualidad, uniformando el pensamiento creando ciudadanos serviles al Estado, al mesías, y a sus fines. El monopolio de la educación constituye una causa fundamental de los gobiernos de corte marxista.
Como se puede ver, el modelo de gobierno del fascismo, se asemeja muchos al del marxismo, ya que resultan idénticos al que plantean muchos políticos de la Venezuela de hoy.