El refranero popular dice, "no hay mal que por bien no venga". Pero hubiéramos podido haberlo dicho al revés porque he notado que las primeras reacciones de sectores del chavismo, celebran el adelanto de esas elecciones como una jugada habilidosa del gobierno aprovechando el "flujo", la marea alta que pudo quedar después de las elecciones de gobernadores, el caos que parece imperar en el sector opositor y adelantándose a la nueva ola de descontento por ese como tsunami que parece la subida de precios desatada desde que el gobierno anunció los precios acordados y repotenciada a raíz de las elecciones, como si estas fuesen motivo para aquello y la cada vez más creciente disposición de gente opositora a leer mal lo que escrito bien está. Es decir, quienes todavía creen en los sueños de Chávez y eso celebran, pudieran estarlo haciéndolo con "alegría de tísico".
El CNE tan rápido y eficiente como no lo parece el gobierno para contrarrestar la acción desbastadora de los factores económicos contra el ingreso del venezolano y ese como embelesamiento discursivo sobre asuntos intrascendentes de la ANC, cosa que digo corriendo el riesgo de alterar algún indispuesto y caer en el pecado mortal de "traición a la patria", inmediatamente llamó a presentar candidaturas a partir de este lunes. Si el Estado todo funcionaria con la eficiencia y rapidez del organismo electoral, este país fuera algo idílico; quizás por eso mismo la oposición tanto lo ataca y hace inusitados esfuerzos por desacreditarlo.
Fue tan inmediata la respuesta del equipo que encabeza Tibisay Lucena, que agarró a la MUD como entre primera y segunda, no intentando robarse esta base, sino distraída en discusiones consigo misma derivadas del pasado lejano y reciente. Tanta fue la sorpresa que en ese universo de inmediato se dudó entre ir a esas elecciones, hacerlo cada uno por separado o gritar fraude de una vez y no esperar que canten la lotería. El señor Freddy Guevara, el mismo de las guarimbas, sin consultar lo suficiente, porque su expresión misma, estilo y forma, lo denuncian, advierte que "expulsarán de Voluntad Popular a quienes de ellos participen en las elecciones municipales". A última hora, habiendo terminado este artículo, AD y Primero Justicia repiten el discurso de Guevara, tal como si la historia hubiese reculado. Pero no es exactamente así, el asunto está en fallas o virtudes de la maniobra. Y esto, más el impacto de los resultados del 15-J, lo celebra alguna gente como resultado de una jugada habilidosa, digna de elogio y hasta genial del alto comando porque casi garantiza la "victoria" o para mejor decirlo, una derrota opositora y nuevos motivos para dividirse. Pero parece todo lo contrario, como solía decir Carlos Andrés Pérez.
Si el mundo fuese tan simple, la vida política tan sencilla y claro el destino de eso que los chavistas llaman "el proceso", hasta uno mismo estuviera aplaudiendo y rindiendo honores a quienes hacen gala de tantísima habilidad y claridad para manejar este escenario venezolano, pese no sepan qué hacer con "el coroto".*
Si es cierto. Ahora mismo los conflictos internos de la MUD, organismo que casi agoniza, deben estar multiplicándose, como también los improperios entre ellos y las madres sintiendo el dolor del apostrofarlas de unos y otros. También es seguro que en cada grupo de aquélla abundan quienes no sólo quieren ir a elecciones, sino que sean ellos los escogidos y no se manifiesta esto con la calma propia del caso sino el apresuramiento que le impuso la ANC y más el CNE al asunto. La MUD pues debe estar en estado de casi de implosión, si es que todavía no lo estaba cuando en los pies le estalló la carga de dinamita que le pusieron los electores de ambos bandos el 15-J. Pareciera pues que, ahora, ante esta nueva contienda electoral la oposición se halla en peor estado que antes. El gobierno tampoco la tiene a su favor o digamos como muy cómoda, tomando en cuenta como quienes imponen los precios de él se burlan y hasta le humillan, pese se diga y haya quien eso crea que aquí hay una dictadura. Gobierno que más parece aquel personaje de José Díaz "Joselo", creo llamado Salomón Vergara a quien la mujer le tenía los chivos metidos dentro del corral. Pero lo que es más grave, la dirección del Psuv pareciera definitivamente empeñada en cerrar todo espacio y oportunidad de participación y protagonismo popular y democrático a sus compañeros de las bases y simpatizantes, con lo que siguen ampliando el hueco o tumba donde tarde o temprano habrán de depositar sus huesos.
Visto así el asunto, de la manera de los planificadores y quienes aún inocentes eso celebran, parece muy simple, hasta como ya dije, genial y provechosa la decisión del gobierno con la ayuda nada discreta del CNE, al tomarse el asunto con tanta premura.
Claro, quienes así piensan nada tienen que ver con la herencia de Chávez y menos se sienten obligados a cuidarla. Este solía decir, en sus inicios de presidente, "Hasta las piedras hablen" y puso interés que nuestra constitución dejase aquello de lo representativo de cuando la IV República y la asumiésemos como participativa y protagónica. Es decir, que el pueblo se incorporase al debate, al hacer y hasta en el decidir en cuanta cosa fuese necesario, para darle a eso mayor validez y sustento. Y eso se estampó en la Constituyente en vigencia y así mismo se concibió al partido destinado a dirigir el proceso revolucionario que aquel iluso concibió.
Entre quienes celebran la "ingeniosa y habilidosa, casi genial" salida del alto comando, hay de distintas clases. Quienes la concibieron, porque les viene al pelo, aquellos que saldrán favorecidos por esa cosa ya vieja y viciada que se llama la cooptación o para mejor decirlo, el juicio del dedo, los íntimos y adherentes de los anteriores cuyo interés sólo consiste mantenerse pegados a la ubre y los inocentes que no son capaces de aprender y menos aprehender lo malicioso y contrario a la aspiración de Chávez que hay en la jugada. Todo eso juega como una ideologización para el control, donde el interés de las cúpulas por mantener el poder, se sobrepone al crecimiento de los sectores potencialmente revolucionarios que al participar y hasta protagonizar aprenderían a asumir intensa y conscientemente el proceso. Lo contrario, si actúan pasivamente, como el sólo ir a votar por candidatos impuestos, como tales hasta ajenos, como esos que se limitan a administrar, a veces hasta eficientemente, pero sin hacer nada
para impulsar cambios sustanciales en sus espacios y la gente.
La medida o decisión es como una puya de raya, pues desgarra al entrar y mucho más al salir.
Si algo hay de constante y constancia en la dirección del bando oficial, es eso de buscar y hasta hallar siempre excusa para aplicar esa horrible cosa que llaman el "Centralismo Democrático", que en fin de cuenta es hasta más excluyente que lo representativo, porque reduce al mínimo el número de quienes a los más y por el todo escogen. Un Comando pequeño de la alta dirección, escogerá los candidatos a Alcaldes de todo el país, porque "no hay tiempo para consultarle a las bases", como demanda lo "participativo y protagónico". Y no es que ahora vivamos un caso especial, emergente, sino que eso se ha convertido en la regla. ¡El mismo cuento de antaño! Siempre habrá una excusa para posponer la discusión de todo lo que haya que discutirse y elegir en cogollo o cooptar, o lo que es lo mismo negarle a la gente su derecho a opinar y elegir. Y ya, para rematar, hasta disimuladamente, se amenaza a quien ose lanzarse, sin que lo lance el cogollo, pues pondría en peligro el "triunfo revolucionario ¡Qué geniales son esos ciudadanos! ¡Cómo ideologizan!
*"Coroto", palabra que en el lenguaje coloquial venezolano, entre otras acepciones, por el contexto, tiene la de gobierno o poder.