Definitivamente Maduro, Cabello y la claque de cada uno de ellos no tienen límites en cuanto al cinismo. Ellos piensan que el intentar controlar al país de manera forzada, los terminará salvando del colapso político, económico y social.
Ahora los autodenominados "hijos de Chávez", los mismos que han llevado al país a la ruina, no bastando con adelantar la elección presidencial, pretenden aplicar de manera retroactiva el "fin" del período de la elección parlamentaria de 2015, al cual le han llamado una "megaelección" agregando comicios de instancias legislativas regionales y municipales.
En tal sentido, está claro que el próximo paso sería con apoyo de los nuevos "consejos legislativos" y "concejos municipales" (la mayoría de los maduristas son tan ignorantes en materia histórica que no saben las razones de que el regional se escriba con S y el local con C) aprobar también de forma retroactiva el fin del mandato de los pocos espacios que domina la oposición, para llamar a elecciones en esas gobernaciones y alcaldías alegando que "no cumplen" con el mandato del "pueblo", y terminar por supuesto de liquidar todos los vestigios que puedan tener en contra aunque en la praxis, sabemos que ello sería concretado bajo una completa desmovilización de la sociedad, o sea, una minoría apoderándose de un país sometido a la barbarie.
Un gobierno que pretende ir a una "megaelección" en donde el candidato presidencial tiene 17 días para recorrer un país de 916.445 kilómetros cuadrados, 23 estados y más de 100 importantes ciudades y amplias zonas fronterizas, pretende el "árbitro electoral" se pueda llevar un mensaje al país en tan corto tiempo. ¡Claro! Ya dirán los criticastros maduristas que ese mismo tiempo lo tiene el aspirante a la "reelección". No sean hipócritas. No es lo mismo tener a la disposición al momento que se quiera toda una logística del Estado, empleada de manera fraudulenta a favor de un candidato que además tiene bajo su mando a la fuerza armada y los cuerpos policiales, aunado con una estructura de chantaje político con el llamado "carnet de la patria" sobre quienes reciben unos espurios beneficios sociales, así como la imposición de hegemonía partidista que ha impuesto el partido oficialista sobre un importante número de empleados públicos y mal llamadas estructuras "comunales" que la fuerza que pueda reunir cualquier candidato antimadurista en tan corto tiempo.
Ante tal realidad, es decir, que un grupo desde el poder pretende perpetuarse aplicando la más perversa de las seudolegalidades, y la más perversa de las acciones políticas que erigieron los dictadores más sangrientos del siglo XX tenemos que decir: ¡Que no quede duda! Venezuela será invadida.
¡Sí! Venezuela será invadida de una miseria total en donde el hambre llegará hasta la desnutrición en máximo nivel, al punto que en más reciente estudios de la Encuesta de Condiciones de Vida (Encovi) correspondiente al año 2017, determinó que un 80% de los hogares en Venezuela presenta inseguridad alimentaria¹, de los cuales 61% de la población aseguró que se acuesta con hambre, o que 64% por boca de los propios entrevistados, afirma que ha perdido en promedio 11 kilos de peso.
¡Si! Venezuela será invadida por la muerte del bolívar como signo monetario con una devaluación atroz, y una hiperinflación que llegará en el corto plazo hasta las cinco o seis cifras anuales para terminar de asesinar a una sociedad que convulsionará en todos sus componentes, hasta que finalmente el madurismo intente con la hambruna, que comencemos a morir al estilo de un Holodomor del siglo XXI.
¡Si! Venezuela será invadida con la quiebra total de la salud, donde vemos incluso dramáticas protestas con padres encadenados a las puertas de un recinto "hospitalario" exigiendo por la salud de sus hijos, mientras los niños en carteles nos dicen "auxilio, mi riñón y mi vida están en riesgo"². Irónicamente las "autoridades" en vez de buscar alternativas ante el Derecho a la Vida de nuestra infancia, la mejor solución que encuentran es amenazar a las familias con envío de los "colectivos".
¡Si! Venezuela será invadida del colapso de los servicios públicos. Donde vemos el cómo a diario existen protestas por la falta de agua, electricidad y gas, y la paralización del transporte público en toda la geografía nacional.
¡Si! Venezuela será invadida de la quiebra total de la petrolera estatal, cuando la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), señala en su último informe que la producción de Petróleos de Venezuela (Pdvsa) ha descendido desde 3,5 millones de barriles por día en 1998, cuando teníamos unos 13 millones de habitantes, hasta 1,6 millones en enero de 2018 y ahora somos más de 30 millones de venezolanos³. En otras palabras, Pdvsa en unos tres o cuatro años será una empresa totalmente quebrada, la cual seguramente será vendida, por no decir embargada en sus restos de chatarra a cualquier transnacional rusa o china.
¡Si! Venezuela será invadida por la destrucción total de la educación, cuando nuestras escuelas y liceos presentan niveles de ausentismo y deserción estudiantil y laboral en aumento permanente, debido a la pobreza que afecta a toda la comunidad escolar, y cuyo clímax se observa en la deserción universitaria en todos sus niveles, aunado con el deterioro que supone más de un 70% de la infraestructura física de todas las instituciones educativas del país.
¡Si! Venezuela será invadida por la impunidad de una delincuencia que desborda los parámetros de malandros y asesinos, cuando vemos que funcionarios policiales están inmersos en delitos de robo, secuestro u homicidio. O vemos militares que se asocian con mafias para el contrabando de gasolina, oro o cualquier otro producto del cual puedan obtener ganancias fraudulentas. Es tal, la aberración de la podredumbre moral que existe sobre los antisociales que "efectivos" de la "guardia de honor" fueron detenidos por robar a una familia. Verbigracia, si esa es la conducta de quienes custodian el palacio presidencial, qué quedará para el resto, más allá de las individualidades honestas y honradas que existen en esos cuerpos para "defender a la patria".
¡Si! Venezuela será una componenda de corruptos quienes desde lo más alto del poder unirán a Venezuela con Cuba en un solo país violando la Constitución de 1999, al punto que hasta descaradamente el presidente de la República en vez de viajar en uno de los aviones de la aerolínea estatal Conviasa, lo hace sin pudor alguno en Cubana de Aviación, tal y como lo muestran imágenes del propio despacho presidencial⁵, lo cual refrenda hacia donde se aproxima el neototalitarismo madurista en unión del castrismo.
¡Si! ¡Que no quede duda! Venezuela será intervenida y llevada hasta el peor colapso económico y social que haya atravesado país alguno de América Latina de llevarse a cabo la "megaelección madurista" cuyo primer lustro de gobierno nos demuestra el cómo sería el país de seguir al frente de Miraflores; pero que tampoco quede duda que saldremos de esta pesadilla, porque un pueblo no podrá tolerar ni resistir tanta barbarie conjugada con el neototalitarismo perverso de Maduro y Cabello. ¡El madurismo está advertido! A propósito de ser ciego. Quien tenga ojos que vea.
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² https://www.aporrea.org/ddhh/n321253.html
³ https://www.aporrea.org/energia/n320914.html
⁴ https://www.aporrea.org/contraloria/n321283.html
⁵http://elnuevopais.net/2017/10/05/la-gira-relampago-maduro-cubana-aviacion-avion-presidencial-fotos/