Pocas veces las palabras del presidente Chávez habían tenido tantas repercusiones en el mundo económico acá y alguna incidencia en el exterior, ni inquietado a tanta gente, como las que pronunció en sus anuncios cuando juramentaba a sus ministros. El colapso de la Bolsa, aunque no sea un real indicador de la economía, fue el primer síntoma de tales efectos. Hubo quien comprara dólares negros a 5.200 bolívares.
No sólo en el mundo empresarial había incertidumbre. ¿Era el comienzo de un período de estatizaciones? ¿Hasta dónde llegaría el tan anunciado socialismo del siglo XXI? Reaparecieron las dudas, a pesar de que en anteriores oportunidades, como en el Congreso de Fedeindustria, el Presidente había dejado claro que con ese socialismo se respetaría la propiedad privada e invitaba a ese grupo de empresarios a trabajar conjuntamente; y de que hace poco el ministro Rafael Ramírez, en entrevista con Últimas Noticias, informó que tanto en la explotación de la Faja del Orinoco como en la fábrica de taladros que instalarán en cooperación con los chinos se reservaban cuotas para el capital privado venezolano.
La falta de definiciones sobre las características de este nuevo período genera tales incertidumbres. El Presidente ha dicho que terminada la transición entramos a "una nueva era, que hemos llamado Proyecto Nacional Simón Bolívar 2007-2021...
Este año es un año de arranque, vamos a encender los motores".
Pero es evidente que faltan explicaciones. Veamos, por ejemplo: Chávez en su campaña dijo en dos o tres ocasiones que quienes votaran por él estaban votando por el socialismo. Parece que no fue así. Datanálisis hizo una encuesta para Últimas Noticias después de las elecciones y 43% dijo que estaban de acuerdo con la implantación del socialismo del siglo XXI (en mayo 2005 apenas era 19,5%), no se pronunció 22,5% se mostró en desacuerdo 35%. El caso es que un significativa porción de quienes votaron por él no dijo estar de acuerdo.
De lo que se desprende que es necesaria mayor explicación.
Dos cuestiones finales. Una es que parece ser cierto que la real motivación de la decisión de adquirir las empresas del servicio eléctrico y de la telefónica es que en el período que se avecina, de cambios significativos, de avance hacia el modelo socialista venezolano, democrático y participativo, tal como lo ha caracterizado Chávez, pasan a tener una importancia estratégica y de seguridad de Estado.
La otra cuestión es la incidencia a más lago plazo que tales medidas pueden tener en nuestra economía. Aunque hay quienes creen que puede bajar el PIB hasta en dos puntos, todos los indicadores revelan que Venezuela seguirá teniendo un crecimiento, que las perspectivas son alentadoras.
Marco Aurelio García, asesor internacional de Lula, contra las opiniones de la gran prensa de EEUU, dijo que las medidas de Chávez "no alteran el equilibrio geopolítico regional ni afectan a Mercosur, ni que exista una vocación autoritaria de Chávez.
Nacionalización y estatización no son palabras groseras, son medidas de política económica". Ayer en CNN, el analista financiero José González comentó la "solvencia de la región, que no sólo consume sino que comienza a ahorrar", y consideró a Venezuela "uno de los países más incomprendidos", y que tendrá un crecimiento de 7-8% este año. En fin, después de esa turbulencia, la tendencia es hacia la normalización.
En la Asamblea Nacional están persuadidos de que el propio Carlos Escarrá cavó su tumbaenlacomisión que estudiará la reforma constitucional, pues después que Chávez lo había designado públicamente para presidirla, anunció que lo hará Cilia Flores y que Hildegard Rondón de Sansó será uno de sus integrantes.
En Chile, la Fiscalía Nacional Económica y una comisión especial de la Cámara de Diputados investigan cómo se distribuye la publicidad oficial.
El Mercurio ha prohibido que se publique nada de las inspecciones que realizaron en sus libros.
La denuncia la hizo la revista Punto Final por discriminación en esa distribución, que favorece al grupo que más apoyo le dio aladictaduradePinochet.
¿Qué hará José Vicente? Es una de las preguntas que más se formula en estos días. Por lo pronto, estudia dos ofertas de TV para reaparecer con un programa.
Con dos superequipos como se muestran Magallanes y Tigres, la competencia en el llamado round robin de nuestra pelota ha perdido interés.
Cada vez es más remota la posibilidad de que otro amenace con clasificar alafinal.