Comparto el criterio de Rudolf Rocker, pensador y luchador social anarquista alemán quien dijo, en su célebre obra "Nacionalismo y Cultura" que el proceso de transformación social que se inició con El Renacimiento (Inicio: 1453, caída de Constantinopla; fin de la Edad Media, pasando por la revolución inglesa 1642-1688 y finaliza con la revolución francesa 1789-1800), aún no ha concluido; yo, le agrego que su finalización sería cuando se instaure o mejor dicho auto-instaure la Anarquía o Socialismo Libertario; en el Plano Tierra.

Dice Rocker, en su mencionada obra "Nacionalismo y Cultura"; en el Libro Primero; Capítulo 8, el cual versa sobre "Las Doctrinas del Contrato Social", en donde resalta las cualidades pagana del renacimiento que este "..había despertado de nuevo el interés de los hombres por las cosas terrestres, y dirigió su atención otra vez a problemas que apenas se habían vuelto a discutir desde la decadencia del mundo antiguo…",.

La encargada de haber hecho esta obra titánica, heroica y mesiánica fue la tendencia que hoy conocemos como "El Humanismo". Hoy, en los 2020- , la boliburguesía en Venezuela le quieren dar un cariz contemplativo, espiritualista, desideologizado y sobre todo un carácter no combativo y beligerante, algo descafeinado como lo son ellos en lo ideológico porque se han desviado hacia la derecha, pero no tienen la valentía de decírselo a las bases revolucionarias del chavismo y siguen disfrazados de "socialistas", "anti-imperialistas" "bolivarianos-revolucionarios", "Izquierda"; no, no. El humanismo fue una tendencia del pensamiento que nace rebelde, en combate, en un momento de alta peligrosidad para ese tipo de idea, ya que es insurgente en contra de la Escolástica, en lo intelectual y en lo político choca con la religión católica que no solo era poder espiritual sino poder muy real y material y aun estaban prendidas las piras de la inquisición; en esas circunstancia nace el combatiente y muy arriesgado "Humanismo", ya que muchos de sus adherentes fueron mártires y héroes, pagaron con sus propias vidas la osadía de profesar esas ideas.

En la obra mencionada, describe Rocker la proeza del humanismo y agrega: "La gran significación histórica del humanismo naciente estaba justamente en el hecho de que sus representantes superaron las trabas espirituales y saltaron por sobre la maraña de las fórmulas muertas de la escolástica y volvieron a colocar al ser humano y a su ambiente social en el centro de sus consideraciones, en lugar de perderse en los extravíos de infecundos conceptos teológicos, como habían hecho los portavoces del protestantismo victorioso en los países nórdicos.". Este último señalamiento del Anarquista Alemán, se refiere al hecho, que el enemigo de la humanidad en ese momento era el oscurantismo representado en el cristianismo católico o romano y a finales del siglo XV había surgido la Reforma Protestante de Lutero y esta había tenido éxito en los países nórdicos de Europa, pero había seguido la misma línea del catolicismo, irse por el plano de la teología, lo religioso, en verdad, el protestantismo no era alternativa válida para el progreso de la humanidad, en cambio el humanismo sí, porque precisamente rompe con la teología y la milagrería y vuelve a poner los pies sobre la tierra, colocando al hombre y su entorno social, en el centro de la tierra; como el principal problema a resolver, a estudiar, renacen las ciencias.

Son el humanismo, las tesis del derecho natural, aunque esta tiene una connotación religiosa, al principio y en parte, tiene otra forma laica de expresarse; las tesis del contrato social y el liberalismo, refiriéndonos aquí, al liberalismo político y no económico, el cual es una gran farsa que después aclararemos. Todas estas tendencias que se dieron a lo largo de los siglos XV, XVI, XVII y XVIII que su momento cumbre fue la gran revolución francesa; preparan el camino para que surja la tendencia de la anarquía o socialismo libertario, que a pesar de haber nacido hace casi 200 años, es aún el "aquí y ahora" y todo porque la humanidad lleva un atraso de más de 100 años, ya que el socialismo debió haberse dado en el siglo XX, pero se atravesó un extraño indeseable y no invitado que se apoderó del plano tierra y ese es el retardo que aún tenemos.

Aunque aquel humanismo (1450-1650, aproximadamente), inicial u originario desapareció porque se anquilosó; Rocker manifiesta que "…perdió las relaciones con la vida real, y se convirtió en árida sabiduría de gabinete."; y por ello perdió vigencia histórica, perdió lo más importante políticamente la "actualidad"; pero cumplió un papel muy relevante, sirvió de gallo despertador para el mundo nor-occidental o atlántico, que desde aquella época y hasta hoy, segunda década del siglo XXI, es el centro geopolítico del mundo y contra todo pronóstico; ese centro hoy y cada día más se traslada a la Eurasia, digo en contra de todo pronóstico, ya que todos aceptábamos, unos muy pocos con alegría, otros mayoritariamente, con resignación y dolor que el siglo XXI, iba a ser "otro siglo americano" y en menos de 20 años, afortunadamente, la tortilla se está volteando.

Prosiguiendo con el tema, el humanismo a pesar que "patinó" abrió las mentes para que se quitaran las telarañas del cristianismo, incluido el protestante, aunque recién nacido en aquellos tiempos, nació torcido, ya que no superó la fase metafísica o meramente religiosa; en cambio el humanismo emuló el resurgimiento o renacimiento de teorías de la antigua Grecia y Roma, en sus mejores momentos; como las del derecho natural de los estoicos de Zenón de Cito quienes eran liberales y algunos hasta anarquistas, ya que fueron la contrapartida de Platón, el padre del estatismo y por ende del absolutismo que hacía "designar" al monarca o gobernante de turno "por la gracia de Dios" y luego Maquiavelo, Hobbes y Rousseau, convirtieron esa "gracia de Dios" en "razón de estado", "voluntad general" o condensado en la palabra "nación" o "patria", razón de estado, voluntad general o criterio de nación o patria que era "designado" por los poderes fácticos o la conjunción de los esclavistas y agiotistas (Burguesía o capitalistas), con el gobierno en funciones, una elite, o sea, una aristocracia.

El humanismo, aunque como ya dijimos, "patinó", pero sirvió de gallo despertador y emuló al "derecho natural", sobre todo la tendencia laica que le adjudica su origen a la naturaleza misma, a la materia transformadora y vivificante que es el verdadero creador universal, lo que el Maestro Joaquín Trincado llama "éter" y Spinoza llamó "Panté", y por allí ya se empiezan a lanzar las consignas de igualdad, justicia social, libertad, fraternidad o solidaridad, y nace el liberalismo político (No el económico o Manchesterianismo, el cual es un "cuento" de los agiotistas ingleses cohonestado por el marxismo), y se empiezan a blandir y agitar, también, las consignas o programas del "pacto social" o "contrato social", que este para que sea revolucionario no debe ser de "representantes", "escogidos" o "notables" sino aquel que debe nacer al calor de una asamblea popular que nombra a voceros sin poder de representación; y luego, en la continuidad de los efectos del humanismo, insurgentemente salta a la palestra las consignas o programas de la Federación y allí va implícita la comuna, germen del comunismo o fraternidad universal.

Todas estas tendencias en evolución permanente, el verdadero progreso o progresividad humana, estimulantes de la transformaciones y revoluciones sociales; se empieza a cuestionar a la libertad burguesa, a la libertad ante la ley sin igualdad y justicia lo que es una libertad de papel y por allí llegamos al llegadero, al socialismo.

Aunque al principio, el socialismo, este no es perfecto y nace producto de "la inercia" de los regímenes de opresión como socialismo autoritario (Otro de los "indeseables, no Invitados que se apoderaron de todo"), que es la continuidad de las ideas del absolutismo "por la gracia de Dios" o la razón de estado de Maquiavelo, Hobbes o Robespierre que es "hijo" de Rousseau y este socialismo de "transición", siempre termina siendo un mero capitalismo de estado; y en contraposición a este socialismo autoritario, surge el socialismo libertario o Anarquía que elimina no solo al esclavista o capitalista sino a otro privilegio y factor de dominación y desigualdad, el estado, ente inútil e inservible que no sirve para nada y es agente provocador y generador de dominación y desigualdad entre los seres humanos, aparte que produce burocracia, gastos innecesarios y fuente natural y espontánea de corrupción, también. Al estado siempre lo veremos en comandita o en simbiosis con los esclavistas, agiotistas burgueses, es decir los ricos. Este binomio capitalismo-estado, explota y subyuga al pueblo tanto económica como políticamente, es una dictadura de clase opulenta, de verdad.

El Derecho Natural y El Contrato Social "Un Golpe al Hígado" al Absolutismo y La Iglesia:

Dice Rocker, en su obra anotada y en el mismo capítulo VIII sobre el Pacto Social; que: "La doctrina del derecho natural, arrancada al olvido por el humanismo naciente, desempeñó un papel decisivo en las grandes luchas contra el absolutismo, y dio un fundamento teórico a las aspiraciones contra el poder absoluto de los príncipes. Los representantes de esas aspiraciones partían de las siguientes reflexiones: si el hombre posee, desde la antigüedad, derechos innatos e inalienables, no se le pueden quitar ni siquiera por la instauración de un gobierno organizado, ni el individuo mismo puede renunciar a esos derechos. Esos derechos tienen más bien que ser establecidos contractualmente, de acuerdo con los representantes del poder del Estado, y ser públicamente confirmados. De ese acuerdo mutuo resultaba por sí mismo la relación entre Estado y pueblo, soberano y súbdito."

Lo recientemente transcrito, es el punto de partida, de toda rebeldía en contra de la Realeza Absolutista, los Señores Feudales y El Clero Cristiano, tanto Católico como Protestante, que naciente ya se había vuelto reaccionario. Rebeldía esta que ha debido desembocar en el "Socialismo Libertario" o Anarquía, el autogobierno; pero por culpa de un invitado indeseado y no invitado que hizo como "el barbarazo", arrasó con todo, quien ha tenido un cómplice, y son la burguesía y el marxismo y derivados; el verdadero nombre de la llamada muy domingueramente por Marx como "Burguesía" y "Capitalistas" por Adam Smith, debe ser los esclavistas, los acaparadores, los agiotistas, siendo todas las palabras anteriores sinónimas.

A estos acaparadores, agiotistas o "burgueses" lo vemos en la revolución francesa que aún hoy, sigue siendo la revolución por antonomasia, junto al pueblo y el campesinado luchando en contra de la realeza, pero una vez dominados estos, exige que la revolución se frene, no avance más y para lograr ese frenazo contra-revolucionario, la vemos aliándose con sus antiguos enemigos, la realeza, el señor feudal y el clero, para masacrar al pueblo y darle riendas sueltas a su afán de riquezas, su enriquecimiento desmedido a costa del empobrecimiento del 90% de la sociedad y la eliminación, si es preciso de todo vestigio de libertad, igualdad y confraternidad humana.

La lógica de este pensamiento sostenía que el ser humano, posee por el hecho de serlo, por ser de su naturaleza, derechos innatos e inalienables y no se le puede quitar por ninguna autoridad establecida ni el individuo mismo puede renunciar a ellos; en el desarrollo de sus ideas, los sostenedores de este derecho natural, adicionaban que tales derechos debería establecerse en un contrato y ser publicado para que así quedase confirmado el acuerdo mutuo, de obligatorio cumplimiento, entre el soberano y el súbdito, estado y pueblo.

Estas tesis fueron mortales para la monarquía absolutista, los señores feudales y el clero, y aun hoy, es un estorbo para los partidarios del poder imperialista y su estado afín; veamos lo que dijo Napoleón Bonaparte, al respecto que el mismo Rocker lo reproduce en su libro referido "Los hombres del derecho natural tienen la culpa de todo. ¿Quién, si no, ha declarado un deber al principio de la insurrección? ¿Quién ha adulado al pueblo, reconociéndole una soberanía de que no es capaz? ¿Quién ha destruido el respeto ante la ley, haciéndola depender de una asamblea a la que falta toda comprensión de la administración y del derecho, en lugar de atenerse a la naturaleza de las cosas?".

Aunque la relación del poder del estado con respecto al problema social, no debemos verlo en su limitación sino en su eliminación; mientras exista estado, este siempre será opresor reproductor permanente y natural de injusticias, arbitrariedades y sojuzgamiento, al igual que el explotador en lo económico, este siempre será depredador, no se le puede pedir otra conducta, el pueblo, en su mayoría debe adquirir, y ya tenemos la suficiente antigüedad con el capitalismo para tener esa madurez y consciencia para autogobernarnos y no vernos obligados eventualmente a ponerle coto a un tirano o déspota abusador que nos obliga a conducir a una guerra civil o revolución, en donde hay derramamientos de sangre y luego de derrocarlo le entregan el poder a otro vividor astuto que traiciona inmediatamente, hace lo mismo y así vivimos en un permanente revivir de la piedra de Sísifo; pero, repito deberíamos tener la suficiente adultez y dejarnos de vacilaciones, flojeras e indiferencias que no nos conducen a nada y activarnos en los asuntos de la cosa pública que son tan esenciales como los de la alimentación y la salud.

En total las tesis del derecho natural, revividas por el humanismo en el despertar del hombre ante el oscurantismo del cristianismo que dominó y retraso el reloj de la historia por 1000 años, e hicieron un aporte muy útil a la humanidad en su permanente progreso o devenir, ellas dieron origen a otras ideas afines o derivadas como la de Federación que lleva implícita la comuna, su célula fundamental; y a la gran idea madre, la síntesis de 400 años de progreso, a raíz del renacimiento hasta el siglo XIX; el socialismo, la socialización tanto de los medios de producción como del poder político, aunque hasta ahora ha prevalecido el socialismo autoritario o de estado una rémora o resaco del absolutismo cristiano y su continuidad la democracia burguesa, la razón de estado o voluntad general de Maquiavelo, Hobbes o Rousseau o los precursores norteamericanos, que en si es una aristocracia, "la democracia", es la dictadura de una minoría sobre una mayoría carente de derechos, limitados al máximo. Todos estos autoritarismos, tanto los metafísicos como los laicos o "materialistas", han tenido como instrumento de poder, al estado, no es casual el nombre que irónica o cínicamente le puso Hobbes, "El Leviatán" a quien lo vemos descrito tal y como es en el capítulo 41 del libro de Job, en el viejo testamento.

El Estado o "El Leviatán" es el verdadero autor de "la democracia" o democracia burguesa y es el padre del bonapartismo o fascismo, pero también lo es del capitalismo de estado sistema real del socialismo autoritario y por ende del fascismo de izquierda. Les recomiendo que lean mi artículo "El Fascismo de Izquierda" a propósito de la traición de la boliburguesía a la revolución bolivariana que lo único que le queda como fórmula de sostenerse en el poder es aplicando el bonapartismo, la "cara fea" o violenta del capitalismo en las épocas de crisis.

En el próximo artículo que sería la entrega 4 de esta serie referente al "Bolivarianismo Revolucionario", hablaremos sobre "El Liberalismo y La Democracia" que son dos cosas diferentes y denunciaremos a una falacia histórica que nos ha inyectado el marxismo, producto de su "determinismo económico" que del feudalismo (Quien por cierto nunca fue un sistema universalizado) pasamos inexorablemente al capitalismo, que el capitalismo era, o es, una necesidad algo fatal que tenía que venir para que surgiera el proletariado y así pudiese venir el socialismo. El mal denominado capitalismo fue un accidente histórico que no debió haber sucedido, fue un indeseable y no invitado que se atravesó y se impuso como el "barbarazo" y este arrebatón fue cohonestado por el marxismo. Esta entrega 4, mencionada, debió haber formado parte de esta entrega pero por no quisimos alargar mas esta.