A 772 días del inicio de la contingencia en la República Bolivariana de Venezuela producto de la pandemia global de la Covid 19, en el inicio de la semana 111 de esta contingencia, y siendo el martes 26 de abril de 2022, creo importante referirme a un tema del que habló largo y tendido el Presidente Maduro el pasado sábado y muy poco destacado por algunos medios de comunicación y la militancia revolucionaria.
Si bien en mi entrega anterior hice aportes con respecto al reformismo que es una de las principales amenazas a nuestro proceso revolucionario. No es menos cierto también que en estos momentos algunos cuadros y camaradas, con un discurso de ultra izquierda y de más revolucionarios que el Ché, andan preparando las puñaladas para traicionar el proyecto político bolivariano y socialista.
De ahí que por ejemplo, dentro de la casi ratificada en su totalidad actual Dirección Nacional del PSUV y la JPSUV, algunos nombres no figuraron. Como lo expresa un sabio refrán de nuestro pueblo: "A buen entendedor…"
Pero es que esos que no figuraron en esa directiva ni en ninguna de las estructuras del PSUV es porque tienen rato montando otras plataformas de cara a los comicios presidenciales de 2024. Informaciones que llegan pero que no me corresponde a mí revelar en su totalidad, porque ya llegará el momento en que si debemos quitar algunas caretas, algunos lo vamos a hacer.
Pero, no es menos cierta la gravedad de denuncias que ha hecho el Presidente Maduro el pasado sábado 23 de abril en el marco del Congreso del partido.
Dentro de la línea de la lucha a muerte contra la corrupción fue que escribí la entrega anterior de mi columna. Y de hacer el necesario deslinde que el profesor y Comandante William Izarra, a quien no me cansaré de citar, señalaba en sus diferentes procesos de formación político- ideológica en los que tuve la oportunidad de acompañarlo. Los que buscan el poder para usufructuar el poder, sus beneficios y favorecer a grupos y a sus amigotes, principales promotores de la Reforma y de los cambios gatopardianos (Lampedussa dixit). Y los que buscamos el poder para ponerlo al servicio y transferirlo al pueblo. Eso es lo que uno entiende como Revolución.
Pero el otro punto del cual quiero referirme tiene que ver con algunas alertas que desde el mes de enero ya por esta columna hice, al igual que el documentalista y comunicador Daniel Quintero, sobre los planes que tendría Colombia en contra de Venezuela en este año, que hay elecciones generales a dos tandas en Colombia (podrían ser en tres) donde se eligió nuevo parlamento y que el próximo 29 de mayo elegirá al sucesor de Iván Duque como inquilino de la Casa de Nariño, sede de la Presidencia de la República en ese vecino país.
De acuerdo a los sondeos que se manejan, todo indica que el candidato de la izquierda, Gustavo Petro será el nuevo presidente de los colombianos y colombianas, y muy probablemente en primera vuelta. Dios quiera que no lo asesinen y siga Colombia desangrándose por 70 años más. La paz de Colombia es la paz de Venezuela.
Pero el actual mandatario colombiano, Iván Duque, no se quiere ir y traspasar el poder sin antes hacerle daño a Venezuela. Y de ahí las advertencias formuladas por el Primer Mandatario Nacional el pasado sábado.
Y fundamentalmente son planes desestabilizadores que Iván Duque promueve para atacar, fundamentalmente a nuestros efectivos policiales y militares.
Pero no puede descartarse otros objetivos como por ejemplo servicios públicos que vienen presentando vulnerabilidades en estos últimos días, como por ejemplo el Metro de Caracas en el caso de la capital de la República, y el Sistema Eléctrico Nacional, en todo el territorio nacional.
"Iván Duque ha metido grupos de mafiosos que vienen a atacar a policías, militares, atacar a la fuerza pública, así lo denuncio. Estamos detrás de esos planes. Su objetivo es atacar y matar policía como hizo Pablo Escobar", alertó el jefe de Estado durante el V Congreso del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
El Mandatario Nacional detalló que este plan, busca primero matar a funcionarios policiales, para luego ir con los cuarteles militares.
"Primero matar policías para que la policía pierda su moral y luego atacar cuarteles de policías y militares. No estoy hablando por hablar es un plan de la mafia narcotraficante que golpea Colombia", recalcó.
Es decir, la generación de falsos positivos como se le conocen en Colombia, para activar sus células durmientes del paramilitarismo en el país, para sumirlo en el caos, la ingobernabilidad y la violencia, para ponerle cuñas a la estabilidad política lograda tras la derrota de la estrategia de Estado Dual que pretendía licuar a la República Bolivariana de Venezuela con Juan Guaidó como su más fiel exponente y representante.
Pero también se busca con esto ponerle cuñas al plan de recuperación del poder adquisitivo de la población venezolana, que ha dado algunas muestras de mejoría de la situación en Venezuela a pesar del asedio y bloqueo económico que hemos tenido, y siendo consciente que aún falta mucho terreno por recorrer para poder cantar victoria como quisiéramos.
Pero volviendo al tema de la revelación de estos planes conspirativos por parte del Jefe de Estado venezolano, se permitió éste hacer un importante llamado a gobernadores y alcaldes, así como a las bases del PSUV, para neutralizar "este plan de violencia que viene del narcogobierno de Colombia".
También el Presidente Maduro instruyó a la vicepresidenta Delcy Rodríguez, para armar un estrategia, para poder fin a las mafias de la chatarra. A la Ministra del Poder Popular para la Salud, Magaly Gutiérrez para ponerle fin a las mafias en los hospitales, para que todos los centros de salud estén al servicio del pueblo, y con respecto a las mafias del combustible, el presidente Maduro indicó que el ministro de Petróleo, Tareck El Aissami, tiene la tarea para neutralizar estas acciones criminales.
En todas esas líneas de acción esta la labor transversal del Ministro del Poder Popular para las Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Vicepresidente Sectorial de Seguridad Ciudadana y Paz y Almirante en Jefe en la honrosa situación de Reserva Activa, me refiero a Remigio Ceballos Ichaso.
Pero además de ello, y de estas alertas generadas, el presidente Maduro instruyó al ministro para la Comunicación e Información, Freddy Ñáñez, a divulgar todas las actividades y redadas realizadas por las fuerzas de seguridad del Estado, para que se conozca la batalla del Gobierno Nacional contra las mafias.
Indudablemente que lo comunicacional, que muchas veces se confunde con lo mediático, ya lo he expresado en artículos y en ediciones anteriores a esta columna, se confunden. De lo que se trata también no sólo es dar la información de lo que está pasando sino que además el pueblo en su mayoría comprenda el mensaje que se le quiere transmitir.
Y justamente y con esto voy culminando esta entrega, es que me llamó poderosamente la atención de que en el momento en que el Jefe del Estado hacía estas importantes denuncias y alertas, en la señal abierta de Venezolana de Televisión, principal canal del Estado, tuvo fallas de audio que hizo perder por momentos la escucha de las importantes denuncias proferidas por el presidente Maduro. En eso también debe tomar debida nota el Ministro Alfred Nazareth.
Y de nosotros y nosotras, el Poder Popular en acción, nos toca estar alertas, atentos y atentas y prevenidos y prevenidas. Aplicar aquello que dijo en su momento "La Negra" Antonia Muñoz al propio Comandante Chávez cuando le dijo: "Candelita que se prenda, candelita que se apaga…"
¡Bolívar y Chávez viven y sus luchas y la Patria que nos legaron siguen!
¡Independencia y patria socialista!
¡Viviremos y Venceremos!