El que pueda irse que se vaya

Leyendo algunos artículos que hoy aparecen en Aporrea, entre ellos el de mi amigo Oskar Heck, lo que me provoca es gritar a todo pulmón: ¡!!váyanse al mismísimo imperio, hijos sin patria! .   Por eso nunca he criticado a ninguno de los que (según la ONU 7 millones) se han ido por estar convencidos que aquí no se puede hacer nada por mejorar nada y que todo está perdido.  Esos valientes ciudadanos patriotas, en su mayoría con títulos universitarios, otorgados en las inservibles universidades que hemos mantenido, bien merecen nuestro reconocimiento, pues no todo el mundo es capaz de  atravesar selvas inhóspita,  llena de animales salvajes,  ríos caudalosos  y caminar miles de Kms. para llegar a países tan desarrollados y poderosos como son Colombia, Perú, Ecuador, Chile y  mantener el sueño  de algún día llegar a la MECA del Norte.  Lástima que algunos, por ignorancia o desinformación, no hayan tomado en cuenta países y regiones para emigrar, como son a Haití, Centroamérica, Guyana y otros continentes con más futuro que Venezuela. 

Para los que todavía están indecisos y no se atreven, les puedo decir que hay países con climas mejores que el venezolano como son: Canadá, los  emiratos árabes,  donde hay sistemas democráticos perfectos y no se van a encontrar con tiranos y dictadorzuelos  como Nicolás; países donde se  respeta y  quiere a las mujeres,  regiones en las cuales no hace falta electricidad para enfriar las calurosas noches del trópico, como son  Siberia, el Polo Norte, la Antártida y muchas regiones del continente africano que los europeos dejaron en optimo grado de desarrollo y que solo esperan que manos y cerebros como los venezolanos,  vayan a instalarse allí.  Los que se fueron y los que todavía quieren irse tienen, estos primeros meses del año 2023,  la extraordinaria oportunidad de hacerlo. No lo piensen mucho, no vaya a ser que el autobusero ese del Metro se le ocurra la locura de impedirles salir de Venezuela ofreciéndoles progreso.  No se dejen caer más a coba.

Nosotros, los que siempre hemos sido unos cobardes y que no merecemos, sino que nos den palo por ese rabo, nos quedaremos aquí. Ya estamos acostumbrados a que todo el mundo nos joda.  Somos masoquistas NATURALES y ya no tenemos ganas de hacer nada.  Nos calaremos a Nicolás y su combo hasta el 2030, ahí veremos si lo cambiamos y ponemos a otro más inepto que él.

Solo les pedimos que no sigan haciendo intentos por liberarnos de esta dictadura, pues a nosotros nos esta gustando el merequetengue.  Quédense tranquilos y saboreen las mieles de estar disfrutando de ese orden, respeto y progreso que perciben en otros países y que nosotros nunca podremos lograr, pues somos desordenados, antiparabolicos, indolentes, flojos, mentirosos y además masoquistas.  No merecemos un gobierno ni un país mejor.  Cada pueblo tiene el gobierno que merece. Suerte la de ustedes, los que se fueron y los que están por irse,  que lograron abrir los ojos a tiempo y tendrán la gloria de ver a Dios. Nosotros continuaremos en nuestro infierno, por secula secularum.

Vuelvo, una vez mas a agradecerles, a los que quieran recordar o rememorar a mi querida progenitora, que ella no está conmigo desde hace 47 años, déjenla tranquila para que descanse en paz.

Que tengan un feliz año de paz, alegría y felicidad, son los deseos de los que nos quedamos en este infierno, herencia del loco ese, ustedes llaman el innombrable.



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Juan Veroes


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