No quisiera pero las circunstancias me llevan a decir algunas cosas que no se pueden quedar tan así.
Hablar de igualdad, de revolución, socialismo y de conciencia de clase; si cuando vivimos en un barrio y logramos llegar a tener la posibilidad de adquirir una vivienda por medio del gobierno o por nuestro propio peculio; o por si acaso somos favorecidos, cuando somos candidato a algún cargo de elección popular. Lo primero que hacemos es buscar de salir del barrio en donde habitamos; comprando una vivienda fuera y bien lejos de ese barrio, pero siempre buscando las zonas del este, ò “los lugares más selectos de las ciudades”, ¿Así? Así es fácil.
No se puede hablar de revolución cuan solo visitamos los barrios- los cerros de las parroquias- cuando solo buscamos ò queremos los votos de sus habitantes; y cuando los visitamos vamos con un millón de guardaespaldas que parecen Rambo.
No podemos hablar de socialismo cuando solo nos reunimos con las personas que nos adulan, y no somos capaces de aceptar las críticas que nos hacen desde esos barrios; por nuestro nuevo status social.
No podemos hablar de conciencia de clases cuando, cuando nos mudamos de los barrios donde vivimos, para pertenecer a un nuevo estrato social.
Solo podríamos hablar de revolución, cuando compartamos los altos sueldos que ganamos con los que menos tienen, y así ir buscando la igualdad social.
Solo podríamos ser revolucionarios, cuando volvamos a los cerros de donde salimos, para convivir y compartir, con los que un día abandonamos; por mudarnos a las zonas exclusivas.
Solo podríamos hablar de socialismo cuando compartamos con nuestros hermanos de los barrios y padezcamos, sus mismas inquietudes. Solo podríamos hablar de socialismo cuando todos nuestros hermanos tengan que comer cuando vayan a dormir.
Solo podríamos hablar de socialismo; cuando los que intervengan en los eventos en donde asiste el señor presidente HUGO CHÁVEZ, no solo intervengan las personas de nuestro entorno ò nuestros aduladores.
Solo podríamos hablar de socialismo cuando no les caigamos a coba al señor presidente HUGO RAFAEL CHÁVEZ FRÍAS. El líder no se merece una trastada como la celada que le montaron en el TEATRO TERESA CARREÑO. Y que Dios me perdone.
Pero menos que nada; podríamos hablar de conciencia de clase cuando no fuimos capaces de permanecer en nuestras comunidades de origen; porque ya ahí, se pierde la esencia y el origen de la conciencia de clase. Y nos convertimos en parte del problema ideológico del “EL” contra el “YO” de lo que una vez hablo Sigmund Freud; de ese conflicto interno del ser humano por superar su ego.
Seguiremos escuchando las verdades de nuestras mentiras, y creyendo las mentiras de nuestras patrañas y convenciéndonos de nuestras verdades engañosas.
Señor presidente HUGO RAFAEL CHÁVEZ FRÍAS a usted los defenderemos hasta con nuestras propias vidas. Usted camarada presidente; no padecerá la maldición bolivariana, porque usted tiene-y es lamentable tener que expresarlo así- lo que no tuvo nuestro padre eterno SIMON BOLIVAR; un PUEBLO con misiones EDUCATIVAS que usted junto al glorioso pueblo de CUBA ha creado.
O sea un PUEBLO alfabetizado y preparado ideológicamente, para derrumbar las murallas de las mentiras, las traiciones y los engaños.
ACEPTAMOS POR DISCIPLINA, PERO NOS SACAREMOS LAS ESPINAS
AUNQUE MURAMOS EN EL INTENTO
…Y HOY MÁS QUE NUNCA.
CHÁVEZ, SOCIALISMO O MUERTE
jesuschua59@yahoo.es