Por qué y para qué el Socialismo

Es hora de adelantar con mayor celeridad, consideraciones pertinentes acerca de la necesidad y el para que el socialismo es la alternativa frente al capitalismo depredador y es tanto así, que no sólo es concerniente al ser humano sino que toca las entrañas mismas de la estructura del planeta tierra. Abordaremos a continuación algunos conceptos de capitalismo; está aquel que lo define como el sistema económico en el cual los medios de producción son privados o propiedad corporativa; régimen económico fundado en el predominio del capital como elemento de producción y creador de riqueza; es el sistema económico caracterizado por el predominio hegemónico de las clases poseedoras de grandes capitales; sistema económico en el cual predomina la producción y la generación de capital sobre el trabajo. Los principios básicos son: la libertad de empresa, la propiedad privada y la competencia.

Otra categorización lo define como un sistema de explotación y dominación. Tiene alcance mundial. Está en permanente expansión. Vive conquistando territorios sociales y geográficos. Recorre diversas fases históricas y de una manera más explícita es cuando usted tiene dos vacas, vende una y compra un toro, se reproducen y tienen muchas vacas. Entonces, o le sobra leche o le falta alfalfa. Si le falta de alfalfa se mueren las vacas y usted se arruina, si le sobra leche baja el precio en el mercado y también se arruina.

Es la doctrina económica basada en la idea de que la propiedad privada de los factores de producción, unida a un sistema de libertad del mercado y de precio, es la forma más eficiente para lograr la óptima asignación de recursos en una economía.

Estas y otras conceptualizaciones de capitalismo en ningún tiempo o lugar le otorga la connotación de social, lo que indica que el hombre como tal no es para nada definitorio e importante en la calificación y tan solo es considerado como parte necesaria para la explotación y elemento fundamental en la generación de plusvalía o rentabilidad, es decir que el capitalismo no puede desde sus entrañas exponer algo acerca del humanismo, sencillamente porque no le puede ser inherente o consustancial.

Enfrentemos entonces, con las definiciones de socialismo, de las cuales haremos los comentarios ocurrentes poniendo en franco antagonismo uno frente al otro que nos permita colocar en la balanza lo necesario de su desaparición en los términos e impactos producidos en el seno de la sociedad mundial.

El socialismo es una ideología política que designa aquellas teorías y acciones políticas que defienden un sistema económico y político. Su concepto tiene en la terminología marxista un sentido bien preciso. Es cuando usted tiene dos vacas, el gobierno nacionaliza y le paga el precio del ternero que tenga la primera; régimen benévolo que ha de ser juzgado exclusivamente por sus mejores intenciones; sistema de organización social que afirma la superioridad de los intereses colectivos sobre los individuales, la necesidad de una acción común para el mayor bienestar de la comunidad, la potestad plena del Estado para estructurar la sociedad y la economía, sobre la base de la propiedad de los medios de producción; el socialismo clásico lo define como el sistema económico en el cual los medios de producción (tierra, maquinaria y equipamiento ) son poseídos en común.

Ahora bien, desde el punto de vista político partidario, el socialismo tiene interpretaciones diferentes caracterizadas generalmente por la realidad, sobre lo cual se asume la pertinencia de modelos socialistas diferentes, al respecto podemos manejar varios términos propios de la lucha social y política de quienes de alguna manera son considerados revolucionarios a saber: Anarquismo, anticapitalismo, autonomismo, comunismo, crítica social, economía ecológica, internacional socialista, marxismo, movimiento obrero y sindical, socialismo utópico, socialismo del siglo XXI y sociedad fabiana, entre otros.-

El significado dado al socialismo es muy amplio y puede variar según el exponente al igual que los proyectos que aplicarían, existen algunas grandes diferencias entre los grupos socialistas, aunque casi todos están de acuerdo de que están unidos por una historia común que tiene sus raíces en el siglo XIX y el siglo XX,, entre las luchas de los trabajadores industriales y agricultores, operando de acuerdo a los principios de solidaridad y vocación a una sociedad igualitaria, con una economía que permita servir a la amplia población en lugar de unos cuantos.

Con respecto al socialismo del siglo XX, tras la segunda guerra mundial, la tensión militar ideológica entre el bloque socialista, encabezado por la URSS y el capitalista por EEUU, desembocó en un enfrentamiento político que se conocería como la Guerra Fría. Culminó con la desintegración de la URSS, por fuertes presiones internas y externas, seguida de una repentina crisis en las demás naciones socialistas, principalmente las europeas. Indicadores del auge socialista en el siglo XX son por ejemplo, los grandes avances en la tecnología, así como la gran tecnología militar, principalmente en la Unión Soviética.

Con respecto al socialismo del siglo XXI, podemos adelantar que a pesar que la desintegración y lucha individual por el progreso hizo hundimiento del socialismo ortodoxo en muchos países, principalmente la URSS y Europa Oriental, se mantiene en países como China, Cuba, Corea del Norte, Libia y Viet Nam. Ha adoptado algo de flexibilidad y en algunos casos un considerable desarrollo. Tal ejemplo es China, cuarta nación más poderosa económicamente del mundo y cuya mano de obra se ha generalizado por el mercado mundial. Otros países, aunque no alcanzan el auge de una vez, han subido y restaurado en parte su economía, como Vietnam y Cuba.

Es en los albores del presente siglo que se retoma la causa socialista con nuevos bríos, circunstancias distintas y bajo el reconocimiento tácito de los errores cometidos, no puede haber una receta única, es por ello, que el socialismo del siglo XXI en primer lugar debe obedecer en estricto a la realidad de cada región o país, considerando las características particulares y el grado de aplicación, es importante destacar de manera contundente que el socialismo en esta época no se quiere imponer de hecho solo para sustituir a un sistema por otro, sino que la condición actual del sistema capitalista obliga a exponer una alternativa ante su cada vez mayor decadencia y las contradicciones aún más evidentes que en el pasado.

Se trata sí, de salvar a la humanidad ante el desaforado avance de un capitalismo sin control ni reglas, violatorio de la comunidad internacional en aspectos tan importantes como el recalentamiento global, el control de las grandes empresas transnacionales, el sistema mundial de precios de materias primas, la degradante situación en el manejo de los derechos humanos, el incentivo al paramilitarismo y la secesión, el control del petróleo y del agua, la cada vez más aberrante actuación de los medios de comunicación que dominan y ejercen influencia en seres humanos, en gobiernos entreguistas y apátridas.

En pocas palabras preguntarnos el porque y el para que el socialismo del siglo XXI, se hace cada vez más pertinente, solo que para ello, debemos comprender la situación actual del capitalismo, sus debilidades y flaquezas, todo como garantía de no errar en los principios de la lucha por venir, que es aquí y ahora. No debemos subestimar al adversario histórico, no es tarea fácil pero es la tarea, en sus estertores se muta, transgrede y evalúa, ataca y se esconde, hace circular matrices de opinión en la guerra de cuarta generación, compra todo cuanto sea comprable, ataca la conciencia a través de los mensajes subliminales, amenaza, actúa de manera eficiente revestidos de inocencia ideológica, practica el engaño y el reciclaje de información, cuenta con amplia red de espionaje y contraespionaje, se vale de los apátridas y lacayos ofertando dólares a montón, en fin es un enemigo del cual conocemos sus habilidades, trampas y desconciertos.

Porqué entonces, la lucha por su abolición, por sus desaparición, lo sabemos y debemos nutrirnos cada día más, la humanidad bajo el capitalismo va directo a su desaparición, la naturaleza está en peligro, sus bases existenciales al igual que la fauna están heridos de muerte, para ello, es imprescindible estar atentos al para qué y más allá a la forma de combatirlo, con inteligencia, sin apresuramientos, sin bagaje ideológico innecesario, con firmeza y pundonor bajo el riesgo de la vida terrenal, debemos prepararnos en actitud y aptitud, buscar el conocimiento ejemplar que nos abra el camino de la esperanza.

Si lo conocemos en todas sus connotaciones y alcances y conscientes estamos de quien es la culpa, adelantemos que la lucha es de ahora y que esta oportunidad histórica que se nos presenta bajo la consigna bolivariana en sus tres raíces, nos sirvan de alimento cotidiano para que cada uno de nosotros desde su espacio grande o pequeño contribuyamos en forma organizada a ir delineando el verdadero fin de la historia, no la historia de las luchas antiimperialistas, sino la del capitalismo inhumano y perverso, apostemos en forma concluyente a la etapa Terminal, en cuanto por ahora no lo es, el futuro estará próximo en la medida que avancemos en nuestra historia patria, haciendo honor a nuestros libertadores y precursores. Patria, Socialismo o Muerte. Venceremos.-

rafaelfebles@yahoo.com



Esta nota ha sido leída aproximadamente 4262 veces.



Rafael Febles

Economista. Msc. Seguridad Social. U.C.V.. Militante revolucionario. Locutor. Articulista Correo del Orinoco. Poeta y escritor de la revolución bolivariana

 rafaelfebles@yahoo.com      @rafael_febles

Visite el perfil de Rafael Febles para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes: