En esta otra contienda electora por la Enmienda que esta pactada para febrero del próximo año, debemos abordar con precisión Dialéctica, una vez más, todas las amenazas que muy solapadamente la oposición ensaya para tratar de envolver al pueblo y, por el otro lado la terquedad de grupúsculos que visten y hablan de revolución, pero en el fondo son las reminiscencias de la cultura socialdemocrática, que sin ocultar el caradurismo del bipartismo se atreven a lanzar improperios descalificando a sus principales hermanos y hermanas de lucha. Es obvio que si no se tiene la formación Ideopolítica sobre el Sistema de Producción que nos estamos planteando las Revolucionarias y Revolucionarios, se llega a la más vil calumnia y sin la menor duda, recurren a la práctica colonial de la intriga para dividir las fuerzas patrióticas y revolucionarias. Hay una máxima de Vladimir Ilichi Lenin:
“Sin Teoría Revolucionaria no Habrá Movimiento Revolucionario”
Pero además el camarada Federico Engels nos alerta:
“El Socialismo moderno es en primer término, por su contenido, fruto del reflejo en la inteligencia, por un lado, de los antagonismos de clase que imperan en la moderna sociedad entre poseedores y desposeídos, capitalistas y obreros asalariados, y, por otro lado, de la anarquía que reina en la PRODUCCIÓN. Pero por su forma teórica, el Socialismo empieza presentándose como una continuación, más desarrollada y más consecuente, de los principios proclamados por los grandes ilustradores franceses del siglo XVIII. Como toda nueva Teoría, el Socialismo, aunque tuviese sus raíces en los hechos materiales económicos, hubo de empalmar, al nacer, con las ideas existentes…Y, así, era inevitable que surgiese una especie de socialismo ecléctico y mediocre, como el que, en efecto, sigue imperando todavía en las cabezas de la mayor parte de los obreros socialistas de Francia e Inglaterra; una mezcolanza extraordinariamente abigarrada y llena de matices, compuesta de desahogos críticos, las doctrinas económicas y las imágenes sociales del porvenir menos discutibles de los diversos fundadores de sectas, mezcolanza tanto más fácil de componer cuanto más los ingredientes individuales habían ido perdiendo, en el torrente de la discusión, sus contornos perfilados y agudos, como los guijarros lamidos por la corriente de un río. Para convertir el Socialismo en una Ciencia, era indispensable, ante todo, situarlo en el terreno de la realidad”.
La convicción revolucionaria se demuestra con hechos, es fácil repetir
como plumíferos verdes que están con la línea del Presidente, pero
en la realidad demuestran que no desean participar ni siquiera en un
Consejo Comunal, menos aun apuntalar las MISIONES y, para nadie es un
secreto que no desean, hablar de conformar los Núcleos de Desarrollo
Endógeno, y, si se trata de conformar los Consejos Socialista de Trabajadores
y Trabajadoras voltean a favor del patrono, y no se hable de conformar
los Consejos Socialistas de Campesinas y Campesinos y, si se le pregunta
por las Líneas Generales del Plan de Desarrollo Económico y Social
de la Nación 2007-2013, no saben que es eso. Por esto reafirmo que
nuestro pueblo es sabio y paciente. Por lo tanto, asumirá con gallardía
la nueva batalla refrendaría hacia la consolidación de la Democracia
Participativa, Protagónica y Revolucionaria, aprobando por mayoría
la Enmienda al Articulo 230 para continuar con el Comandante Chávez
construyendo el Socialismo Científico…
Miembro del C.C. del
PCV.