Para desarrollar estrategias económicas con la finalidad de obtener beneficios permanentes, se hace necesario evitar acciones que generen antipolítica, como una creciente tendencia surgida de la oposición, reveladora de una consistencia en su actitud contraria a las políticas del gobierno bolivariano, delatora de sus flaquezas y anclada en su convicción, de que es posible revertir la revolución bolivariana, mediante la utilización de la fuerza, confiando en la pretencion de salvación y gloria del estado venezolano, en base a sus criterios antipolíticos, guarimbas y buscando alternativas de carácter militar.
Las antipolíticas, son conceptos específicos que representan la flaqueza del gobierno bolivariano en las aplicaciones de políticas públicas, para satisfacer las necesidades del pueblo. Es inminente la implementación de las Contralorías socio-productiva, a objeto de evitar flaquezas que permita a la oposición usarlos como antipolítica, que forma parte de raciocinios inexactos y mal intencionados, que fascinan a una fracción del pueblo acostumbrados a las prebendas, que no deben de convencer a los prudentes que conocen bien el sistema capitalista y con la oportunidad de participar en la construcción del Socialismo del Siglo XXI.
Es importante evitar un permanente enfrentamiento de los poderes formales e informales, porque implica pérdida de costo e ineficiencia en las aplicaciones de las políticas públicas. Indigna los casos de corrupción que igualmente mueve al sector privado, desarrollando antipolíticas para acusar a los compatriotas como los únicos corruptos. Se debe de negar la naturaleza y alcance de las antipolíticas, como un medio de combate contra los establecidos, aplicados por abnegados rentistas de un pasado en el que les fue mejor, exaltando una sociedad civil al servicio del sistema capitalista.
Políticos con ausencia de propuestas innovadoras y de profundo aliento, acordes a una falta de visión y coherencia del mundo y de las cosas, cubren los espacios aplicando procedimientos para la generación de antipoliticas. Como un acostumbrados señalamientos de errores y vicios como si en Venezuela, existiera un clima de mínimas libertades públicas que permite, por una parte, considerar las antipoliticas como si fueran fruto exclusivo de la desidia o incapacidad personal de los aprovechados dirigentes del PSUV; y, por otra parte, valorar políticamente a figuras afamadas o reconocidas por sus éxitos en el sistema capitalistas, aunque cuando carezcan de trayectoria en los asuntos públicos o no emitan una idea más o menos enhebrada y consistente de los derechos humanos. Con predilección por el mercadeo que ceden su nombre a efímeras entidades de sustentación electoral, mediante los medios audiovisuales que las apoyan, en un momento dado; con argumentos antipatriotas.
De acuerdo al criterio académico, podría deducirse que la antipolítica es una actividad que tiene carácter histórico, por la incapacidad de la oposición de innovar nuevas política, hasta tal punto; que en muchos escenarios en el país repiten los planes políticos de la revolución bolivariana, con cambios de nombre, que por los beneficios que recibe el pueblo, no existe motivación a la critica.
Es notorio el incremento de la militancia partidista, siendo el PSUV el partido mas grande de Latinoamérica. No sólo se ha incrementado el modelo de masas generalmente en sentido general adoptado en Venezuela, en contraste con otras manifestaciones de la llamada sociedad civil que no experimentan un crecimiento proporcionalmente significativo, por que las actitudes e iniciativas antipolíticas tienden a invalidarlos, privilegiando al PSUV que con la espontaneidad y la voluntad ha desarrollado y aún puede desarrollar nuevas estrategias para obtener beneficios económicos permanente para el pueblo.