Estimados camaradas socialistas, en estos días de comienzo de año, he podido leer un sin número de artículos, tanto en Aporrea, como en otros medios de comunicación alternativos, donde el tema principal, es el trato que sobre las críticas hacia nuestro gobierno y nuestra revolución, que han aparecido en estos medios, le vienen dando aquellos acérrimos defensores del proceso, que hoy pareciera que tuviesen la sensibilidad a flor de piel y no aceptasen ni el mas mínimo comentario.
A este respecto y antes de profundizar en el tema, es bueno dejar en claro un punto primordial, sin el cual, cualquier conversación o debate en este tema, seria mal intencionada o mal interpretada. Tenemos que tener siempre presente, que a la hora de criticar, jamás debemos olvidar los dos principios que debe tener una crítica, el primero, es que esta crítica se base en un hecho cierto, veraz y que además, no traiga un beneficio directo a la persona que hace la crítica y el segundo principio, que se debe respetar siempre, a la hora de hacer una crítica, es la de poder aportar una solución y además, comprometerse en ser parte de esa solución. Si una crítica se basa en estos dos principios fundamentales, siempre debe ser oída, respetada y sobre todo, tomada en cuenta, porque lo único que busca, es ayudar al proceso que se está criticando.
El párrafo anterior es harto necesario tenerlo siempre en cuenta, porque nos permite dividir rápidamente los dos tipos de críticas, que se presentan generalmente, en torno a un tema álgido y nada mas álgido que esta revolución y la forma de gobernar de nuestro querido líder el presiente Chávez. Está claro, que cuando una crítica lo único que busca es un beneficio directo al autor de la crítica, entonces, por muy cierta y acertada que sea esta crítica, pierde todo peso e importancia, ya que su fin primordial es el ventajismo de una persona, sobre el proceso y eso es inaceptable.
También debemos tener en cuenta, que antes de tomar en serio una crítica y tomar parte en esta, debemos como paso fundamental, averiguar el fondo de esta crítica, ver si su sustento está basado en un hecho cierto y que las perversiones que ahí se critican, realmente están aconteciendo, porque de lo contrario y si uno alegremente se inmiscuye en un debate, sin tener todos los elementos reales de juicio, al final puede quedar uno como un tonto o como un interesado y en los dos casos, se quedaría muy mal parado.
Por desgracia en estos días, las criticas mal intencionadas abundan, tanto en los medios opositores, (eso es más que lógico), como en los medios afectos al gobierno, pero para ser muy justos, la gran mayoría de las que yo he leído, tienen un basamento muy fuerte y de ahí que los defensores del gobierno, en vez de atacar a este grupo de críticos, deberían más bien, ponerse a buscar los correctivos a esta situación.
En este punto del articulo quiero ser muy claro, no voy a hablar de ningún artículo, tanto de crítica, como de ataque a estas críticas, ya que jamás me ha gustado hablar de gente que no habla de mi, de ahí que mis comentarios, sean lo más genéricos posibles y lo que si voy a hacer, es volver a poner mi posición crítica, hacia algunos hechos puntuales, de este gobierno, que siguen sin cambiar y hacer al final, una pequeña reflexión, sobre lo que significa la rectificación y la autocritica.
Para los camaradas que me han leído, saben que una de las mayores críticas que le tengo a nuestro glorioso gobierno, es la forma en la que opera el Banco de Venezuela. Desde que nuestro gobierno adquirió este banco, para convertirlo en la plataforma principal, del nuevo sistema de banca pública “Socialista”, no hemos parado de ver, como día tras día y hasta en los canales de clara tendencia opositora y claramente identificados como factores principales, en el fallido golpe de estado de 2002, este banco, con su supuesta nueva política socialista, ha mantenido una propaganda, por lo demás, muy agresiva de captación de nuevos clientes, incitando al consumo desmedido, mediante la utilización de sus tarjetas de crédito, ofreciendo para ello, toda una serie de prebendas, que por más que queramos tapara el sol con un dedo, son practicas clara y netamente CAPITALISTAS.
Es por eso, que en estos días pasados, de finales de diciembre, cuando veía a nuestro líder, el comandante presidente Hugo Chávez, presidiendo un programa televisado en cadena nacional, donde se hacía entrega, de una serie de nuevos vehículos ensamblados en el país, en las industrias que tenemos, con convenio con la hermana república iraní y con créditos, de nuestro tan “socialista” Banco de Venezuela y veíamos, como nuestro líder se asombraba, de que las practicas de este banco, aun en ese programa y en cadena nacional, fueran tan capitalistas y se dedico a regañar a la representante del banco y a todos los personeros, que tenían algo que ver con ese programa.
A estas alturas, mis queridos camaradas, me cuesta mucho creerle a mi comandante, en este aspecto especifico y miren, que lo dijo con toda la responsabilidad del mundo, porque, para mi entender, pasa una de dos cosas o el presidente está encerrado en su cúpula de cristal y no ve, ni oye nada, que sus más cercanos asesores le indiquen, porque es que las propagandas del Banco de Venezuela, se veían hasta en el canal 8 y Uds. me dirán, se justifica que el comandante no vea mucha tv, pero el canal 8 lo tiene que ver, sino, su desconexión con la realidad es total; y si esto no es lo que pasa, lo otro que puede estar ocurriendo, es que el presidente use esta nueva táctica para depurar y activar el espíritu socialista entre sus colaboradores y Uds. me disculparan, pero tanto una, como la otra, es un error garrafal.
Si me animo a hacer esta crítica, es porque quiero que esta revolución siga adelante, es porque creo que el presidente es la mejor, por no decir, la única vía que tenemos los socialistas de corazón, de lograr alcanzar ese sueño máximo, tanto tiempo anhelado, como lo es la formación de una verdadera sociedad socialista, en nuestra bella patria, es por eso, que critico y crítico con BASE, aporto una idea de RECTIFICACION, expongo una posible SALIDA y esa, mis queridos camaradas, es la forma que debemos tener siempre en cuenta, a la hora de hacer una crítica, no solo a nuestro gobierno, sino en cualquier estamento que llevemos adelante en nuestra vida.
Camaradas socialistas, recordemos que la critica a nuestro gobierno, cuando no está bien fundada o obedece a intereses netamente personales, es un arma de doble filo, que al final termina haciendo más daño que bien y camaradas defensores de Chávez, ¿Qué paso con la rectificación y la autocritica?, la aptitud tomada por Uds. en muchos casos, dista mucho de revolucionaria y democrática, recuerden siempre, que es preferible escuchar siempre al amigo o al enemigo, porque el uno da consejos y el otro nos da su posición; grave es cuando acallamos, tanto a uno como a otro, ya que perdemos el consejo oportuno del primero y el segundo, en su sigilo, inicia una conspiración que puede terminar siendo muy grave.
Hay que criticar y sobre todo, hay que oír las críticas y cuando se proceda a descalificar una crítica, esta debe ser puntual y claramente identificada, ya que si se deja al boleo de la generalización, se hace un daño terrible a la revolución. Hay que desenmascara siempre al interesado oculto y al enemigo subterráneo y ya para finalizar, tenemos que recordad una cosa, aquellos que queremos el socialismo como salida, en estos momentos hay dos caminos o Chávez con sus imperfecciones o el regreso a la más rancia oligarquía, fascista, capitalista y cada quien, tiene el poder de elegir.
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