Cuando a comienzos de enero, el Comandante Chávez anunció en un ALÓ PRESIDENTE que, el método de selección de candidatos para las elecciones parlamentarias de septiembre del 2.010, en lo atinente al Partido Socialista Unido de Venezuela iba a ser el de las elecciones primarias, con auto-postulación de candidatos y supervisadas plenamente por el Consejo Nacional Electoral de la República Bolivariana de Venezuela; todos los militantes con verdadera vocación socialista batimos palmas y entendimos perfectamente que el sólo anuncio constituía una bofetada, tanto a la esmirriada cuan insulsa oposición, inmersa en un mar de contradicciones a resultas del tema y así como también para cualquier factor hacia lo interno del PSUV que estaba subrepticiamente alentando al Líder para que tomara el atajo vergonzante de la "dedocracia" como variante selectiva de postulantes.
Luego, en las primeras de cambio, y por varios artículos de opinión aparecidos aquí en APORREA, comenzaron a manifestarse ciertas aprehensiones en el orden fundamental de alertar sobre la inconveniencia para la democracia interna del partido que los factores reales de poder, llámense gobernadores, alcaldes o los propios diputados actuales, se convirtieran en agentes de presión indebida bajo la figura de grupos pre-constituidos con planes propios y objetivos distintos a los de construir el Socialismo del Siglo XXI y solo obedecer a bastardos intereses personales y de cubrir también soterradamente el apuntalamiento de dudosos liderazgos, ya probadamente corruptos y desviados de los planes integrados de la Revolución.
Hoy, cuando se inicia el proceso de auto-postulaciones de candidatos, de acuerdo al reglamento interno aprobado a tales afectos, nos encontramos como en forma abrupta y por demás evidente de las intenciones obstruccionistas y anti-democráticas de los ya mencionados elementos del poder fáctico, la decepción es de proporciones dantescas y solo con revisar la prensa regional nos damos cuenta del gigantesco fraude que se intenta montar a espaldas de la inmensa mayoría de la militancia decente y patriótica del PSUV en el Estado Bolívar. Veamos, tomando como evidencia lo aparecido en el diario Nueva Prensa del día viernes 05/03/10, en el Cuerpo C-1(pag.1), nos encontramos con la siguiente perla marramuciera :"Acompañado de varios diputados y diputadas del Consejo Legislativo del Estado Bolívar, afectos al proceso revolucionario que se gesta en el país, José Ramón Rivero, secretario de política de la Gobernación del Estado Bolívar y dirigente del partido de gobierno en la entidad dijo que este proceso busca escoger a candidatos y candidatas con el perfil definido en los términos ideológicos del Socialismo del Siglo XXI, que busca la justicia e igualdad social...". De seguidas el personaje de marras pasó a anunciar la Comisión Receptora de Postulaciones (Comisión Electoral) a todos los niveles y así quedaron constituidas así, Comisión Receptora de Postulaciones Circunscripcion Nº1, José Ramón Rivero-Marlene Vargas-Vicente Rojas-Zulay Betancourt y Roselys Salazar. Comisión Receptora de Postulaciones de la Circunscripción Nº 2 : Asdrubal López-Mirian Reyes-Oliver Barreto-Dennis Maita y Esmín Ramírez y la Comisión Receptora de Postulaciones de la Circunscripción Nº 3 :Vilma Plaza-Griselda Calma-Dionisio Vega-Manuel Figuera y Yulisbeth García.
Y ahora viene lo mas absolutamente degradante y falto de ética de la que se tenga conocimiento en la vida de cualquier partido en cualquier época, no solo de nuestro paìs, sino del mundo entero y es que el cínico personaje, que preside la rueda de prensa, anuncia que dentro de los parámetros democráticos que rodea el PSUV en Bolívar, el se siente obligado a leer una lista de posibles candidatos que se van a inscribir y procede a mencionar por cada Circunscripción a los mismos integrantes que en minutos anteriores había anunciado como miembros de la Comisión de Postulaciones a los distintos niveles, incluyendo su propio nombre. Ya esto raya en el descaro mas imbécil y grosero que como afrenta se le presenta al colectivo del PSUV y por ello denunciamos ante el país entero y en lo particular ante las Autoridades Nacionales, comenzando por el Comandante-Presidente esta vulgaridad de actitud de avasallamiento de las más elementales normas de convivencia política que han de respetarse y de la misima manera exigimos la destitución de toda esta cáfila de atracadores políticos y su inhabilitación para aspirar a los cargos de representación popular que se elegirán en breve. Así de sencillo.
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