El Reino de España, que se encuentra asediado por los profundos y duraderos efectos de una crisis creada por las manipulaciones del Capital Financiero Internacional, necesitado de recuperarse de sus fracasos de la globalización, hoy se ve sacudido por las renovadas reivindicaciones nacionalistas que amenazan la cohesión del Estado Monárquico y la estabilidad de sus instituciones políticas coloniales.
Hoy en Catalunya y en el Euskal Herria, convocadas por amplias coaliciones políticas y sociales que expresan la pluralidad nacional que la integran, se han desarrollado multitudinarias manifestaciones que tienen por objeto, más allá de las consignas de los convocaría, la lucha por la Autodeterminación, la Soberanía y la afirmación de los proyectos nacional en Catalunya y Euskal Herria.
Tales son dos de las naciones que han sido integradas al Estado Español y que en distintos momentos de su historia moderna, han realizado serios intentos por afirmar su autonomía y soberanía nacional frente al Estado centralistas y monárquico con sede en Madrid, pero que la adversidad de tales resultados no les ha impedido a las siguientes generaciones, afirmar su identidad y seguir luchando por sus derechos nacionales, incluyendo la posibilidad de constituirse como un Estado Independiente, que identifique a una Nación en el concierto de
las naciones del mundo.
Desde las prósperas burguesías catalanas y vascas, asociadas a la mayoría del Producto Interno Bruto del Estado colonial español, hasta los radicales de Esquerra Republicana Catalana y la izquierda abertzale vasca, pasando por el amplio movimiento cultural, deportivo y social de ambas naciones (incluyendo el famoso Barcelona Football Club), la mayoría se ha hecho presente en sendas manifestaciones publicas en Barcelona y Bilbao, en la que la mayoría popular catalana rechaza la reciente decisión del Tribunal Constitucional que recorta sus derechos nacionales frente al Reino de España,, mientras que los vascos confirman en las calles su voluntad de unificar a la Nación Vasca, avanzar en
la propuesta política, pacifica y democrática de una Euskal Herria independiente del Estado Monárquico y colonial Español.
No se trata solo de otra de las respuesta de los pueblos a la crisis económica y financiera que ha supuesto la confiscación por parte del gobierno “socialista”, de las grandes conquistas sociales de los trabajadores en más de cien años de lucha - muchas veces sangrientas – contra la España del Capital, sino también, de la afirmación de una conciencia acerca de que la solución de sus problemas nacionales está relacionada con el ejercicio de sus derechos a la Autodeterminación; pretensión a la cual se resisten, con todos los medios, las instituciones y beneficiarios del Reino De los Borbones y, especialmente, el aparato militar pos-franquista, la cúpula de la Iglesia Católica, el sector
financiero de la burguesía españolista y los partidos firmantes del Pacto de la Moncloa que perpetuó el Estado colonial y monárquico Español
En estas circunstancias histórica, no debe haber duda acerca de la necesidad de expresar la solidaridad incondicional con la España de los Pueblos, en contra del Estado Monárquico y colonial de los Borbones; hoy convertido en uno de los instrumentos más serviles en la guerra global que el imperialismo usamericano desarrolla en todo el planeta Tierra, con el fin de asegurar su reconquista y adueñarse de sus materias primas y energías, en favor del Gran Capital Financiero y sus empresas globales de la industria, los servicios y la cultura de la dominación.
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