Estimados camaradas socialistas, en estos días próximos pasados, se cumplieron 40 años de la elección de ese gran hombre, que fue conocido en vida como Salvador Allende. Efectivamente, Allende fue electo en su natal y bella Chile hace cuarenta años, y con esta elección se inició uno de los procesos revolucionarios pacíficos más importantes y que tanto basamento de dignidad y ética le han dado a nuestros actuales procesos revolucionarios, que hoy en día emergen pujantes e indetenibles en esta toda nuestra bella américa latina.
No vendría en mejor momento una comparación, entre el devenir de aquella revolución y la nuestra, además de comparar al trágico final de aquella y el que casi se conjuró aquí en el 2002 y cuales fueron, para mí, las razones por las que la revolución socialista de Allende tuvo ese trágico fin y nuestra revolución, si fue capaz de superar el mismo macabro plan golpista generado desde el mismo imperio, tanto en aquella época como en esta.
Tanto el gobierno revolucionario de Allende, como nuestro querido gobierno revolucionario, encabezado por el presidente comandante Chávez, llegaron al poder por la vía DEMOCRATICA, a través de una elección popular, que los coloco al frente de sus respectivos países. Tanto Allende como Chávez, iniciaron una verdadera revolución socialista, llevando está a lo más profundo de la sociedad y aquí es donde podemos comenzar a ver algunas diferencias, entre un proceso revolucionario y otro y ahí iniciamos el análisis.
El gobierno de Allende inicio el proceso revolucionario, tan pronto tomo el poder, ya en menos de un año, había iniciado la constitución de los comités obreros, y había dado los primeros pasos para las nacionalizaciones de las empresas trasnacionales más emblemáticas de Chile, ojo, todo esto muy provocado por el eterno manejo al desgobierno, que tuvo la oposición oligarca en contra del gobierno de Allende, al cual le hicieron la vida imposible, casi desde un principio y esto profundizo el proceso de radicalización de la revolución Chilena, casi desde el mismo momento en que tomo el poder.
Por otro lado nuestro presidente, si bien desde el inicio mismo de su gobierno dejo muy en claro su talante y su cariz revolucionario y socialista, no es menos cierto que en estos año iniciales, mas perecieron un proceso muy lento de transición, que el verdadero inicio de un proceso revolucionario, no olvidemos, que el primer paso fue la asamblea constituyente para conseguir, de esa manera, el marco legal que permitiese llevar, de manera pacífica todos los cambios revolucionarios que se querían propiciar en nuestra patria, luego volvimos a reelegir a nuestras autoridades y en eso pasaron los primeros dos años del gobierno, donde debemos ser muy sinceros, los cambios revolucionarios fueron muy pocos y muy leves, esto quizás permitió a nuestro gobierno, tener aún una fuerte base ideológica dentro de la población, a diferencia de Allende, que un proceso que debió tomarle, por lo menos, un par de periodos de gobierno, se vio en la enorme necesidad de ponerlos en marcha y profundizarlos en apenas año y medio y esto sin duda volcó muchos miedos a una buena parte de la sociedad.
El gobierno de Allende JAMAS conto con el apoyo militar, ni de la cúpula, ni de la tropa, que en nuestro caso fue, junto con la decidida posición defensiva de nuestro pueblo, lo que en definitiva salvaron a nuestro gobierno y revolución en aquellos aciagos días de abril del 2002. Recordemos que Allende sufrió el asesinato de su primer ministro de defensa, un hombre enérgico y muy capaz y que seguramente, si estuviese al frente del gobierno en aquellos tristes días del 73, quizás otra fuese la historia hoy día, como olvidar la debilidad del general Prats al frente del ministerio de la defensa, ante los sucesos del claro avenimiento del golpe de estado, llevado adelante por Pinochet, en fin, tantos anuncios del desastre, que a Allende le falto más diplomacia y tener menos guáramo.
Porque dijo lo anterior, pues era más que claro, que al asesinar al general Schneider, el verdadero propiciador de que Allende pudiese acceder al gobierno, después de la reñida elección de 1970, donde el congreso hizo las mil y una para evitar el acceso al poder del gobierno electo de Allende, como decía, ante el vil asesinato de este recio militar, era más que claro, que los cuadros militares chilenos estaban muy divididos y que serían, de manera clara y decidida, un factor generador de problemas e inestabilidad, porque estemos claros, el plan de desestabilización económica era claro y posteriormente, cuando este se agudizara y el gobierno tuviese que tomar duras decisiones, para poder llevar el alimento a su pueblo, un conjunto militar en contra o muy débilmente representado, sería más bien, el puntillazo culminante para la caída del gobierno como al final ocurrió.
Si Allende en esos momentos hubiese jugado sus cartas de una manera más diplomática que ética y moral, como fue su actuación final y para ser honestos como fue toda su vida, él hubiese sabido que replegase un poco, ceder algo, tener mucha mano zurda, y entender que la liga cuando se estira mucho esta se rompe y después no se puede reparar, a estas alturas, me pregunto yo, que hubiese pasado si Allende cede un poco a las pretensiones capitalistas, lleva un gobierno socialista, inicia unas reformas y trata por todos los medios de ir creando una base, no solo en lo social y en lo cultural, sino en lo militar, que hubiese, en años posteriores, servido a un verdadero proceso revolucionario, que podría a ver sido llevado adelante por el mismo o por otro revolucionario; pero para ser sincero, en la época que le toco a Allende vivir, hubiese sido muy difícil lograr algo y creo que al final el tomo la decisión más sabia y decidió dejar un digno y claro ejemplo de lo que un verdadero revolucionario debe hacer por el amor de su pueblo.
Otro ejemplo claro y más reciente, de un gobierno con cariz revolucionario que por la falta de una mano zurda en su gobierno termino perdiendo el poder y con ello el proceso revolucionario que había iniciado, fue el electo gobierno de Manuel Zelaya en la hermana republica de Honduras, el cual vivió la última versión de los arteros golpes de estado gestados desde el imperio yankee, estemos claros, si Zelaya al tener su primer conato de golpe al tratar de colocar una cuarta urna en las elecciones próximas de su país, se hubiese replegado y en honor a la paz y tranquilidad de su patria hubiese retirado esa urna y se hubiese mantenido en el poder, estoy más que seguro, que con su decidido apoyo, su candidato hubiese tenido una actuación muy importante en la elección y muy posiblemente, el proceso revolucionario en Honduras aun estaría en proceso y no mandando el cachorro del imperio.
A estas alturas, más de uno me dirá que tener mucha diplomacia en medio de una revolución seria cobardía y ceder el paso a las fuerzas oligarcas que siempre nos han oprimido y yo en este caso, les pondré el claro ejemplo de nuestro presidente y comandante Hugo Chávez. Tan pronto comenzó el gobierno, le quedo más que claro, que le sería muy difícil, por no decir imposible, con el estamento del estado para ese momento, llevar adelante un verdadero proceso revolucionario y más aún, con tendencia de izquierda, así que poco a poco, comenzó a ganar poder y cuando comenzó a radicalizar su posición hizo que los poderes facticos de la oligarquía hicieran su aparición y crearan los sucesos de abril del 2002 y casi consiguen su caída, el asunto fue, que a diferencia de Allende, Chávez no solo contaba con el apoyo de la gran mayoría del pueblo, igual que Allende, la diferencia radicaba, en que la inmensa mayoría de la tropa y la oficialidad media estaba claramente comprometida con el proceso democrático y revolucionario que Chávez estaba llevando adelante y de ahí, la gran diferencia entre el final de un proceso y el final del otro.
Quiero ser muy justo con Allende, en medio de la década de los 70, era imposible imponer un sistema socialista en medio de una nación suramericana que era considerada el patio trasero del imperio yankee, no había forma posible en esa época, ni con mano derecha, ni con mano zurda, de conseguir imponer el sistema revolucionario socialista de manera pacífica como la quería llevar adelante Allende en su bella y tan querida Chile, así que el resultado, fuese cual fuese la posición de Allende seria el mismo, así que imagino que las musas del destino le dieron la increíble oportunidad de ser ese mártir, esa leyenda, que tanto necesitábamos los socialistas de corazón, latinoamericanos, para poder crear la base para la aparición de un líder del tamaño y del tipo de Chávez.
Después de todas esta divagaciones hemos llegado al tuétano de este articulo y no es otro que tratar de demostrar a todos aquellos socialistas de corazón que tanto le han exigido a nuestro gobierno la falta de una verdadera acción socialista, la falta de un verdadera revolución, la falta de una profundización o radicalización del proceso, y ojo, que tengo que reconocer que en varios momentos me he encontrado dentro de este grupo de compatriotas, pues para ellos y para mí también, mi reflexión final: recordemos que de la prisa solo queda el cansancio, Allende por otras razones se vio obligado a radicalizar la revolución, cuando aún no estaban dadas las bases necesarias para esta radicalización, a Zelaya por no entender o no saber leer la realidad de la situación de la sociedad hondureña en la coyuntura preelectoral, lo único que consiguió con la radicalización de su postura, fue que Lobo sea el presidente de Honduras y si bien es muy cierto, que este nuestro gobierno, en muchos casos parece mas que toma medidas revolucionarias, que llevar adelante una verdadera revolución, pues si no fuese por esta lentitud y la mucha mano zurda de nuestro líder, quizás, hace rato, que habríamos perdido a nuestro líder y a nuestra revolución.
Hay que tener cuidado con lo que pedimos, miles de Chilenos le pidieron a Allende llevar adelante la profundización del proceso revolucionario y las condiciones no estaban dadas, Chávez radicalizo el proceso por unas razones muy estratégicas y casi pierde la cabeza, así que si queremos llevar adelante este proceso en sana paz, pongamos todos nuestro grano de arena para conseguir convertir este bello sueño en realidad.