ignoramos lo que podríamos ser”

 Shakespeare

 Estaba en Internet sin notar los impedimentos o las prohibiciones que hace Chávez según la cada vez más mediocre oposición venezolana que ya tiene casi agotado su repertorio de denuncias i disparates ridículos. Leo la noticia de la visita del presidente de la China comunista i popular, Hu Jintao al presidente Barack Obama, Sumo Sacerdote del Imperio; comienza la indignación al leer que este habitante de la Casa Blanca expresa: “La historia demuestra que las sociedades son más armoniosas, las naciones más exitosas y el mundo es más justo, cuando se respetan los derechos y las responsabilidades de todas las naciones y de todas las personas, incluyendo los derechos humanos universales de todos los seres humanos”. Si tomar en cuenta las redundancias que encierra ese corto discurso, tratando de responder al mandatario chino que habla de la armonía, el pacifismo i las búsqueda de la felicidad de su pueblo, lo que provoca al leer la máxima expresión del cinismo –tan inmenso que lo califico de cósmico− es gritar: ¡Qué de co…colgantes tiene este señor Premio Nobel de la Guerra, el Terrorismo i la injusta injerencia intervencionista en todos los países del mundo, para provocar asesinatos i destrucción, i establecer el caos! El presidente chino había expresado, “que había encarado muchos desafíos i aún hai muchos por hacer en su patria”, no sé cómo pudo encarar tan cínicas palabras, i no caerse hacia atrás con esa trompada en la cara.

 El cinismo según el diccionario lo primero que señala es desvergüenza en el mentir o en la defensa y práctica de acciones vituperables así como en segunda acepción, imprudencia obscenidad descarada, antes de referirse a la doctrina filosófica de los cínicos, posteriores a Sócrates que, para información del lector exige por lo menos algunas aclaraciones, porque en cuarto lugar señala también el diccionario, desaseo, grosería i otros agregados que pone la gente.

 Filosóficamente, la historia señala así, a la escuela de Antístenes –escuela Cínica− acaso derivado el término del gimnasio Cinosargo, donde se impartía la enseñanza i que algunos, como Diógenes se consideraba “verdadero perro” (recuerden que se le representa mugroso, sentado en la tierra con el cielo como único techo, o al lado de un barril (ejemplos de la vida más humilde entregada a la naturaleza) i la anécdota ante la presencia de Alejandro Magno. Sin embargo lo interesante de esta posición, es en lo ético. En este campo lo que muestran los cínicos, es el desprecio de las convenciones sociales, la opinión pública i hasta la moral comúnmente, de paso estableciendo una actitud radical entre la lei i la naturaleza, a la que pretendían volver. Además, el término cinismo o cínico, en inglés tiene sus bemoles, i en el diccionario de Murray –señala Lalande− Cynic (como sustantivo) es “Una persona dispuesta a burlarse de los demás o a encontrarles defectos; alguien que muestra tendencia a desconfiar de la sinceridad o del valor de los motivos y las acciones de los hombres y que tiene el hábito de expresarla con burla o sarcasmo”. Así han sido casi todos los presidentes norteamericanos con algunas excepciones que sobran dedos de una mano, para contarlos. Algunos ha sido destacados cínicos, como Eisenhower, Reagan, Nixon, los Bush,  etc., i este afro descendiente quiere estar con ellos. Empero, he aquí el motivo de la frase de William Shakespeare que puse de epígrafe: “sabemos lo que somos, pero ignoramos lo que podríamos ser”. Este presidente que ha continuado una política guerrera, intervencionista, terrorista i depravada, peor que la de su antecesor George W. Bush, que está mandando a asesinar presidentes para lograr sus fines, ignora lo que en poco tiempo, podría llegar a ser. Remember a Kennedy i a Nixon, solamente.

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