2. Esther Gordillo y Alonso Lujambio, dirigente del SNTE y secretario de Educación, respectivamente, son los dos más poderosos comisionados. La Gordillo estuvo frente a grupo (como profesora) hasta principios de los sesenta y lleva ya 50 años cobrando sus salarios como comisionada dirigente sindical; Lujambio, por su parte, recibió la comisión de secretario de la SEP por órdenes del presidente ilegítimo Calderón, para hacerse visible en el aparador ante su posible candidatura presidencial. (El día de hoy se publican en Yucatán muchas denuncias contra él porque mucho más que una gira para conocer el estado de la educación, dedicó la mayor parte de su tiempo a realizar reuniones, comidas y desayunos, con los líderes panistas de la entidad para ganarles su apoyo) La realidad es que Lujambio es una papanatas en educación; sabe lo que yo de astronauta, es decir, nada.
3. Fuentes del sindicato apuntaron que hay “60 mil comisionados ATP”, también llamados “operadores”. Ellos sirven como ayudantes de supervisor o trabajadores administrativos. Sin embargo, mis amigos Ramírez Vázquez y González Figueroa, de una de las corrientes CNTE, según publica La Jornada, son más claros: explicaron que los “comisionados” son los verdaderos integrantes de la maquinaria electoral de Esther Gordillo porque son la carne de cañón que envían a las tareas partidistas y de proselitismo político, ya que sólo se encuentran “acuartelados” en las oficinas, “en muchas ocasiones sin hacer nada”, en espera de las órdenes de los dirigentes sindicales. La realidad es que esos más de 65 mil comisionados tienen un control total durante las campañas electorales: los ubican en buenos hoteles, reciben cursos y propaganda para visitar escuelas y domicilios, como profesores se les designan para vigilar casillas y se les usa para el conteo de votos.
4. ¿Puede un candidato presidencial despreciar a más de 65 mil comisionados, con salarios pagados por la SEP, con un nivel de entendimiento y, además, con muchos años de experiencias en trampas electorales? López Obrador fue la excepción en 2006, al despreciar los pactos que le ofreció la Gordillo, y Vicente Fox en el 2000 y Calderón seis años después, quienes fueron los que mejor la aprovecharon. De acabar con esos comisionados tendría el país profesores para unas 20 mil escuelas; pero entonces que haría el PRI, el PAN, el PANAL, sin esas decenas de miles de comisionados “gratuitos” que la profesora Gordillo tiene la gran capacidad de acuartelar para ofrecérselos al partido que más ofrezca? La SEP y el SNTE, debe reconocerse, es un poderosísimo aparato de poder. Imaginen un aparato sindical de más de millón y medios de asociados con miles de funcionarios; directores de Educación, supervisores, directores de escuela, haciendo trabajo para un partido.
5. La realidad es que jamás me he desligado de la CNTE, no porque me den pena “los pobres y humildes maestros explotados y engañados”, sino porque se encuentran distribuidos en todo el país y pueden estar en contacto directo con padres de familia y estudiantes en momentos de luchas importantes. Desde hace un siglo los curas, los médicos y los profesores, estuvieron directamente ligados con las comunidades; aunque a partir de mediados de los treinta a los maestros se les comenzó a calificar de comunistas y ateos, aquella presencia fue siempre esencial. Hoy los tres sectores redujeron su presencia y prestigio por causas diferentes, pero los profesores rurales siguen con fuerza y presencia. El 80 por ciento de los maestros, así como sus alumnos, piensa con la ideología capitalista e individualista que muy efectivamente les han transmitido por la SEP y el SNTE, pero en momentos coyunturales esos mismos maestros pueden cambiar de bandera.
EGIPTO
6. Se desploma el presidente Egipcio Mubarak; la noticia me saca del tema sobre educación porque la emoción de ese derrumbe me lleva a aplaudir la lucha del pueblo egipcio; pero al mismo tiempo me pregunto: ¿Qué sigue? ¿Se irán los millones de manifestantes a sus casitas a descansar mientras los poderosos negocian el futuro? ¿Dejarán en manos del ejército, del gobierno yanqui, de los líderes de grupos toda la negociación? Deseo que estas batallas continúen en el mundo, en particular en México; pero, ¿Cómo asegurar, garantizar, que esos cambios beneficien realmente a las mayorías y no sean sólo cambios de fachada? Desafortunadamente los pueblos no tienen “organizaciones representativas” ni hábiles representantes para negociar; lo único que pueden ocupar son las calles, pero no en cualquier momento porque la clase dominante posee estrategias muy efectivas para mediatizarlas y manipularlas.
7. Al renunciar Mubarak deja el poder en manos del ejército no del pueblo y sus legítimos representantes. ¿A quién le entregará el ejército el nuevo poder? Pienso que el pueblo no debe dejar la plaza. Debe continuar en ella hasta que un nuevo gobierno le garantice un profundo cambio económico y político. ¿O es que acaso se va a retirar feliz confiando en un nuevo gobierno? Si se retira de la plaza será nuevamente derrotado y tendrá que esperar varios años para una nueva ofensiva movilizadora. De todas maneras hay que confiar en que la situación internacional ayude a cambiar las cosas en serio; pero en caso que los EEUU dominen la situación el pueblo será manipulado, engañado, reprimido. Obama parece que hablará entre una hora; debe estar claro que Obama es representante de los poderosos imperialistas yanquis y su mensaje seguramente será como todos: buscar la simpatía internacional mientras asegura su dominio en Egipto.