Reunión en Buenos Aires de “The Mont Pelerin Society” y sus intelectuales “liberales”
Circos de la Ideología Dominante. La sociedad del monte Pelerin exhibe sin pudor sus principios y sus fines[1]. Pasea por el mundo una plataforma ideológica desvencijada e insostenible en la que los argumentos burgueses se corroen las entrañas taladradas por la crisis mundial del capitalismo. Dicen que les preocupan los “peligros de una sociedad civilizada”. Son Caballos de Troya apolillados y sin ruedas.
A nosotros nos resulta de gran utilidad contemplar las contorciones mentales a que se ven obligados los mercenarios intelectuales de la burguesía. Eso tiene propiedades didácticas inmarcesibles, muestran el ideario profundo de su maldad objetiva. Desnuda sin misericordia las monstruosidades que piensan y ejecutan aunque las disfracen con oropeles culteranos. Es un regaloque si no fuese aberrante bien pudiera pasar por sainete a carcajadas. Mientras tanto uno de sus santones, investido con “premio nobel”, asesina inocentes y pisotea a la civilización que a los de “Mont Pelerin” tanto, dicen, les preocupa. En la invitación a su encuentro de Buenos Aires ni una palabra, sobre los asesinatos en Irán, Afganistán, Pakistán…Libia.
En el cuadrilátero boxístico de su imaginación paupérrima, pelea el “bien” contra el “mal” y se anuncia un final feliz de corte maniqueo. Hacen pasar como si fuesen iguales las fuerzas democráticas de los pueblos y los intereses mercantiles de unos cuantos mafiosos criminales. En su ecuación ideológica la lucha de una inmensa mayoría es igual a los negociados de unos cuantos pelagatos. Y viajan por el mundo con esa telenovela rancia. Y, como era de esperarse, el reparto incluye nombres como el de Vargas Llosa, Aznar y secuaces de calaña similar.
La lucha de clases no es un juego de naipes entre “Dios” y el “Diablo”, es el ascenso emancipador, el motor de la historia, de millones de personas en contra de una minoría asesina que, armada con leyes, costumbres, instituciones y balaceras, conspira para adueñarse de los recursos naturales, la mano de obra y la conciencia de los trabajadores. “El procedimiento moralizador del filisteo consiste en hacer creer que son idénticos los modos de actuar de la reacción y los de la revolución…El rasgo fundamental de esas asimilaciones e identificaciones lo constituye el ignorar completamente la base material de las diversas tendencias, es decir, su naturaleza de clase, y por eso mismo su papel histórico objetivo”.(León Trotsky)
El capitalismo, aclarémoslo siempre, es todo lo contrario a la palabra Libertad y a su ejercicio colectivo y creador. No van a confundirnos los señorones ni los señoritos de la burguesía, aunque conferencian en hoteles caros y publiquen revistas, panfletos, artículos y libros del tamaño que fuese. No van a engatusarnos con la algarabía de sus adjetivos ni con los enredos de sus silogismos mercantiles. El capitalismo es el capitalismo aunque contrate intelectuales para hermosearse y esconder las muertes que produce minuto a minuto. El capitalismo es lo más, imaginablemente, enemigo de la Libertad humana en su extensión más amplia. El capitalismo sólo es amigo de la libertad de empresa y de la propiedad privada. Eso excluye a la inmensa mayoría de los seres humanos. Encuentros como los de “The Mont Pelerin Society” son sólo concilios ideológicos de una burguesía que desesperada, busca publicitas ingeniosos (les llaman intelectuales) para darse banderas de sobrevida.
Así
como se multiplican los frentes bélicos que imperialismo abre para
saquear a los pueblos; así como proliferan las armas que matan inocentes
y asedian países para esclavizar a sus trabajadores; así como se
multiplican los clubes de mercenarios golpistas diseminados en células
que se camuflan de “empresarios”, “banqueros”, “curas” u “hombres del
campo”; así como se perfecciona y disciplina el discurso de los “mass media”
oligarcas y se expande en la geografía y en las conciencias… así,
igualito, se multiplican y movilizan los foros que la burguesía inventa
para fabricar matrices ideológicas suscritas por “intelectuales”
mansitos, por sabihondos serviles a la estulticia y al crimen, cómplices
de aberraciones inenarrables. Nos sirve saber cómo operan para combatir
sus necedades en la Batalla de las Ideas. Aunque sean “famosos”, aunque
la tele los haga próceres del servilismo y firmen muchos libros. Caros.
Buenos Aires acogerá una Cumbre a la medida de Washington y el FMI
Por Carlos Aznárez
DOS DINOSAURIOS DE LA EXTREMA DERECHA PARTICIPARAN EN LA CUMBRE: VARGAS LLOSA Y AZNAR
A partir del próximo domingo y hasta el miércoles 20, Buenos Aires volverá a ser sede de una Cumbre de la derecha internacional más extrema, tanto en sus lineamientos económicos y politicos, como en su práctica conspirativa. Esta vez, sus principales popes llegarán de la mano de la Sociedad Mont Pelerín (SMP), una asociación que durante 64 años ha sido, a nivel mundial, uno de los buques insignia de las ideas del neoliberalismo. Fundada después que finalizara la Segunda Guerra Mundial, por el Premio Nobel de Economía, Friedrich Von Hayek, ha servido de reducto, entre otros, a su colega e inspirador de la Escuela de Chicago, Milton Friedman, al ensayista Walter Lippman y hasta a la “dama de hierro” inglesa, Margareth Thatcher.
La iniciativa de la SMP se desarrollará en los salones del Hotel Sheraton, con el título de “El desafío populista para la libertad en América Latina”. Por lo tanto, es de esperar que dicho ámbito se desborde de consignas pro norteamericanas, criticando con saña al progresismo latinoamericano y en especial a los procesos revolucionarios de Cuba, Venezuela, Ecuador, Bolivia y Nicaragua. También, habrán de escucharse loas al libre mercado, junto a las consabidas demonizaciones del liderazgo de Hugo Chávez, Fidel y Raúl Castro, Daniel Ortega o Evo Morales.
El staff de participantes tampoco sorprende: son casi los mismos personajes que recorren el mundo cantando loas al discurso ultra liberal, exigiendo privatizar cada una de las fuentes naturales de riqueza de los países, defendiendo las empresas trasnacionales o la intervención militar occidental en el mundo árabe, reclamando más mano dura contra la “inseguridad”, y denostando, de paso, a los pueblos originarios que exigen las tierras que les pertenecen.
La reunión tiene ya varios antecedentes como fue el encuentro organizado por la Fundación Libertad, en Rosario en 2008, en pleno conflicto del campo, o el de octubre pasado en la Legislatura porteña –auspiciado por la Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES) y la Fundación Pensar. En el mismo espíritu destituyente, figuran las Conferencias anuales de Unoamérica, otra organización similar en virulencia a las anteriores, que no dudó en apoyar a los golpistas bolivianos y venezolanos, y el encuentro ultra-derechista en las instalaciones del Senado de EEUU, destinado a frenar “el avance populista y socialista en América Latina”.
Esta vez, la inauguración correrá a cargo de tres primeras espadas del pensamiento neoliberal, el argentino Gerardo Bongiovanni, titular de la rosarina Fundación Libertad, el ultraconservador Kenneth Minogue, profesor de la Escuela Inglesa de Economía y presidente de la Sociedad Mont Pelerín, y Alvaro Vargas Llosa, al que le agrada que lo definan como “ensayista peruano de tendencia liberal y antisocialista”.
Figuras rutilantes del evento serán, obviamente, el ex mandatario español José María Aznar, quien recientemente no tuvo mejor ocurrencia que afirmar que “a la Cuba de Fidel habría que aplicarle la misma receta que a la Libia de Gadafi”. Aznar será, sin dudas uno de los puntales en reclamar más acciones contra lo que él considera “avasallamientos constantes a la libertad de expresión en Venezuela, Nicaragua y Argentina”, según expresara en coincidencia con los reclamos de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP).
Junto a él, brillará por todo lo alto el polemico escritor con título nobiliario ad hoc, el marqués Mario Vargas Llosa –quien horas después participará en la inauguración de la nueva edición de la Feria del Libro- y que no tuvo todas consigo en la reciente elección peruana. Vargas había señalado a voz en cuello: “si triunfa Ollanta Humala sera una desgracia para todos los demócratas”, y por eso puso sus fichas junto al ex presidente Alejandro Toledo. Para su desgracia, su pupilo entró cuarto cómodo.
También está confirmada la participación del economista estadounidense Gary Stanly Becker, otro baluarte ideológico de los “Chicago Boys” y defensor a ultranza del liberalismo económico. Becker, ejemplar alumno de Friedman y Theodore Schultz, es el mismo que acaba de proponer que los inmigrantes deberían pagar, como si fuera un impuesto cualquiera, “el derecho a inmigrar” y de esta manera tener acceso a puestos de trabajo en el “mundo libre”. Como se ve: todo un dechado de “solidaridad neoliberal”.
Otro infaltable en estos encuentros es el extremista cubano Carlos Alberto Montaner. Muy amigo de Aznar y su fundación FAES, que lo candidateó en 2008 para una hipotética “campaña presidencial” en la Isla. También se enorgullece de la amistad con el recién absuelto terrorista Luis Posada Carriles. Denunciado en varias oportunidades como agente de la CIA, Montaner carga sobre sus espaldas la acusación de haber intentado asesinar en París al comandante cubano Ramiro Valdés, según lo afirma en un libro otro terrorista anti cubano, Orlando Bosch.
También disertarán los pinochetistas chilenos Arturo Fontaine, actual Director del Centro de Estudios Públicos de ese país, y el Secretario General de la Presidencia, Cristián Larroulet, quien funge de principal asesor economico de otro SMP, el presidente Sebastián Piñera. Junto con su compatriota, asiste el escritor Sebastián Edwards. Consultor del BID, el FMI y la Agencia para el Desarrollo Internacional de Estados Unidos, Edwards muestra como una de sus grandes cocardas ser Consultor Económico del gobernador californiano y enemigo de los inmigrantes, Arnold Schwarzenegger.
Soldado de la causa neoliberal, intervendrá el economista hispano-argentino Carlos Rodríguez Braun, conchabado en la Universidad Complutense de Madrid. Izquierdista en su juventud, lo que le costó irse al exilio, Braun es el clásico personaje que con tal de blanquear su pasado no ha dudado de pasarse a las filas del PP, de Aznar. Junto a él, hablarán el guatemalteco Giancarlo Ibargüen, Rector de la Universidad “Francisco Marroquín”, el fondomonestarista mexicano Enrique Krauze, el hindú Deepak Lal, vicepresidente de Mont Pelerín, la chilena pinochetista Lucía Santa Cruz, quien de Buenos Aires viajará a Londres invitada a la boda de su amigo el Príncipe Carlos, el historiador Ezequiel Gallo, el escritor Marcos Aguinis (de la Fundación CADAL, otro satélite de la Internacional de Derecha), los economistas Ricardo López Murphy y Alberto Benegas Lynch, Jr, y por supuesto, otro de los principales anfitriones del evento, el gobernador capitalino Mauricio Macri, que en pasados encuentros se desvivió por demostrar su alineamiento internacional con tan ilustrados acompañantes.