2. Hay muchas protestas contra la visita a España del papa Benedicto porque se dilapidarán cientos de millones de euros que bien pueden servir para aminorar la pobreza de millones de españoles desempleados y de ingresos miserables. En los medios de información mundiales se han silenciado las manifestaciones contra la visita y en el Internet te dicen simplemente que “no se puede mostrar”. Pero no puede olvidarse que una visita papal –como las muchas que tuvo México en décadas pasadas- apaciguan el corazón y el cerebro de los millones de fieles que se arremolinan alrededor del Papa respirando sus olores sacros. En este momento, en que las batallas de las decenas de miles de “Indignados” crecen y sus demandas políticas son más claras, los partidos PSOE y PP, así como los poderosos empresarios, buscan la oportunidad de que los jóvenes caigan en la trampa de la “concordia”, de la paz y del “amaos los unos a los otros”. Pero no lo lograrán.
3. Se pueden mirar decenas de entrevistas coladas o exhibidas por Internet. Los más protestan –no contra la visita, porque la Iglesia católica puede hace lo que le venga en gana- sino contra el despilfarro del dinero público en la visita que debe ser costeada de manera exclusiva por los católicos. “¿Quién lo invitó, cuándo nos consultaron, por qué dilapidan los impuestos que todos pagamos, por qué no los usan para servicios educativos y de salud?”. Los españoles politizados son muy abiertos y plantean sus ideas con mucha franqueza; pero se reconoce que los seguidores de los ideales del ex dictador Franco que falleció en 1975, han pasado de los viejos a sus hijos y más familiares. Hoy éstos tienen muy grande presencia en el PP de Aznar y Rajoy, pero también en el PSOE donde no ha habido voluntad ni interés para deslindarse de ese pasado oprobioso que en 1939 terminó de asesinar a la República.
4. España tiene 46 millones de habitantes, menos de la mitad de los que tiene México (113 millones); pero la iglesia española piensa que el 73,5 por ciento de la población es católica aunque sólo el 14 por ciento asista a misa, según investigadores. Sin embargo España está sobrepasada en curas, pues tiene un cura por cada 1.709 católicos, más que la media mundial de un sacerdote por cada 2.849, de acuerdo con datos de finales del 2010. En España se han escondido muy bien los escándalos de pederastia y el Estado y la Iglesia han mantenido buenas relaciones a pesar de que en España están vigentes el matrimonio homosexual que el presidente Zapatero aprobó en 2005 y el aborto (que se legalizó en 1985) han sido completamente legales bajo el Gobierno del PSOE. La realidad es que España, como país europeo que rompió algunas ataduras con el pasado, sigue siendo uno de los países más conservadores y católicos del mundo.
5. La historia de España en el siglo XX, dice el escritor Mariano Sánchez Soler, es también la historia de un enriquecimiento perpetrado en condiciones excepcionales. Poderosos personajes que unieron su fortuna y su destino a la suerte del franquismo, desde el entorno familiar del general Franco han sabido adaptarse al sistema democrático, mientras una nueva generación (Aznar, Rato, Trillo Figueroa, Arias-Salgado, Fernández-Cuesta, García Escudero, Calvo-Sotelo, Fernández-Miranda, Cabanillas, Mariscal de Gante... apellidos viejos con rostros jóvenes) se preparaba para ejercer el poder bajo la Monarquía parlamentaria. Hoy, los últimos March, Koplowitz, Fierro, Fenosa, Coca, Meliá... continúan entre las familias más ricas e influyentes de la España del siglo XXI, y comparten el pedestal con otros compañeros de aventura, millonarios emergentes salidos directamente de la política falangista y tecnocrática.
6. Por todas esas familias y apellidos sigue teniendo mucha fuerza en España el viejo franquismo; a pesar de los gobiernos “socialistas” o socialdemócratas de Felipe González y Rodríguez Zapatero, dentro del gobierno de España no han dejado de estar presentes los hijos de los sectores más derechistas que siguen haciendo grandes negocios a la sombra de los diferentes gobiernos. Los españoles honrados, que durante décadas han estado atentos a la política de su país, no han encontrado muchas diferencias entre los gobiernos del PSOE y el PP, así como en las relaciones con el monarca español, heredero de Franco. ¿Cuál será el futuro de España, de aquel inteligente y estudioso país peninsular con tantas aportaciones en la literatura, la historia, con alta producción artística y poética, sobre todo líder en las luchas libertarias desde los años 30, es decir, hace por lo menos 80 años?
7. La visita del Papa a España que se iniciará mañana, ha puesto nuevamente a pensar y a protestar a los españoles. Esto de pensar y protestas ya es en sí un buen avance. Permitirá observar el movimiento de los gigantescos capitales e intereses que rodean la visita con el fin de aprovecharla para concertar negocios. En ninguna de las giras del poderoso jefe del Vaticano y su iglesia se dan pasos gratuitos sin antes concertar acuerdos y negocios; son tantos los millones de euros y dólares que se ponen en circulación y tantos los problemas que se enfrentan en el mundo que ningún necio negaría que tras esas visitas papales se firman muchos acuerdos secretos. El Papa ha sido y seguirá representando un enorme poder. Por eso España lo recibirá nuevamente a pesar de las enormes protestas que se han desatado contra su visita. Los negocios no pueden esperar y los Indignados siguen siendo una amenaza.