Recomiendo vivamente a todos los venezolanos y latinoamericanos ver el video REVUELO EN MEXICO: UN EMPRESARIO GOLPEA BRUTALMENTE A UN EMPLEADO publicado en Aporrea el 11/01/12, y a que me acompañen en la invitación que hago a ese Excelentísimo HDP para que nos visite y aquí poder enseñarle cómo respetamos y hacemos que nos respeten.
Desde el punto de vista psicológico todo parece indicar que el señor Miguel Moisés Sacal Smeke sufrió abuso sexual infantil de los religiosos encargados de su educación, y esto le causó una grave impotencia que dificulta su vida amorosa o matrimonial, además de una evidente indefinición genital, y la consiguiente vergüenza y culpa que lo vuelve un histérico agresivo y prepotente golpeador de niños, mujeres y personas indefensas.
Desde el punto de vista farmacológico, parece evidente que la narcoviolencia ha creado problemas en la cdome4rcialización y la calidad de los productos artesanales producidos por Colombia, muy por debajo de la calidad original de la empresa MERCK de principios del Siglo 20, tan alabada por Sigmund Freud. En otras palabras, Don Miguel Moisés se está metiendo una basura que le alborota el racista alemán que algunos sionistas llevan por dentro. La repugnancia y el odio que este empresario provoca son antifascismo puro y duro.
Desde el punto de vista histórico, este caso nos da una dolorosa medida de los limitados alcances de la Revolución Mexicana en esta época del capitalismo salvaje. En su tiempo, hombres como Francisco Villa o –mejor aún- su lugarteniente Fierro, sabían cómo tratar adecuadamente a los empresarios como Don Miguel. No pretendemos que la justicia mexicana prive a Sacal Smeke de su derecho a la defensa, pero los dorados de Villa lo hubieran tomado “provisionalmente” medidas más drásticas.
Que Don Miguel Moisés Sacal Smeke venga a Venezuela y vea lo que le pasa si agrede a un empleado de esa manera y por dónde le vamos a meter su “Capitalismo Popular”. Lo esperamos con los brazos abiertos y el corazón afilado.
Empresario cabrón ¡Viva Zapata!
A continuación el vídeo del empresario agresor:
