1. Los priístas más atrasados y agresivos: Francisco Arroyo, Fernando Castro y Carlos Jiménez, coincidieron en señalar que “Andrés Manuel López Obrador será el responsable de las acciones que lleve a cabo el movimiento #YoSoy132 y otras organizaciones radicales en contra del triunfo de Peña Nieto como presidente de la República”. Dijeron que “es peligrosa la convocatoria del movimiento #YoSoy132 y otros grupos con actitudes radicales; significan un riesgo, y eso debería de preocuparles a los partidos de izquierda y a López Obrador, porque eso es producto del sentimiento que él está generando. La declaración de AMLO contra El País, es profundamente ofensiva, y el anuncio que hizo el #YoSoy132, o lo que sea, porque parece que ya no es el 132 que vimos”.
2. Lo peor es que no se trata solamente de los funestos priístas; también los perredistas –que se autodenominan de izquierda, sin decir que son el oportunismo socialdemócrata- se deslindan así: “La dirigencia nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD) se deslindó del plan de acción impulsado por al menos 300 organizaciones, entre éstas el movimiento #YoSoy132, que busca impedir la toma de protesta de Enrique Peña Nieto como presidente de la República, y pidió ayer a los próximos legisladores que integrarán las bancadas perredistas mantenerse unidos en torno a Andrés Manuel López Obrador hasta que se limpie la elección presidencial”. Al PRD no le interesa si son más de 300 organizaciones ni mucho menos las coincidencias, sino el legalismo institucional.
3. Por ese tipo de posiciones electoreras y oportunistas el PRD es repudiado –como al PRI y al PAN- por los jóvenes de izquierda en todo el país. Dicen los jóvenes en sus gritos de combate: “Ni PRI, ni PAN, ni PRD, el pueblo al poder” ¡“fuera el PRIAND”! ¿Cuándo se convirtió el PRD en socialdemócrata y electorero? Muchos dirían que así nació y que la búsqueda de hacerlo un partido de izquierda sólo radicaba en unas cabecitas que terminaron por abandonarlo. Nacido en 1989 encabezado por descontentos del PRI, de corrientes de izquierda oportunista y de unos cuantos luchadores sociales honestos, el PRD nunca pudo unificar puntos de vista o programas políticos. Prefirió aceptar una gran cantidad de grupitos de presión que luego se constituyeron en “tribus” que reclaman cargos para beneficio personal.
4. Con cerca de 23 años de vida como partido el PRD ya parece emparejado con la profunda corrupción del PAN y el PRI. Las poquísimas personas honestas que le quedan no renuncian a él para no dejar a su dirección oportunista con el registro, los subsidios, las propiedades y por no tener aún otro partido. Aunque Noroña y Monreal han renunciado, los mismos López Obrador, Encinas, Padierna, Batres, siguen en él de manera casi inexplicable. ¿Será que el movimiento Morena se transforme en partido con todo el peligro que representa el convertirse en más de lo mismo, en un partido electoral más que luego se divida y subdivida como todos los partidos del mundo en los últimos 200 años? ¿Será esta la oportunidad para que se instale en México el bipartidismo (PRI-PAN) que signifique que ya estamos igual a la alternancia de EEUU?
5. El PAN, que cayó en estas elecciones al tercer lugar porque durante el gobierno panista de Felipe Calderón creció el desempleo, la miseria y fueron muertos más de 60 mil mexicanos, ha permanecido en silencio seguramente lamiéndose las heridas y buscando una nueva estrategia política que le permita seguir defendiendo su programa empresarial, católico y al sistema capitalista en conjunto; sin embargo no ha dejado de pedirle a López Obrador que reconozca al nuevo gobierno electo del PRI para que se “pacifique el país”. Son muchas las organizaciones de la clase dominante que -recociendo cínicamente la compra de votos, la desigualdad en gastos, el pago de encuestas y el uso y abuso de la TV en beneficio de Peña Nieto- le piden a AMLO doblar las manos “en beneficio del país”.
6. “Gobierno, capital y clero –decía y escribía Ricardo Flores Magón en 1911- es la trinidad sombría que domina al país desde hace mucho tiempo”. RFM no solo luchó contra la dictadura de Díaz hasta 1911, sino también contra los “gobiernos revolucionarios” de Madero (1911-13), Carranza (1917-20), De la Huerta (1920) y Obregón (1920-24) que sólo buscaban poder y riquezas. Flores Magón caminó con la bandera del liberalismo obrerista desde 1900 y bajo el Anarquismo desde1910 al denunciar que la revolución maderista sólo representaba los intereses de los ricos. Fue asesinado en la cárcel de EEUU en 1922 después de publicar decenas de números del periódico “Regeneración”, crear cientos de círculos obreros, de apoyar decenas de huelgas y de negarse a apoyar gobiernos representantes de los empresarios.
7. Si viviera Flores Magón estaría participando en las acciones de los jóvenes del “Yo soy 132” y demás izquierdistas radicales condenando el oportunismo de los partidos PRI, PAN, PRD que sólo buscan el poder económico y político. Estaría luchando en las calles contra la manipulación de Televisa, TV Azteca, Milenio, y Radio Fórmula que buscan idiotizar al pueblo; estaría presionando a AMLO para que impulse el movimiento de los ciudadanos a las calles sabiendo que el IFE, el TRIFE y demás van a terminar dándole la razón y el gobierno a Peña Nieto. Dejemos que esos partidos, cuyos dirigentes sólo piensan en negocios para hacerse más ricos, sigan expresándose contra los grupos y movimientos que sólo quieren acodarse en su casita mientras el PRI y Televisa terminan por imponer a su presidente. Nosotros sí tenemos dignidad. (17/VII/12)