Para conocer la inmensidad de la figura de Mandela es imprescindible conocer la tragedia humana que significó para la Republica de Sudáfrica y el África en general el régimen del Apartheid.
Apartheid, es un término africaan y neerlandés que significa algo como vida separadas. En el caso de Sudáfrica, consistió en apartar en todos los ordenes, comenzando por el jurídico, a las etnias del país, separándolas en europeos y no europeos, o el lenguaje utilizado en ese momento, en blancos y negros. A la gente africana, por imposición imperial se le veto el disfrute de su propia tierra.
No debe haber lugar a la duda o a la ambiguedad, el apartheid fue un sistema de gobierno utilizado por el imperio inglés en los territorios africanos ocupados, y en el caso de Sudáfrica legalizado e impuesto a sangre y fuego. Nada nuevo en las formas imperiales que utilizaron el genocidio como metodo de apropiación de territorios. Igual lo hicieron en America, en el Caribe, procediero de forma similar en la India.
En Sudáfrica fue una división abiertamente desigual. Los europeos y sus descendientes ejercían el control absoluto del aparato del estado. Se apropiaron de la casi totalidad de las tierras, desplazaron a la gran parte de la población a lugares similares a campos de concentración. Se quedaron con todos los privilegios, sumiendo a la población negra en las penurias de la pobreza y la humillación.
Así para circular en cualquier lugar, la población africana, la mayoritaria, la originaria, tenía que tener un grueso cuaderno, tipo pasaporte donde se registraba cada uno se sus pasos. Las zonas prohibidas abundaban. Los blancos tenían zonas exclusivas, las entradas a servicios públicos estaban divididas, si una persona originaria trabajaba para un blanco, este debía solicitar permiso y pagar un impuesto. Ni siquiera se podían bañar en la misma playa. Los peores trabajos, eran para la gente negra, a la que también se le sometía a exámenes médicos denigrantes para poder acceder a esos empleos. El apartheid se implementó oficialmente desde 1948, con un marco jurídico impresionante de más de 100 leyes, que prohibían desde los matrimonios mixtos hasta la coexistencia en las mismas urbanizaciones. Por supuesto, los derechos políticos se reservaron estrictamente a los blancos.
En cuanto a la escuela, ninguna persona negra tenía derecho a cursar estudios universitarios. Los europeos y su descendencia que hablaban el africaan (una lengua que simplifica el holandés), pretendieron que la mayoría sudafricana, aprendiera por la fuerza este idioma, para que abandonara su cultura, su unidad como nación. Para consolidar el imperial apartheid mataron a miles de personas negras y afrodecendientes, incluyendo niñas y niños. Así actuaba la segregación etnica, a finales del SIglo XX. No es algo abstracto, sin padre ni madre, el apartheid fue hijo del imperio europeo, en cualesquiera de sus operadores. Para el caso sudafricano, del inglés.
Contra todo este estado de injusticia, llamado legalmente apartheid, practica imperial europea para exterminar a la nación africana, se erigió Nelson Mándela. Él estaba muy claro de que lo significaba aquella opresión imperial, como lo expresó en su visita a Cuba:
"El apartheid no es algo que haya comenzado ayer. Los orígenes de la dominación racista blanca se remontan tres siglos y medio, al momento en que los primeros colonos blancos iniciaron el proceso de división y posterior conquista de los Khoi, los San y otros pueblos africanos: los habitantes originarios de nuestro país.
El proceso de conquista, desde su comienzo, engendró una serie de guerras de resistencia, las que a su vez generaron nuestra guerra de liberación nacional. Luchando con grandes desventajas, los pueblos africanos trataron de defender sus tierras".
No fueron 27 años en un claustro religioso. Fueron años de lucha de una trinchera obligada. Su actividad política le dio cohesión al partido Congreso Nacional Africano, en la convicción de que al tomar el poder político sería necesario un partido con capacidad y equipos formados para la mejor conducción de la Patria Refundada. Mandela, escogio como modus operandi la desobediencia civil que implementa desde 1952. En ella se inspirarían para en convocar el Congreso del Pueblo de 1955 y que este adoptará la "Carta de la Libertad" programa principal en la causa contra el apartheid.
Este plan era de clara tendencia izquierdista y nacionalista. Su principal idea fuerza era que "el pueblo se gobierne". Reclamaba la tierra para todas las personas, reducción de la jornada laboral, salario justo, educación gratuita y obligatoria. La dirigencia del CNA se inscribía, y con ella Mandela, en el movimiento panafricanita, socialista y del Sur que contaba entre otros con Krugma (Ghana), Toure (Guinea), Nasser (Egipto), Keita (Mali), Cabral (Cabo Verde y Guinea Bissau), Neto (Angola), Machell y Modlane (Mozambique), Mugabe (ZImbawe), Kouda (Zambia), Kama (Bostwana) Neyere (Tanzania). Vale decir, la ideología y accionar de los antiperialista o anti apartheistas sudafricanos era solida y de trascendencia internacional. El apoyo de los gobiernos de esos lideres sería vital para el movimiento de liberación sudafricano, en especial el de los países limitrofes que daría cobizgo a miles de exiliador y perseguidos a muerte del regimen imperial sudafricano.
Mándela fue catalogado junto a sus camaradas" terrorista, a pesar de seguir las enseñanzas de Ghandi. Después de varios arrestos es condenado a prisión perpetua en 1963. No obstante, desde allí, hará conocer internacionalmente los crímenes del régimen segregacionista de Sudáfrica, y mantendrá cohesionado al Partido Congreso Nacional Africano, que en algunos momentos parecía dividirse..
La actividad de Mándela desde la cárcel, sin precedentes en la historia política mundial, es un factor nodal en la abolición del apartheid. Mandela era inspiración y oxigeno para los miles que luchaban y entregaban sus vidas en las calles del país, con sus cantos de firmeza espiritual y sus impresionantes marchas y congregaciones.
En 1990, tras 27 años sale en liberta física. puesto que sus ideales siempre estuvieron en la calle, en las batallas populares. El gobierno no puede más con presión nacional e internacional, que se expresa a través de un bloqueo económico. Hasta los gobiernos europeos no tienen más remedio que sumarse, para intentar lavar la cara del holocauto africano que habían provocado.
De 1990 a 1993,a la par de buscar las condiciones de paz e idoneidad para una democracia multietnica en su país, Mandela realiza simbolica visitas a varios países del mundo. El Primero en América va a ser la Cuba Revolucionaria, para encontrarse, como el mismo lo expresará, con sus camaradas y amigos, dejando bien sentado de que pasta estaba hecho. El 17 de julio de 1991, dira en suelo cubano:
"El pueblo cubano ocupa un lugar especial en el corazón de los pueblos de África. Los internacionalistas cubanos hicieron una contribución a la independencia, la libertad y la justicia en África que no tiene paralelo por los principios y el desinterés que la caracterizan".
En 1994, el gran hombre y el ANC ganan las elecciones, se convierten en un adalid de la paz africana. Ya en el poder, como primer presidente democraticamente electo, además de ser el primer originario de su pueblo en serlo, impulsa una verdadera revolución que emoieza por derrumbar el muro de leyes segregacionistas y promocionar una verdadera constitución nacional que exprese el crisol sudafricano. Allí, además de una bandera que sintetiza la diversidad que habita la nación, la Constitución que hoy podemo denominar "Mandeliana", fija que su misión principal es:
"Remediar las injusticias del pasado y establecer una sociedad basada en valores democráticos, la justicia social y los derechos humanos fundamentales",
Sólo después de la victoria sobre los enemigos, sobre los verdugos de su gente es que vendrá la estrategia del perdón, no antes, porque hubiera sido claudicar, si después para mostrar la grandeza del gentilicio africano y la capacidad de construir el propio destino del país.
La vida heroica del revolucionario africano Nelson Mándela, se resume, en las palabras que pronunció en 1964, luego de ser condenado a cadena perpetua, un principio que guiara su existencia:
"He luchado contra la dominación de los blancos y contra la dominación de los negros. He deseado una democracia ideal y una sociedad libre en que todas las personas vivan en armonía y con iguales oportunidades. Es un ideal con el cual quiero vivir y lograr. Pero si fuese necesario, también sería un ideal por el cual estoy dispuesto a morir".
Ahora Sudáfrica, sin la segregación étnica, sin intervención imperialista, crece para todos, y es uno de los países más próspero del mundo.
Nelsón Mandela, Padre de Sudáfrica, vivió y luchó hasta el final guiado por esos grandes ideales, en nada compatible con el imperialismo ni el capitalismo.