Cómo mil millones de habitantes, de esta “nuestra única nave espacial”, el mundo hace peticiones en las navidades a el Niño Jesús, los católicos y a San Nicolás o Papa Noel, los protestantes anglosajones; nosotros los que nos distinguimos de los demás seres humanos por el color de nuestra piel y el fenotipo racial negroide, queremos pedirle a cualquiera de los dos o a los dos juntos, que nos escojan para el próximo periodo presidencial de los Estados Unidos a un anglosajón blanco de piel y si es posible de creencia religiosa protestante de la secta mormona.
Por primera en la historia de la humanidad, la máxima potencia del mundo eligió para presidirla a un hombre de color de piel Negra, o sea a uno de los nuestros. Era tal nuestra euforia que hasta creímos que se había ganado merecidamente el Premio Nobel de la Paz que le otorgaron. ¿Quién podrá contra nosotros, si Dios está con nosotros?. Nos pasó como cuando nos liberaron de la esclavitud: a la semana nos dimos de cuenta que todo había sido un engaño. Tuvimos que volver a la hacienda del amo, pero ahora sin la comida asegurada.
Con todos los demás presidentes de USA tuvimos algunos privilegios que hemos ido perdiendo con nuestro camarada Obama; uno de ellos es que no nos tomaban muy en cuenta para enviarnos a los frentes de guerra a morir en otras tierras a defender a la patria, pues hacer eso era un honor, al cual solo podían acceder los jóvenes blancos herederos del MyFlower para regresar llenos de medallas de honor. Con Obama y queriendo él demostrar, que también los Negros podemos ser héroes nos envió por miles a las últimas guerras, para que regresáramos llenos de medallas. Algo así como los “Rambos Negros”. El asunto es que en las últimas guerrasa las que enviaron a nuestros muchachos, a matar árabes y africanos, han regresado pero en bolsas plásticas negras.
Siempre la población carcelaria en USA ha sido mayoritariamente Negra, aun cuando apenas representamos el 20% de la población total. Lo normal era que a nuestros jóvenes los mataran en las calles por alguna actitud que la policía considerara sospechosa y los que lograban salir ilesos de los abusos policiales, iban a parar a las cárceles; pero ahora desde Obama, nuestros muchachos los están matando por el solo hecho de ser Negros y no por estar intentando cometer algún delito.
Ante la situación de desmejorada de la población Negra, por tener a un Negro de Presidente, es que nos dirigimos a Santa Claus, Papa Noel o el Niño Jesús, para que en las próximas navidades nos traiga un regalo que le sabremos agradecer: Un Presidente Blanco.
