Este 11 de septiembre se cumplen 47 años del salvaje y fascista golpe de estado ocurrido en Chile en el año 1973. El médico y líder chileno gana las elecciones con la coalición política "Unidad Popular", y desde ese momento las fuerzas reaccionarias de la derecha dentro y fuera de Chile desataron una feroz campaña y acciones para boicotear la gestión del Presidente Salvador Allende. Las medidas de nacionalización de la banca, el cobre, telefonía, los seguros, entre otras; desataron aun más la furia de las fuerzas reaccionarias e imperialistas. Venía el ataque de la contrarrevolución. Es una ley de los procesos sociales. Las instrucciones del Presidente de los EE.UU Richard Nixon fueron precisas: "Salven a Chile sin tener en cuenta los riesgos, no comprometer a la embajada. Diez millones de dólares si es necesario. Trabajo a tiempo completo, plan de acción en 48 horas". La orden estaba dada: "había que extirpar a como diese lugar el cáncer del marxismo". -- Desde ese momento la embajada americana, la ITT, los pelucones de la economía, partidos de la derecha, el nefasto periódico "El Mercurio", entre otros; desataron todo un asedio al nuevo gobierno, lo cual fue desde el desabastecimiento y el alza de los productos de primera necesidad hasta una criminal campaña mediática para crear pánico y zozobra en el pueblo chileno. Aquello fue bestial, hasta el punto que lograron minar la confianza de las Fuerzas Armadas Chilenas, las compraron y el 11 de Septiembre de 1973 tomaron el poder por asalto, en una acción por demás vergonzante que ocasionó miles de muertos, torturados, desaparecidos y una imposición a sangre y fuego de un paquete de medidas neoliberales, que fue vendido al mundo como "la salvación de la economía chilena".
Acabaron con la Constitución chilena. Fueron 17 largos años de cruel dictadura, bajo la mirada complaciente y alcahuete de la OEA y de la cacareada "comunidad internacional". El triunfo de Allende fue la primera experiencia socialista del continente por la vía electoral, lo que despertó una inmensa alegría y simpatía en todo el mundo. Ahora, tenemos que también la Revolución Bolivariana llega al poder por la vía electoral (1998) y le han aplicado todos los manuales de guerra habidos y por haber, y esta se mantiene victoriosa, resistiendo con un pueblo en la calle, movilizado y con una unidad cívico – militar (no existió en Chile). Todo esto gracias al presidente Chávez, que venía de las FANB y creó una nueva doctrina (Bolivariana) dentro de la institución armada. La Revolución Bolivariana es pacífica, pero armada. El proceso chileno fue pacífico pero desalmado. La movilización de calle permanente ha sido otro acierto de la Revolución chavista. El poder popular empoderado de la Revolución ha sido otro eslabón positivo. Los aliados internacionales (Rusia, China, Irán, Turquía, Países No Alineados, Alba) han sido otro factor importante en la consolidación de la Revolución Bolivariana (mundo multipolar). Al presidente Allende no le dieron chance de crear una sola emisora comunitaria, por lo tanto le hicieron una verdadera cayapa mediática. Fueron apenas mil días de gobierno en medio de un asedio descomunal. En muchos aspectos los camaradas chilenos fueron "ingenuos" (primera experiencia socialista por la vía electoral). El Comandante Chávez siempre contaba que le impactó grandemente el derrocamiento de Allende, a quien admiraba. Seguramente de la experiencia chilena, Chávez asimiló muchas enseñanzas para no volver a cometer los "errores" de aquella gesta chilena. De todas maneras Chile y Venezuela son dos pueblos hermanos que se volverán a encontrar: "por las amplias alamedas por donde transitará el hombre nuevo" --- como lo dijo el presidente mártir de Chile antes de empuñar el fusil y morir resistiendo en pleno combate. ¡¡VIVA SALVADOR ALLENDE!! ¡¡VIVA HUGO Chávez!! ¡¡VIVA CHILE!! ¡¡VIVA VENEZUELA!!