La dirigencia de Washington procura no innovar y repite la estrategia que le ha salido bien.
Esto lo noté desde que, en 1993 Estados Unidos impuso a México y Canadá un acuerdo regional de Libre Comercio conocido por sus siglas como NAFTA (North –American Free luego Trade Agreement). Ese mismo acuerdo, idéntico es el resultado que emerge de todas las posteriores negociaciones para el libre comercio de Estados Unidos con los otros países latinoamericanos, y hasta con Marruecos. Luego Washington intentó imponerlo a Europa. Como no lo logró, lo metió luego disfrazado como un acuerdo de libre comercio entre Canadá y Europa, cuyo contenido es idéntico al del NAFTA en cuanto a pérdida de soberanía ante los inversionistas extranjeros (entiéndase transnacionales norteamericanas ).
Tal como hace ahora con Rusia, los Estados Unidos comenzaron por desgastar a España con una larga guerra en Cuba, una guerra que se alargaba regalando dinero y armas a los adversarios de la presencia de España en Cuba. Mientras subvertía, Washington orquestó una campaña de prensa contra España acusándola de toda clase de crímenes, igual que ahora lo hace con Rusia con el pretexto de la invasión de Ucrania.
Tal como ahora, los Estados Unidos estaban por sufrir una crisis económica terminal durante la última década del siglo XIX, el botín de la victoria contra España les permitió arrastrar aquella crisis de su economía hasta la Primera Guerra Mundial a cuyo estallido, como aliados financieros de Inglaterra, no eran del todo ajenos.
La guerra de Cuba era una finta para el desgaste económico y militar de España, mientras preparaban el ataque contra la posesión española que tenía mayor importancia por sus recursos y su posición estratégica: las islas Filipinas.
Para ubicarse en Filipinas antes de la guerra con España, Washington creó una oposición local. Luego vino un False Flag Attack (ataque preparado para atribuirlo a un falso culpable) en La Habana. Esta vez era una finta sobre un objetivo muy alejado de Manila.
Los ingenuos pensaron que Estados Unidos hizo saltar el Maine en la bahía de La Habana para declararle la guerra a España porque ambicionaba apoderarse de Cuba y Puerto Rico.
Es una interpretación equivocada del objetivo de Washington. El falso atentado frente a La Habana sacrificó a los más de 300 marinos norteamericanos que tripulaban el viejo Maine; apuntaba más lejos. Aunque cometido en La Habana, su objetivo no era la posesión de Cuba y Puerto Rico, algo que no cambiaba en nada los recursos ni la posición estratégica de Estados Unidos.
Al ocupar las Filipinas de Estados Unidos se proyectaron fuera de América en el mapa mundial. La posesión de las Filipinas convirtió a Estados Unidos en una potencia global y en actor político universal.
Había un problema; los filipinos tal como los hispanoamericanos hablaban español, Parecido al inconveniente es que los ucranianos hablan ruso, para pretender que Ucrania existe como país europeo independiente y antagonista de Rusia (Kiev es la cuna de la lengua rusa).
¿Que hizo Washington para erradicar la lengua española en Filipinas? Cerraron todas las escuelas públicas que enseñaban en español y desde entonces en ellas sólo se enseñaba en inglés. Esto creó descontento en algunas regiones de Filipinas, que terminó en rebelión, ). El ejército norteamericano sometió el alzamiento masacrando la población civil de esas regiones, El genocidio es una solución que se repite en la historia militar de Estados Unidos. La represión de la rebelión filipina causó 200 mil muertos civiles. ¿Es que estos hechos recuerdan el Donbass a alguno?
Algo similar habría pasado en esa región si no interviene Rusia con su operación militar especial. También, como ahora con Rusia, entonces se desencadenó una campaña de odio contra todo lo español.
En aquella época fue cuando bajo presión de Washington, los gobiernos de Hispanoamérica adoptaron la Leyenda Negra, como versión oficial de las respectivas históricas nacionales. Hasta entonces la versión de su propia historia de la mayoría hispano-americana era favorable y reconocedora del efecto benéfico sobre la población nativa de la cultura española.
Un lavado cerebral con odio parecido al que ocurre ahora con Rusia con el deseo de eliminar toda huella de las muchas contribuciones rusas a las artes y las ciencias europeas.
En Europa, la cultura española se mantuvo viva y respetada gracias a la admiración que despertaba en Alemania y Rusia, donde se siguieron produciendo muchas obras literarias y musicales inspiradas con temas de raíz española.
La moda actual de cultura Woke por la agenda 20-30,nacida en la globalista norteamericana, es ignorar a autores rusos como Dobstiyevsky, Gorky o Tolstoy en cursos de literatura y de ignorar en los conciertos a músicos como Tchaikovsky, Mussorsky, Rachmaninoff y Shostakovich. La Rusofobia llevó al extremo de cancelar los contratos para conciertos en Alemania a las sopranos rusas, Anna Netrebko y a Aida Garifullina. ¡Ellos se lo pierden!!! ¿Estarán pensando en cancelar la tabla periódica de elementos de Mendeléyev? (en uso desde 1869) para castigar a Vladimir Putin, culpable del crimen máximo: obstaculizar la ejecución de la Agenda Occidental conocida como 20-30.
El proyecto original de Estados Unidos en Ucrania era crear una provocación que empantanarse a Rusia en una larga guerra que agotase sus recursos financieros y militares para antes de iniciar una guerra apropiarse de los inmensos recursos que Rusia tiene en Asia Central, porque sólo con ellos podría, tal vez, Estados Unidos salvar su Dólar del próximo colapso financiero mundial basado en el US dólar.
Desde el 2018, la Ocde en París y el BCIE en Basilea vienen advirtiendo que el sistema financiero colapsa bajo el peso de su deuda sideral (muchos millones de millardos). Colapso terminal como sucede siempre con las estafas financieras del tipo Pirámide Ponzi, que es el esquema básico que sostiene el dólar desde 1971.
Sólo que la Rusia del 2022 no es la España en bancarrota y militarmente obsoleta de la década de 1890 que,además luchaba lejos de su Metrópoli con graves problemas logísticos contra un adversario abastecido de dinero armas y municiones por un vecino cercano que debía cubrir una distancia mínima para abastecer la insurrección.
La situación logística de España para combatir la insurrección fomentada en Cuba le era muy desfavorable; como sucedió a Rusia en la guerra Ruso- japonesa (1905) contra un Japón financiado y equipado contra Rusia por los anglosajones.
En 2022, Rusia desarrolla una operación militar a las puertas de su casa y su victoria no está en duda, porque su economía está sana y las sanciones financieras sólo implican el robo de las divisas que tuvo en bancos extranjeros. Porque desde Boris Yelsin se tuvo la imprudencia de confiar fondos de Rusia a bancos occidentales. En lo que concierne al comercio, Rusia es autosuficiente y las sanciones afectan más a quienes las imponen que a Rusia.
En la guerra hispano-americana, los equipos españoles eran anticuados barcos de madera con ellos era imposible combatir y vencer contando sólo la buena casta y valentía española a la Navy norteamericana equipada con barcos movidos por vapor y flancos acorazados. La batalla de Cervera fue una muestra impecable de quijotismo español
Ese no es en nada el caso de Rusia que goza de una amplia ventaja con la artillería más moderna del mundo capaz de golpear a velocidad hipersónica donde y cuando le convenga.
Si la OTAN insiste en replicar en Ucrania la desgastante estrategia que Washington usó en Cuba durante el prólogo de su guerra contra España, Estados Unidos usó dos en las revueltas de Cuba de guerra de Cuba para, saturar de armas e instructores, como hace ahora la OTAN en Ucrania; actitud que la convierte en parte beligerante. Es probable que esa vanidosa actitud se incremente y escale hasta hacer estallar la Tercera Guerra Mundial.
Conviene que los verdaderos protagonistas lleguen a la mesa de negociaciones globales en las que Rusia y China exigirán el regreso de las tropas de ocupación norteamericanas a su país. Requisito indispensable para el retorno de la libertad de Europa, Japón y Corea.
Para la Paz es indispensable el desalojo de Europa por las tropas de Estados Unidos y su armamento.
La OTAN se equivoca cuando Jens Stolteberg, cultiva la improbable fantasía de una victoria en Ucrania; porque ese sería el punto de partida para la invasión de Rusia hacia Asia Central, para apoderarse de sus inmensos recursos del área Euroasiática.
Para obtener la victoria en Ucrania, la OTAN deberá vencer primero en la Tercera Guerra Mundial que al ser extendida al Asia Central involucraría a China con lo cual la OTAN no tiene alguna posibilidad de vencer.
Al final, El nuevo orden mundial Post-Dólar Mundo se repartirá en esferas de influencia: Europa será la esfera de influencia rusa. El Pacífico y África en zona de influencia China. El Cercano Oriente será una zona de influencia compartida entre Turquía e Irán. Desde la antigüedad la superioridad cultural y militar se definía como imperios. Desde la Segunda Guerra Mundial se les llama "Zonas de influencia".
No parece que los estrategas globalistas de Washington y Bruselas hayan comprendido eso y lo mal que puede terminar el juego que comenzó la Subsecretaria de Estado, Victoria Nuland, repartiendo galletas a los terroristas barricados en Plaza Maidan. En una Tercera guerra mundial la única victoria que puede quedar a Washington sería el nombre de la señora Nuland.
Ucrania no tiene posibilidad de recuperar las regiones que van ocupando las tropas rusas y que Rusia absorberá para evitar que población de sangre rusa, lengua y cultura rusa, vuelva a ser perseguida por esa razón o ser intervenida por extranjeros como rehén. La Federación Rusa la pondrá al seguro expandiendo su frontera hasta cubrir esas regiones que tradicionalmente pertenecen al pueblo ruso: Rusia es la legítima heredera de Bizancio. El título de Zar es una corrupción del título de César al que apelaban todos los emperadores porque era el apellido familiar de Caio Julius Cesar.
Ucrania, para volver a ser un país homogéneo deberá devolver a sus vecinos, Polonia, Hungría y Rumania el espacio del que los despojó después de la victoria soviética en la Segunda Guerra Mundial. Ucrania en realidad ya no es más que el espacio en torno a Kiev en que hablan un dialecto ruso que llaman ucraniano.
Sólo después de una derrota de la OTAN se acabará el globalismo de la casta política de la oligarquía europea para sustituirla con una nueva clase política genuina que defienda el genuino interés político, económico y cultural europeo para devolver a Europa la paz y la soberanía cultural que viene siendo corroída desde 1944.
El mundo emprende un nuevo camino hacia la multipolaridad en el que no hay lugar para la prepotencia de Washington y sus vasallos.
Desde hace 70 años no hay políticas soberanas que busquen satisfacer el interés europeo de paz, concordia y progreso económico. La Europa que mira a Occidente mira hacia la tierra del ocaso y decadencia; quien quiere un futuro europeo mirará hacia oriente, la región donde nace la luz. En oriente surge con la Nueva Ruta de la Seda surge un nuevo modelo de orden económico internacional más equitativo. El rasgo distintivo del orden actual es la concentración de la riqueza en la ínfima minoría multimillonaria que producto de la versión capitalista que rige en Estados Unidos, donde vive la población trabajadora más endeudada del mundo.