Escribo estas líneas con la esperanza de que el mensaje llegue a quienes toman las decisiones en Rusia. La dirigencia rusa sin duda está mejor informada y conoce a los aliados de la OTAN mejor que yo; pero en el Derecho Internacional no existe ese lenguaje amenazador deLineas Rojas ambiguas. Es muy probable que la intención de Biden entregando las bombas racimo a un gobernante como Zelensky, ya culpable de genocidio de civiles disidentes en el Donbass es que laas arroje allí. La mentalidad de LOS Estados Unidos es de torturar ala población civil con bombardeos y sanciones para desacreditar a sus gobernantes. Es una política tradicional anglosajona.Estoy seguro de que tanto Vladimir Putin como Sergei Lavrov saben eso.
Por lo tanto hay que evitar esas muertes de inocentes, culpables de sentirse de la cultura rusa. En mi modesta opinión solo los vasallos de la OTAN pueden frenar al Presidente Biden de cometer ese crimen. Mi idea es que Moscú advierta que la caída de una sola bomba racimo en lo que ellos consideran territorio de la Federación Rusa es visto por Moscú como un Causus Belli, sin las ambigüedades de líneas rojas o amarillas; que no se trata de violaciones del código de circulación. Se trata de muertes inocentes. Cuando se elaboró el derecho internacional moderno no se conocían los semáforos
Se conocía la guerra y con eso ya entramos en Derecho Bélico Moderno que considera las bombas racimo como armas prohibidas, porque a la larga matan muchos más civiles que combatientes; así lo han suscrito la mayoría de los propios aliados de Estados Unidos en la OTAN. Sería un mal inicio publicitario que la OTAN se desordene por tratar de impedir que Estados Unidos use a un payaso loco como intermediario para cometer algo que está catalogado entre los crímenes de guerra por la mayoría de los países aliados. Si eso abre el riesgo avisado de que se desate una guerra que Europa entera pagará con muerte y destrucción. En mi humilde opinión solo esa amenaza devolvería la lucidez a un liderazgo europeo que desde el 2014, en Maidan, parece un buscapleitos ebrio.
Si la cacareada Contraofensiva ucraniana, equipada con el más moderno armamento de la OTAN y dirigida por altos oficiales e inteligencia de la OTAN ha servido para algo fue para mostrar la superioridad militar de Rusia sobre la OTAN. Los comandantes sacrificaron a muchos jóvenes secuestrados en las calles de Ucrania para servir como reclutas en ese infructuoso ataque en que perdieron casi todo el armamento que la OTAN les entregó; todo sin poder llegar siquiera a la primera línea defensiva del ejército ruso. Una advertencia de causus belli si es violada la seguridad de los civiles rusos. Si se viola esa advertencia según el derecho internacional autoriza lo que ya es de facto un estado de guerra entre Rusia y aquel que cometió el Causus Belli. Eso autoriza sin mas un ataque directo y posiblemente demoledor sobre el adversario responsable del hecho que lo deje incapacitado para continuar la guerra.
Después de definido un Causus Belli hasta los políticos más pendencieros se vuelven razonables y respetuosos del derecho ajeno (Benito Juárez dixit ).