El régimen estadounidense está armado hasta los dientes

Las siete bases militares adicionales de EEUU en Colombia elevaron su total planetario a 872. El número "optimo" de grandes fortalezas y guarniciones para una potencia imperialista aspirante a dominar la Tierra se mueve entre 35 y 40. Literalmente el imperialismo yanqui es el dueño del mundo.

Las armas nucleares son las más peligrosas, sólo una puede destruir una ciudad entera, además de potencialmente matar a millones de personas y poner en peligro tanto el medio ambiente como la vida de las generaciones futuras, ya que sus efectos a largo plazo resultan devastadores, únicamente su mera existencia ya supone un riesgo muy alto.

EEUU posee tres tipos de armas de destrucción masiva:

Armas nucleares, armas químicas y armas biológicas.

EEUU es el único país que ha usado armas nucleares en combate. También utilizó armas químicas en la Primera Guerra Mundial, en la Guerra de Vietnam y en la Guerra de Irak. Desarrollo en secreto la bomba atómica durante la década de 1940 bajo el título "Proyecto Manhattan".

EEUU fue pionero tanto en el desarrollo de la bomba de fusión nuclear, así como la de hidrógeno. Fue la primera potencia nuclear y única en el mundo durante varios años. En el año 2010, el Pentágono reveló que el tamaño de su arsenal nuclear posee un total de 5.113 cabezas nucleares.

EEUU es el único país que ha utilizado armas nucleares, ahí están las ciudades japonesas Hiroshima y Nagasaki, bombardeadas sin más ni menos los días 6 y 9 de agosto, respectivamente en el año 1945.

Actualmente dispone de 534 misiles balísticos intercontinentales modelos Minuteman III y Peacekeeper; 432 misiles balísticos de lanzamiento submarino Trident C4 y D5, desplegados en los 17 submarinos clase Ohio y aproximadamente dos centenares de bombarderos nucleares de largo alcance, entre los que se cuentan 16 "invisibles" del tipo B-2.

El total de cabezas nucleares desplegadas podría oscilar, según fuentes, entre 5.000 y 10.000. Del mismo modo ha sufrido debacles, la revista Forbes anunció que "El fracaso del programa de energía nuclear de EEUU constituye el mayor desastre gerencial en la historia de los negocios", que involucra la pérdida de 100.000 millones de dólares malgastados en inversiones antieconómicas y costos superiores a lo previsto.

A pesar del mito que en un primer momento sostenía que los átomos producirían electricidad "demasiado barata para ser medida", la energía nuclear es actualmente la tecnología convencional de generación energética más costosa. Las inversiones en proyectos de generación de energía nuclear representan un costo de oportunidad al impedir que esos capitales se destinen al sector de tecnologías de eficiencia energética y energías renovables, que minimizan con mayor eficacia las emisiones de dióxido de carbono.

Un análisis realizado por el Rocky Mountains Institute, señaló que en EEUU cada dólar invertido en eficiencia energética despiden siete veces más emisiones de dióxido de carbono que un dólar invertido en energía nuclear. Es decir, por cada 100 dólares invertidos en energía nuclear, se emite una tonelada de carbono que se hubiera podido evitar si esos 100 dólares se hubiesen invertido en eficiencia energética.

Los riesgos para la gente y para el medio ambiente que conlleva el funcionamiento de las centrales nucleares son múltiples. Los principales peligros son: la proliferación de armamento nuclear, los residuos nucleares y los riesgos para la seguridad.

"En los próximos 30 años, EEUU planea gastar aproximadamente un billón de dólares para mantener su arsenal actual, comprar sistemas de sustitución y mejorar las bombas y ojivas nucleares existentes", afirmó el informe del Centro de James Martin de Estudios para la No Proliferación.

Es ineludible impedir que se vuelvan a utilizar estas armas, a pesar de que sus consecuencias son catastróficas para la humanidad, tal criminalidad deben llevar a los Estados a la conclusión de que tienen que trabajar de forma urgente y con determinación para lograr la prohibición y la eliminación de estas armas para siempre.

La lucha por la paz y la integridad de nuestros pueblos está en una disyuntiva, entre la vida o la muerte, ante la creciente ofensiva militarista yanqui.

 



Esta nota ha sido leída aproximadamente 1435 veces.



Alberto Vargas

Abogado y periodista, egresado de la UCV, con posgrado en Derecho Tributario y Derecho Penal. Profesor universitario en la cátedra de Derechos Humanos

 albertovargas30@gmail.com

Visite el perfil de Alberto Vargas para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes: