1. La unidad de los árabes contra los gobiernos asesinos de Israel, con el objetivo de desaparecerlos y transformar a esa nación en respetuosa de la región, es extremadamente difícil porque los multimillonarios –los jeques árabes- mantienen grandes negocios con un poderoso sector de los mismos yanquis e Israel. Los pueblos de Palestina han sufrido miles de bombardeos, desde que en 1948 se instaló Israel, por defender sus territorios "ocupados"; sin embargo, a pesar de que los árabes cuentan con avanzadas defensores, como el Al Fatah del viejo Arafat, Hamás, Hezbolá, Fedayines, los árabes no se lanzan en masa para aniquilar a los gobiernos israelitas. Son más de siete décadas sufriendo amenazas y nada de rebelión contra los opresores. ¿Algún parecido a México?
2. Por ello la pregunta que hizo hace 500 años el filósofo De la Botié: ¿Por qué los pueblos -siendo el 95 por ciento de los que trabajan, los explotados y miserables- no se sublevan contra los pocos, el 3% que los someten? Cuando en 1960 nací en la política marxista creí que en esa década vendría la liberación total: había triunfado la revolución cubana, había ocho guerrillas en países de América, hubo rebelión juvenil en las escuelas, liberación femenina, se incrementó la música de Rock, apareció el sexo y la droga con mucha libertad, los hijos confrontaron a sus padres autoritarios, la teología de la liberación y Juan XXIII. Nosotros nos manifestamos contra los gobiernos, los partidos, lo electoral y sólo pensábamos en cómo hacer una revolución a partir del movimiento de masas en las calles.
3. Aprendimos que los yanquis (los asesinos que dominan en los EEUU), los que por su dinero se consideraban los amos del mundo, al terminar la II Guerra Mundial, amenazaron con estallidos de bombas, como en Hiroshima y Nagazaki, en caso de no obedecer. Todos los países se sentían amenazados; sus gobiernos se hicieron obedientes a cualquier indicador yanqui. Vimos desde 1960 decenas de invasiones yanquis, golpes de Estado militares impulsados por ellos, así como gigantescos saqueos de las economías de los países. Pero también conocimos sus apoyos o aliados internacionales: Israel, Inglaterra, Saudiarabia, la misma ONU, OTAN, la OEA (construida por ellos). No preguntábamos: ¿Cómo destruir a los yanquis poseedores de todas las armas atómicas y ejércitos poderosos?
4. Pues nunca hemos podido rebelarnos en serio contra yanquis e israelís porque ellos tienen todo el poder material: armas, ejércitos. medios de información y nos impusieron definitivamente la ideología de sumisión. Su dogma más grande ha sido: el dinero manda y quien lo tiene se impone sobre todos. Nosotros nos quedamos con los ideales de liberación que durante décadas han sido aplastados. ¿Seguiremos jugando a lo electoral, al pacifismo, a los partidos políticos, mientras los poderosos siguen acumulando más fuerza y nosotros más debilitamiento y cobardía? El ideal socialista e igualitario no se derrumbó sólo, estuvo fuera de tiempo; fue aplastado por el imperio y sus aliados y no ha dado muestra de querer levantarse. Es el tiempo que nos tocó vivir y luchar ´por causas perdidas.
