Nunca las FARC dijeron que Emmanuel estaba con su mamá en la selva. Dijeron que lo entregarían junto con Clarita y Consuelo y, a todas luces, así habría sido si no hubiera sido porque el gobierno interceptó las comunicaciones que le dieron las huellas para encontrar al niño y que, sin esperar el tiempo suficiente para ver si entregarían a Clara y Consuelo, lanzaron una bomba para ganar esa partida de ajedrez que se juega a nivel de poderosos, cuando los rehenes sólo son peones en el tablero.
También es cierto que el gobierno tenía rodeada a la guerrilla mientras se desarrollaba el acuerdo humanitario, como lo señaló un comunicado oficial de la “Oficina de Prensa Cuarta División” del Ejército, expedido el “miércoles 19 de diciembre de 2007”, donde se lee: “En desarrollo de la operación ´Emanuel´, tropas del Batallón de infantería No 44 ´Ramón Nonato Pérez´ de la Decimosexta Brigada en la vereda Sardinata del municipio de Vistahermosa, Meta (sur oriente), sostuvieron contacto armado contra integrantes de la cuadrilla 27 de las Farc, dando como resultado la muerte en combate de un presunto integrante de dicha organización a quien se le incautó un fusil AK-47”.
Es bien curioso que, antes de que se iniciara la operación humanitaria a la que Chávez llamó "Operación Emmanuel", el ejército hubiera adelantado una operación con el mismo nombre...
Por lo tanto, no fue el hecho de "no tener al niño", como dijo Uribe, que no hubieran entregado a Clara y Consuelo, puesto que la realidad es que el niño estaba en el Instituto de Bienestar Familiar y ellos creyeron que se lo devolverían a quien se hizo pasar a último minuto como padre del niño que él mismo había dejado en el hospital en San Vicente del Guaviare.
Constatar que las FARC no mintieron es un alivo para saber que tampoco están mintiendo cuando dicen que entregarán a Clarita y a Consuelo. Esto no los disculpa en NADA, porque secuestrar a un ser humano es un crímen sin justificación y es claro que, en lugar de haberle entregado el niño al cuidado de "personas honradas mientras se firmaba el acuerdo humanitario", como lo dice su comunicado de ayer, deberían habérselo entregado a doña Clara de Rojas desde 2005, lo cual habría sido PLENAMENTE POSIBLE.
Pero, reitero, que la esperanza está presente porque las FARC, en realidad de verdad, no mintieron y saber que Emmanuel estará pronto en manos de esa excepcional mujer que es Clara González de Rojas nos hace renacer la esperanza.
Gloria Gaitán
Enero 5 de 2008