La recién culminada VII Cumbre Extraordinaria de los Miembros de la Alternativa Bolivariana para las Américas, ALBA-TCP constituyó una de las reuniones más trascendentes de cuantas ha realizado este mecanismo de cooperación solidario y de integración de los pueblos de América Latina y el Caribe, al consolidar su unidad soberanista y antimperialista, frente a las diversas maniobras que se promueven en su entorno y desde, las esferas del gobierno norteamericano, para dividirla y debilitarla.
Este proyecto político, iniciado por el comandante Hugo Chávez Frías, inspirado en la visión del Libertador Simón Bolívar, y al cual acompañó el comandante Fidel Castro Ruz, ha permitido en sus pocos años de vida, galvanizar la voluntad política del antiguo y nuevos liderazgos de la revolución latinoamericana y caribeña, en el propósito de enfrentar las perversidades del capitalismo, apelando a la solidaridad entre los pueblos para resolver los problemas sociales y desarrollar sus economías.
Mientras los centros principales del capitalismo imperialista, en su estado globalizado de crisis estructural, hacen recaer sobre sus trabajadores y trabajadoras, el peso fundamental de la solución de su crisis; en el espacio ALBA, los gobiernos progresistas y revolucionarios que lo integran, han dirigido tales recursos en favor de garantizar la estabilidad en los empleos, en fortalecer la economía social y garantizar el suministro permanente y eficiente de los servicios públicos y los apoyos a los sectores sociales en situación de pobreza.
Así mismo, contrario a la política internacional de solidaridad y cooperación de ALBA, las viejas estructuras pos-coloniales del planeta, como la Comunidad Británica de Naciones y el Pacto (francés) de Lomé, se muestran insolidarias con las antiguas posesiones coloniales, abandonándolas a su suerte, cuando hoy, más que nunca, necesitan de la cooperación para enfrentar las difíciles condiciones creadas, precisamente, por la crisis del capitalismo imperialista, en su fase global, de la cual esas potencias forman parte.
En estas especiales circunstancias históricas, el gobierno del Primer Ministro de San Vicente y Las Granadinas, doctor Ralph E. Gonsalves, anunció en esta VII Cumbre de Jefes de Estado y de gobiernos de ALBA, realizada los días 16 y 17 de abril en Cumaná, Venezuela, el ingreso de ese país al mecanismo de cooperación e integración de ALBA-TCP, uniéndose a la Federación de Dominica que ya que se había incorporado en el año 2007.
Esta ampliación de ALBA en el Área del Caribe Oriental, con Dominica y San Vicente y Las Granadinas, fortalece la acertada política de solidaridad, cooperación e integración que vienen desarrollando el gobierno bolivariano del comandante Hugo Chávez Frías y los otros países de ALBA, con vista a construir en Nuestra América, un proyecto integracionista que, respetando los desarrollos histórico concretos, las particularidades culturales y sociales y, las asimetrías económicas de cada país, pueda unificar la voluntad de nuestros pueblos en la construcción de un espacio común de desarrollo, progreso y bienestar para toda Nuestra América.
La presencia de San Vicente y Las Granaditas y su líder, el dirigente laborista Ralph E,.Gonsalves abre, al interior de la CARICOM y la Organización de Estados del Caribe Oriental, OECO, un necesario y conveniente debate entre sus miembros, acerca de la conveniencia de desarrollar y profundizar un proceso de integración de estos bloques económicos y políticos caribeños con el espacio ALBA, con vista a armonizar y complementar sus políticas económicas, comerciales y arancelarias que favorezcan, en el corto plazo, la resistencia a los efectos perversos de la crisis del capitalismo global y, a largo plazo, el acceso a nuevos mercados y fuentes financieras ampliadas para estas economías, históricamente supeditadas a las metrópolis. La Patria es América!
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