El 20 de julio de 1969 se dio la gran mentira de los Estados Unidos para el mundo entero, ese día se le mintió a todo el planeta con descaro al montar tremendo teatro en la obra “El hombre en la luna”, hoy 40 años después de esa obra teatral el mundo se pregunta ¿Cuántas serán las mentiras que nos habrá metido los EE.UU? Se que no es la única, el ataque a las Torres Gemelas por parte de Osama Bin Laden es otra gran mentira en otro gobierno republicano al igual que en el año 1969 del otrora presidente Richard Nixon.
El descaro que los republicano tienen es muy superior al de los demócratas, pero ambos tiene el valor para hacer actos que el mundo le costaría creer irreal, es tal su actitud de “cara dura” que jamás se pensarían que son capaces de mentir sobre algo tan serio como ese acto de valor y tecnología aeronáutica, o el de poder pensar que sea el propio gobierno de los Estados Unidos el que tumbara las Torres Gemelas para justificar el ataque e invasión a cualquier país y régimen del mundo, hechos como Pearl Harbor, o el asesinato del presidente John F. Kennedy, el suicidio de la actriz Marilyn Monroe y otros eventos trágicos que marcaron esa nación están en tela de juicio si ocurrieron tal como lo han contado sus autoridades y líderes.
Ahora los gobiernos republicanos y demócratas no están solos en esas tramas teatrales, las grandes corporaciones mediáticas forman parte del elenco teatral mentiroso, sin ellas no se podrían llevar con éxito la obra que montan, la cobertura y las matrices mediáticas son fundamentales para el convencimiento de la opinión pública mundial, es por eso que los medios de comunicación son el arma de IV Generación de los Estados Unidos de Norteamérica.
El Apolo 11 nunca llegó a la Luna, Neil Amstrong jamás pisó tierra lunar, solo fue una burda obra bien hecha para la época y muy mal hecha para la actual, el objetivo era uno solo, caerle adelante a los rusos y hacerle creer a sus conciudadanos y al mundo entero que ellos eran superiores tecnológica y por consiguiente militarmente, dos años después de su histórico seudo viaje, en agosto de 1971, Armstrong dejo la NASA y decidió ser maestro. Pero la verdad saldrá así sea 40 años más adelante, el mundo sabrá que los Estados Unidos es un farsante sin pudor, que miente para justificar su proceder asesino e invasor como el impero más genocida que haya conocido la humanidad, la justicia divina y terrenal llegará más temprano que tarde y la obra será develada como una farsa del imperio norteamericano.
Por eso digo…
¡Patria, socialismo o muerte!
¡Venceremos!
20 de julio de 2009
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