En Latinoamérica son pocos los gobiernos de derecha que quedan y esa es una de las dos razones por la cual el imperio norteamericano ataca, promueve, financia ONGs desestabilizadoras e instala bases militares y aprueba golpes de Estado militares y civiles contra gobiernos progresistas de la región.
En Latinoamérica son estos, Colombia, Perú, Panamá y Costa Rica, existen otros que no son, o aparentar no ser sus Presidentes o Presidentas, pero sus Congresos son de corriente derechista y dominan más o menos el ritmo político de países como Chile, Uruguay, Brasil y Argentina. Pero la mascara de hipócritas de estos “4 seudo demócratas y seguros fascistas gobernantes”, Álvaro Uribe, Alan García, Ricardo Martinelli, y Óscar Arias y, otros gobiernantes pero del norte como son Canadá y Méjico, se está viendo en el apoyo discreto de algunos y otros más descarado para con el golpista de Roberto Micheletti, gobiernos o más bien presidentes como Álvaro Uribe, el novel ultraderechista presidente de Panamá Ricardo Martinelli, y el títere del premio Nóbel de Paz de Costa Rica Óscar Arias, los dos primeros se reúnen con un “seudo Canciller” de facto y el otro con funcionarios del régimen de facto y golpistas de Honduras, ese apoyo moral e ilegal que esos dos Presidentes le dieron con esa reunión y el tercero so pretexto del “Acuerdo de San José” tratando de dar tiempo y justificación al régimen de facto y con eso enfriar las calles de Honduras y darle un maquillaje mediático de legal al régimen de facto del golpista de Roberto Micheletti y su pandilla, es toda una campaña y estrategia mediática diseñada por el Departamento de Estado, “Doña Hillary Clinton” y expertos en psicología, mercadeo y publicidad golpista que tratan de poner al “malo como el bueno y al bueno como el malo”, o sea Don Goriletti es el bueno y el Presidente constitucional de la República de Honduras, el señor Manuel Zelaya es el malo, ¡el mundo al revés!
Pero el caso es que son 4 lacayos del imperio del Águila Real que no podrán pasarle por encima a los pueblos de Centro, Latinoamérica y del Sur, ellos con todo el poder militar, económico, eclesiástico, diplomático y mediático que reciben del Departamento de Estado de los EE.UU, del Pentágono, de la CIA y hasta del Vaticano no podrán torcer el rumbo hacia la derecha, el camino de los pueblos va hacia la izquierda, el rumbo es hacia el Socialismo, no al capitalismo, es hacia la Justicia Social que tanto la derecha americana como europea le ha negado por siglos al pueblo de Latinoamérica, ni el Papa, ni el Águila Real, ni los Halcones ultraderechista que dominan el Poder Oculto en los EE.UU, ni las grandes corporaciones medios de comunicación que tienen montada la guerra de IV Generación contra esos gobierno progresistas como son Nicaragua, Ecuador, Bolivia, Cuba, Honduras, El Salvador, Paraguay, Argentina, Brasil y Venezuela, jamás podrán derrotar el despertar de los pueblos oprimidos por la derecha y la ultraderecha del continente americano y europeo, el golpe fascista, militar y mediático que le dieron a la democracia hondureña al derrocar por medio de las armas de la República de Honduras al presidente Manuel Zelaya es el más grave error que la derecha cometió, ellos no saben que con ese acto fascista despertaron del letargo al pueblo hondureño y a todo el pueblo latinoamericano, ni con las armas y sus medios de comunicación palangristas podrán vencer al pueblo que lucha por su justicia, dignidad y derecho de vivir como seres humanos iguales a los “señores ricos” de ese país y del continente, o sea con una buena educación, salud, alimentación, vivienda, trabajo y paz.
Por eso digo….
¡Patria, socialismo o muerte!
¡Venceremos!
23 de julio de 2009
(*) Comunicador Alternativo Socialista Comunitario
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