Sin pretender presumir de analistas o comunicólogos nos atrevemos a sugerir un cambio radical en la política informativa del Canal 8 principal bastión comunicacional del Estado Venezolano. Es decir sacarlo de esa línea de mera propaganda y darle más profundidad comunicacional, mejorando el enfoque noticioso, de tal forma que saltemos de la propaganda a la información que pueda competir con los espacios de los medios privados, donde se manipula y se desinforma, pero con técnicas muy efectivas para llegar y convencer al público televidente.
Esos” avances noticiosos” quilométricos con entrevistas extensas y tediosas o coberturas excesivas a actividades del PSUV o de cualquier otro aspecto oficial, así como repetir una misma noticia a lo largo de una semana, con las mismas tomas y los mismos actores, lejos de ganar audiencia y penetrar en el sector popular, produce saturación y sabido es en el ámbito comunicacional, que la saturación produce rechazo y por eso gente del pueblo afecta al proceso se va a los canales privados que les llenan la cabeza de basura, pero bien dirigida y técnicamente bien elaborada.
Nos preguntamos ¿Por qué el canal 8 no puede competir con dramáticos, si hubo un amago, con “Amores de barrio adentro”?. Igualmente hubo la promoción de un espacio humorístico y murió al nacer. ¿Será que en nuestro canal no hay capacidad para producir buenos musicales? ¿Qué pasó con el espacio criollo del compatriota Musett? ¿Por qué no buscar especialistas que estructuren una programación atractiva con buenos contenidos capaz de competir con los canales privados y de esa manera traer a nuestra gente a su canal natural? ¿Hasta cuando nos vamos a dejar arropar con bodrios miameras como los Grammy? ¿Es que acaso no tenemos capacidad para proyectar nuestros valores culturales, con atractivos formatos?
Además seria bueno hacer alianzas estratégicas en este campo con los países del alba para mejorar y afianzar más a Telesur como vocera de la emancipación suramericana y caribeña y producir programaciones en conjunto, de índole cultural y educativos con valores socialistas, que nos liberen de los Grammys, como gran cosota y pongan en su justo lugar los verdaderos valores culturales de nuestra América y el Caribe, para fortalecer y consolidar el socialismo indoamericano y de esta manera crear mecanismos que cierren las grietas de la revolución.
(*) Periodista
CNP 2414 cd2620@gmail.com