Hemos visto por ejemplo como la TV contrarrevolucionaria, en todas las noticias relacionadas con Libia, utiliza el audio y los textos originados por agencias internacionales y periodistas lacayos, asocian la imagen del Presidente Hugo Chávez con Muammar al-Gaddafi con el objetivo de causar daño mediático colateral.
Los medios contrarrevolucionarios nacionales e internacionales han arreciado las operaciones psicológicas, han montado la matriz sobre la violencia, muerte e inseguridad.
La estrategia de la oposición consiste en utilizar la superioridad mediática e intoxicar la población con todo tipo de mentiras, medias verdades y noticias catastróficas para dar la sensación de ingobernabilidad y caos; obligando a la Revolución, al Gobierno, a “perder” tiempo y esfuerzo en una comunicación defensiva.
La crisis del capitalismo, la ofensiva imperialista y sus aliados europeos presionan sobre los medios lacayos y traidores en Venezuela, buscando atajos que den al traste con la Revolución y evitar el plan B: las elecciones de 2012.
Creo que el MinCI y el Sistema Nacional de Medios Públicos, comunicadores populares y alternativos deben replantearse una estrategia que profundice, reestructure (contenidos, programación, etc.) y adecúe nuestros medios para dar un salto cuantitativo y cualitativo para la ofensiva comunicacional.
Nota: Artículo publicado por el autor en el diario “Correo del Orinoco” en la columna: La canalla mediática, viernes 02 septiembre 2011
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