Si algún canal de TV ha realizado una magnifica labor de envenenar y desquiciar a parte de la población venezolana ha sido Globovison. Es un mérito que no se le puede quitar y menos por una falsa acusación de saboteo a una cadena presidencial. Ellos son los primeros guardianes para que estas cadenas lleguen completas a la población de manera tal, de utilizar fragmentariamente las imágenes y contenidos que allí se producen, a fin de elaborar información, que luego de ser procesadas convierten en videos que envían a través de YouTube e ingresarlas a la red de internet.
Quisiera informar a través de este medio, a cualquier organismo que intente demandar a Globovision, o colocarle una multa, que este canal ha logrado que el 40% de la población venezolana ODIE visceralmente al Presidente Chávez y que se subscriban a las empresas que prestan servicios privados de TV, de manera tal que cuando el presidente se encadena, automáticamente pasan a ver las novelas de Telemundo o CNN y no hay forma de hacer que ese sector poblacional pueda ver los canales nacionales obligados a encadenarse.
Las pocas personas disociadas que no tienen canales de TV privados, lo que hacen cuando aparece la cara del presidente es apagar la TV y aprovechar ese tiempo para leer el Nacional o el Universal. Así que señor Presidente de Conatel, no pierda su tiempo tratando de averiguar si hubo o no saboteo a la cadena presidencial, ésta se realiza en forma individual en cada hogar escuálido que sencillamente cambia de canal o apaga su televisor.
Cualquier intento de actuar contra Globovision, bautizado por sectores poblacionales como “Globoterror”, encontrará de frente a ese sector escuálido envenenado, desquiciado y disociado que saldrá a las calles a vociferar que se están violando sus derechos de ser informados verazmente y se está intentando vulnerar el sagrado derecho a la libertad de expresión. Por eso el gobierno debe permanecer quieto, no debe tocar ni con el pétalo de una rosa a ese canal de TV o le caerán todas fuerzas del imperio y las SIP y la CDCH y si persiste, recibirán las visitas aéreas de los “drones” que desde Miami nos enviaran de regalo navideño.
Así que señores de CONATEL, ya el mal esta hecho, el muchacho ya no tiene corrección. Déjenlo que termine de envejecer por los vicios adquiridos y de forma prematura seguro morirá de muerte natural.
No intente CONATEL sabotear las navidades de las familias escuálidas que se quedan en el país, pues la gran mayoría han copado los vuelos aéreos hacia el exterior y que tranquilamente esperan saborear en sana paz los perniles que seguramente adquirirán en los MERCALES del Estado.