La campaña institucional sobre los 20 años de trabajo mediático ininterrumpidos de Globovisión, pareciera basada en la película: Días de ira, un film protagonizado por Jamie Foxx y Gerard Butler, en la que se describe la arrechera y el deseo de Clyde Shelton -Butler- de derrumbar el sistema judicial estadounidense, tras el asesinato de su esposa e hija por dos delincuentes, quienes no purgaron pena por fisuras jurídicas y la impotencia de Nick Rice -Foxx- fiscal que lleva el caso, afrodescendiente, quien torpemente defiende a un hombre blanco. Globovisión utiliza todos los artilugios propagandísticos para presentarse ante el usuario y usuaria, como una alternativa “para estar bien informado”, quien considere que ese canal es chavista, porque haya pasado a manos de empresarios como: Raúl Gorrín, Gustavo Perdomo y Juan Domingo Cordero, sujetos que invirtieron para percibir una plusvalía, está equivocado. La comparación con la película antes mencionada, obedece a la línea editorial de la empresa y a la forma como muestran las notas periodísticas oficial, hecho que se asemeja a un enfrentamiento entre trabajadores, proveedores -publicistas- y dueños; a pesar de la venta de Globovisión -globoterror- aún preserva el odio racial, el sexismo, la xenofobia, los valores antivenezolanos y proyanki. Como dice el refrán: “por más que te tongonees, siempre se te ve el bojote”. Son 20 años de desinformación, de amargura y de repulsión a todo que huela a bolivarianismo, a patria venezolana, a chavismo. El rechazo que sentía Clyde Shelton por la “justicia” y el sistema dominante y la repugnancia de Nick Rice por las acciones terroristas del otro, es el mismo sentimiento que se vive y se respira en los pasillos de Globovisión y en toda la planta, por más maquillaje que utilicen, por más tecnología o equipos que tengan, es increíble.
Más allá de su slogan: “Información responsable y veraz”, hay que preguntarles, responsable ante quién, ante ellos, ante la patria, ante la historia, ¿ante quién? Veraz, este concepto lo comparten en sinónimos como: probable, factible, posible o rajatabla es una muletilla para decir que: “habría sido encontrado”, “habría llegado a tempranas horas”, “habría...”. Hoy, al igual que antes, Globovisión es la misma basura de hace 20 años, me disculpan los trabajadores y trabajadoras de los diferentes departamentos, quienes en verdad sienten compromiso y respeto por el periodismo y laboran de manera honesta para hacer de la comunicación social, una herramienta para el buen vivir y no para especular, para exacerbar los odios sociales o para repetir mil veces una mentira, al estilo Joseph Goebbels.
No quiero despedirme si tocar el tema del Festival Suena Caracas -actividad llena de alegría, optimismo y amor patrio- debido a la cantidad de tonterías que los escuálidos o señores amargados, como diría Diosdado Cabello, han dicho por los medios de comunicación privado y sus redes sociales; el punto es que Chino y Nacho, quienes debieron presentarse en el festival, pero por desprecio ha cierto público dijeron que no; por lo que hicieron lo propio en el “anfiteatro” del CC Sambil y cantaron: Bla, bla, bla, canción que impusieron junto al actual ministro del poder popular para el Deporte y Juventud: Potro Álvarez, la gente pidió que la repitieran y saben ¿por qué?, porque entre público habían chavistas, así mismo, chavistas.