¿Qué sucede con la Tv Venezolana?

Esta semana se ha generado una fuerte polémica en este portal y en las redes sociales, debido a la aparición de Diosa Canales en Tves, inmediatamente los comentarios han sido en pro y en contra de la producción del canal dos y las comparaciones con la extinta RCTV no se han hecho esperar, sobretodo porque sus dos principales directivos, Winston Vallenilla y Roberto Messutti formaron filas del canal de Quinta Crespo.

En lo personal creo que el objetivo principal que se hace un presidente de un canal es que su canal lo vean, de que sirve tener en la parrilla algunos programas atractivos y la gente no los vea porque no se difunden correctamente o por otros factores, en este caso político.

Algunos dicen que el canal debe ser enfocado en la vida venezolana, en el socialismo pero cuando se colocan estos tipos de programas los críticos no los ven, así de simple, en cambio cuando se capitaliza la pantalla sus números aumentan instantáneamente, para ver una programación teledirigida a una audiencia que pide cambios de programas a gritos pero que los productores venezolanos no terminan de dar con ellos.

En la actualidad más del 80% de la población venezolana cuenta en sus hogares con televisión por subscripción, desconozco sinceramente si es uno de los primeros países del mundo en el cual la mayor parte de sus habitantes tienen acceso a este tipo de servicios, pero en el país varios fueron los motivos por el cual la mayoría optó por pagar una mensualidad para ver decenas de canales extranjeros.

Algunos dirán las cadenas del Comandante Eterno Hugo Chávez fue un factor, posiblemente, viendo que la población opositora tiene acceso a este servicio, muchos del chavismo tampoco veían al presidente en todas sus largas alocuciones y otros porque simplemente no le gustaba, cuestión que puede ser respetada en cada quien.

Otro de los motivos, para mi el principal de todo es la mala programación que ofrecen los canales, además que en muchas de nuestras entidades apenas se ven cuatro señales televisivas y de baja calidad en la pantalla, porque acá no podemos culpar a Chávez ni ahora a Maduro, ni tampoco los ex mandatarios anteriores que la televisión no produjera buenos programas sino enlatados y otros que dejan mucho que desear, acá no podemos culpar al Jefe de Estado ninguno nunca ha encadenado las 24 horas al día los 7 días de la semana.

En mi hogar por ejemplo vemos muchos los programas de un famoso repostero estadounidense que hace unas tortas espectaculares, otros que habla de artículos históricos desde su tienda de antigüedades, aunque muy capitalista porque al final la idea es comprar y vender pero uno termina conociendo algo de historia, otros programas relacionados a la mecánica de los vehículos, del universo, de animales, entre otros.

Ahora, ¿qué pasa con la televisión nacional que no termina de actualizar su pantalla?, es fácil para unos medios transmitir El Chavo, el Chapulín Colorado, El Zorro, cuyos elencos en su mayoría han dejado este mundo desde hace años, que invertir en nuevos programas que cultiven el valor, el respeto, el trabajo, el estudio entre otros aspectos al televidente.

Será que es más fácil colocar mujeres enseñando lo que Dios le dio aunque luego veamos en los noticieros lamentables informaciones sobre mujeres violadas o otros programas amarillistas hablando de adolescentes menores de edad embarazadas, en el cual culpan a la sociedad y ocultar sus culpabilidad, pero a nadie se le ocurre hacer una serie diferente sino una de jóvenes buscando parejas en los colegios que nunca vemos escenas estudiando una clase, que el tema sea realmente la clase sino de conversaciones frívolas.

Nunca vemos que hagan tomas en una biblioteca, pero cuantas vemos en hoteles cinco estrellas o en bares, muchísimas.

En serio los gerentes de programación de muchos canales creen que pasar una película de violencia siempre da mejores números que una romántica o de comedias, o programas que sean digeribles desde las tomas de la cámara, hasta los diálogos a través de los libretos, creo que si piensan eso, aunque la realidad muchas personas ven por “cable” otros tipos de programas.

Algunos dirán que en los canales del Estado los programas son aburridos, muy noticiosos, muy revolucionarios, pero que tienen pocas audiencia, sin embargo Tves está haciendo una programación diferente y es criticado y hasta la llaman la nueva Rctv, pero ganando sintonía todas las mañana.

Nadie ve un programa de ideología o un talk show si es aburrido o mal producido, la gente enciende el televisión buscando entretenerse y quienes trabajamos en televisión deberíamos entender eso, a veces escucho a colegas criticar que deberían pasar programas ideológicos, lo peor es que algunos canales lo hacen y no los ven, simplemente porque son malos o no son orientados al público adecuado, inclusive hay medios que prácticamente son desconocidos precisamente por eso.

Los programas de concursos, de conocimientos, dramas en base a la vida real pero que dejen mensajes positivos, de la vida práctica, de musicales sobretodo de aquellos artistas consagrados, de deportes donde hayan venezolanos, de cocina, donde se hable de sexo u otros tabúes, y los que son enfocados a cierto tipos de personas siempre tendrán audiencia en cualquier canal.

En cambio los de religión, los de ideologías si no son enfocados bien o su producción es mala, los programas de hace décadas, las malas comiquitas sobretodo las de ahora, las novelas que el trama es el de siempre, un detalle en base a la cenicienta o al Conde de Montecristo, es decir la o el pobre ignorante que de la noche a la mañana se vuelve aristócrata e intelectual, o del protagonista que es maltratado y con el tiempo se venga, que al final nada útil en la vida deja al televidente, terminan siendo espacios con pocas sintonía y de seguro cambiarán al cable donde encontrarán más variedad.

 

*Periodista, caraqueño y revolucionario.


miltinhoochoa4@gmail.com



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Miltinho Ochoa


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