¿Se acuerdan la primera vez que vieron una imagen pornográfica, o algo similar?
Era desconcertante, ¿verdad?
Yo sí me acuerdo, fue en un campo de pasto largo y arbustos, cuando iba caminando hacia el gran rió St-Laurent en Canadá para ir a pescar, y entre los arbustos vi una pagina de una revista pornográfica, y casi me vomité, me impresionó muchísimo.
Creo que tenía ocho años.
Bueno, hoy en día, a causa del internet, me imagino que a los jóvenes no les impresiona gran cosa, pero todavía hay cosas que a mí me impresionan, o que me espantan, pero en este caso, relacionado con la televisión.
Las únicas veces que he escuchado y/o he visto televisión de manera más o menos atenta, han sido en los hoteles, y ahora, desde hace alrededor de un mes, aquí en mi taller, donde alguien me dejó un televisor conectado a un servicio de televisión por cable.
Desde entonces tengo la televisión prendida todo el día, y parte de la noche, o a veces toda la noche, para escucharla (casi no la miro) mientras hago otras cosas que considero más productivas … como escribir o inventar palíndromos, por ejemplo.
Un palíndromo es una palabra o una serie de palabras que se leen igual de frente y al revés, como por ejemplo …
Digamos que un guardia carcelario responsable por la distribución de la comida a las celdas le preguntara a una prisionera (femenina) si ella quiere comer un tal tipo de cereal (grano), podría preguntarle:
“¿Arroz, zorra?”
”Arroz, Zorra,” se lee igual en ambas direcciones.
Otro ejemplo de un palíndromo es uno que inventé para un cuñado, siendo él un fanático del béisbol de los Navegantes del Magallanes, para que lo utilice como consigna durante un encuentro contra los Leones del Caracas, donde gritaría,
“¡Sacar a Caracas!”
“¡Sacar a Caracas!”
”¡Sacar a Caracas!”
Bueno, pasar tiempo inventando palíndromos es un muy buen ejercicio mental para cualquier persona, y mucho más productivo para la salud mental en general que sentarse a ver programas prefabricados en televisión.
Otros ejemplos de palíndromos que recién se me ocurren:
- severo revés (¿calamidad?)
- ojo rojo (¿síndrome de un ratón?)
- luz azul (¿un fenómeno paranormal?)
- a, no, mi mamá ama mi mona (respuesta a “¿tu madre odia tu mascota?”)
Entonces, después de un mes de escuchar la televisión, y verla de vez en cuando, me di cuenta que por lo menos 90% de la programación (mi estimación), incluso las comiquitas, y comedias, los documentales, las telenovelas, las películas de drama, “acción,” aventura, y ciencia ficción, las series de televisión para jovenes, y las propagandas contienen por lo menos uno o varios de los siguientes elementos:
1- Violencia contra el más débil o contra algún enemigo inventado
2- Violencia contra, y el desprecio de la mujer en general
3- Machismo
4- Licor
5- Cigarrillos
6- Drogas ilícitas y medicamentos
7- Juego (apuestas)
8- Atracos, robos, secuestros, extorsión, y asesinatos
9- Tortura y descuartizamientos
10- Psicópatas (sádicos)
11- Mucha piel blanca, ojos azules, y cabello rubio (alzando al “blanco”)
13- Racismo, maltrato y vilipendio de no-blancos (rebajando al no-blanco)
14- Dinero, diamantes, y otras cosas “preciosas”
15- Reyes y reinas y príncipes, como si fueran dioses
16- Casas, carros, y lugares de gran lujo, como si fuera una meta alcanzarlos
17- El Dios del occidente
18- La bandera de EEUU y otros emblemas, como la estatua de la libertad
19- Los gringos siempre son los héroes
Si analizan con cuidado la lista arriba, se darán cuenta que la mayor parte, si no toda la lista, está compuesta de nociones muy negativas, destructivas, y colonizadoras, racistas, machistas, y de superioridad del norte, pero donde también, en general, se glorifican estas cosas y a los protagonistas que las practican en las películas, como si fueran héroes.
Por ejemplo, aquellos actores que infligen la violencia, aunque sea falsa o que sea en contra de un inocente o un enemigo --- eso parece no importar hoy en día --- son representados como miembros de las mafias o de cuerpos policiales, o del ejercito gringo, etc., pero como si fueran súper humanos, fuertes, grandes, inteligentes, hábiles, listos, y aun como sabios (ejemplo: Chuck Norris o Charles Bronson), salvando al mundo, aun si ellos mismos practican abiertamente la violencia, la tortura, el asesinato, la extorsión, el robo, y otras cosas muy feas y muy malas.
Entre otras cosas, esto manda el mensaje subliminal, especialmente a nuestros jóvenes, que la violencia y la tortura es justificada en ciertos casos.
Después vienen los “malos” imaginarios como Chucky, Freddy, y Jason, pero que también son presentados como si fueran súper fuertes, y muy inteligentes, ágiles, hábiles, grandes, poderosos, fantásticos, etc.
Y finalmente vienen los salvadores, como Superman, o Spiderman, y otras comiquitas, pero que también utilizan la violencia como instrumento “del bien.”
Bueno, todo eso me espanta …
No me espantan las cosas que veo o escucho en la televisión porque he visto en carne propia cuerpos descuartizados y podridos, he olido la muerte de primera mano, he probado y olido la sangre mientras que chorreaba alrededor mío, he vivido la guerra en el Medio Oriente, he sido violentamente secuestrado, y atacado a mano armada, con machetes, cuchillos, pistolas y ametralladoras, he estado cerca de la muerte por lo menos 6 veces, muy cerca, y he conocido la cárcel, las calles, las drogas, el suicidio, y el hambre, y no encuentro nada excitante o “entretenido” en esas cosas, más bien, son cosas muy traumáticas.
Esas cosas para mí no son “entretenimiento,” ni me espantan, porque las conozco íntimamente.
Lo que me espanta es que tanta gente, la gran mayoría, se deja llevar por lo que ven en televisión como si fuera simplemente una diversión, una forma de entretenimiento, cuando en realidad la programación televisiva es un mecanismo para lavar el cerebro de la población, es una herramienta para someternos al miedo, a la autoridad, a la delincuencia, al tirano, tanto así que cuando fui secuestrado en el 2015, mis secuestradores actuaban como si fueran héroes protagonizando una película de Hollywood, diciendo cosas como:
”¿Qué vamos a hacer con este viejo? ¿Lo cortamos en pedazos como en ___________?”
”Mira viejo, te vamos a matar, conoces la película _________?”
(Nunca entendí de cuales películas o actores me estaban hablando.)
Yo les dije que no conocía de quien o de qué película estaban hablando ya que no veo televisión, y obviamente sabían que yo no les mentía ya que no tenia televisión allí en mi casa, y todos los vecinos (y los delincuentes del sector) lo sabían (¡pero pensaban que yo tenía dólares! ¡eso sí!).
Básicamente, estos jóvenes disociados de la realidad pensaban que de verdad eran protagonistas en alguna película de “acción” o de terror, o de tortura, o guerra, especialmente cuando me pasaban el machete por la garganta y la barriga, riéndose y amenazándome, y diciendo cosas como:
”Ahora que estoy drogado, sí puedo matarte, y cortarte en pedacitos.”
Bueno, eso me espanta.
Me espanta que los padres de estos jóvenes les permiten, desde niños, ver las terribles cosas que pasan en la televisión, como si esas cosas fueran normal.
Me espanta que con toda la habladera de la Revolución humanista, todavía no hemos hecho absolutamente nada para conscientizar a nuestra población, y seguimos mirando la televisión como si fuera una forma de entretenimiento cuando en realidad es una forma de entrenamiento.
Me espanta que estamos, en Revolución, permitiendo que la televisión forme a nuestros jóvenes.
A veces me imagino el resultado de ver tanta televisión:
Un joven o un grupo de jóvenes secuestradores con cuchillos y machetes en mano (ver ejemplo real más abajo), pensando que son como Chucky, porque ellos creen que Chucky es real, atando a un viejo discapacitado a una silla, en su propia casa, para torturarlo antes de matarlo, drogándose, y discutiendo de qué manera lo matarán, mientras que el viejo le reza a Superman, pidiéndole ayuda, porque el viejo está convencido de que Superman es real, porque siempre ha existido desde su niñez, primero en las comiquitas, después en las películas, y aun en los documentales.
Aun hacen pequeñas estatuas de Superman, así como hacen estatuas de dioses, santos, profetas, y otras divinidades.
¡Superman existe!
Bueno, eso no era una fantasía, era real, me pasó a mí, con la única diferencia de que no creo que Superman exista, entonces no le pedí ayuda.
NOTA ADICIONAL: Para confirmar lo que digo … cada día se ven ejemplos concretos con respecto a la inmensa y negativa influencia de la televisión sobre nosotros. Aquí abajo hay tres perfectos ejemplo, muy recientes …
1) la pareja mata a machetazos a la mujer por celos, como en las películas:
Ver: https://m.aporrea.org/actualidad/n304461.html
2) deportan desde Francia a un esquiador venezolano, con la misma actitud desarrollada en la película Jamaica Bajo Cero, con John Candy, sobre un equipo jamaicano de bobsleigh (trineo en rampas de hielo):
Ver: https://m.aporrea.org/venezuelaexterior/n304451.html
Ver: Cool Runnings - Wikipedia, la enciclopedia libre
3) evacuan hospital a raíz de tiroteo, como en las peliculas:
Ver: https://m.aporrea.org/internacionales/n304456.html
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