El HUMOR, así en mayúsculas, es una de las más brillantes demostraciones de la creatividad humana. A tal punto lo consideramos así que, el filósofo Hebbel expresó que el humorismo es la sola creación completa de la vida. Sin embargo como a veces no distinguimos entre la comicidad, de categoría inferior como la vemos en el llamado humor norteamericano del presente o de siempre, donde les hace reír la torpeza, tropezar, caerse, tomar posiciones ridículas, los “efectos especiales” de expulsar vapor por los oídos, virar los ojos, etc., infantiladas absurdas, i cosas por el estilo, (recuerden al Gordo i el Flaco, a los Tres Chiflados, etc.) posiblemente han olvidado la sentencia de George Burns quien expresó que “quien nos hace reír es un cómico. Quien nos hace pensar y luego reír, es un humorista”. Ha habido portentosos humoristas como Bernard Shaw, Anatole Frances, Oscar Wilde, Voltaire, Unamuno, Chesterton i dejemos de contar)
He visto la excelente entrevista que ha hecho Ernesto Villegas, quizá en el más interesante programa de opinión i de entrevistas de toda la televisión nacional (EN CONFIANZA), sin contar que todas las de VTV son de la misma calidad (Contragolpe, Al Momento, Dando i Dando, La Hoilla, La Réplica, otros que olvido, i sobre todo el Humor de suprema calidad de los Roberto en Como ustedes pueden ver) i es cuestión de apreciación- ; he visto, repito, la entrevista hecha a la Sra. Yajaira González, inteligente mujer, escritora de programas de humor i profesora de actores, quien con respuestas claras, precisas i de excelente explicación i contenido, me dejó satisfecho en la curiosidad de escuchar a una personalidad creadora en ese campo privilegiado del humor. Nosotros hemos tenido extraordinarios humoristas de los que conocí sus obras, como Antonio Saavedra, Leoncio Martínez “Leo”, Pío Gil, o el singularísimo poeta, prosista, cuentista, costumbrista i humorista de alto rango Aquiles Nazoa, i también valioso su hermano Aníbal –a quien tuve el placer de conocer i traerlo a mi casa- que escribía con su nombre o algunos otros como Matías Carrasco, en los tiempos en los cuales El Nacional, era un verdadero diario i no un panfleto. Es lamentable que hombres grandes en su género, como en el humor los Nazoa o en el canto Alí Primera, toda su descendencia –con algunas excepciones- no hayan seguido la línea de honor i creatividad de los padres.
El citado Hebbel, decía, además, que “el verdadero y profundo humor juega con las insuficiencias de las más altas cosas humanas; el falso humor con el de los individuos, separadas del conjunto”. Esta reflexión me parece interesantísima para lo que voi a comentar, respecto a un programa de supuesto humor, que presencié anoche por casualidad en la televisión colombiana en esa planta de radio i televisión Cadena CARACOL, a la cual los venezolanos agradecíamos en ser de las primeras en denunciar lo que pasaba en Venezuela en el Golpe de Estado del 2002. Tengo que confesar que esa televisora me parece bastante, pero bastante deficiente i chabacana, donde he observado por raticos a un supuesto cómico de pacotilla, con mecha rojizas en la región temporal, una cara de estúpido i con una bolita roja en la nariz, como los primeros payasos en el tiempo, despotricando o eructando burradas sobre el presidente de un país “hermano” i que, el suyo debe su independencia al Libertador Simón Bolívar. Sin embargo es tan basura como la marica de Jaimito Bayle, i no merece ocuparse de él en absoluto. La obra cómica que vi, la “parodia” política, con actores que no parecen ni aficionados (i si son “consagrados” que mal andan en las “tablas”), era con Chávez, Fidel i por último Evo Morales. El Chávez era un “gigantón” que lo único grande es el cuerpo, en relación con un cerebro pequeñito, porque las burdas imitaciones le fallaban, además el chabacano libreto que desdice del escritor; Fidel un enclenque viejito, de ojos saltones, que casi ni podía hablar i se caía al suelo de cualquier tropezón i con una estatura que debería representar mejor al presidente Uribe; sacando a Gaitán i a García Márquez, algún héroe de la independencia que no sea Santander, Colombia no ha parido un cerebro ni un personaje histórico que se ponga al lado de Fidel. Por eso, cuando han aparecido hombres del calibre de los de la Independencia, como Ricaurte o Girardot, no han estado en las aguas pútridas del conservadurismo más rancio de América, sino en las guerrillas que luchan por la segunda libertad de su patria, la que les legó el Libertador i con los mismos colores de la bandera que nos legó Miranda. Después de unos diálogos estúpidos i fuera de la realidad, entró Evo Morales, una gloria de las etnias del continente propuesto hasta para Premio Nóbel de la Paz; un indígena genuino, digno de admirar i por consiguiente respetar, para mostrarlo casi como un mono, saltando i abrazándose a un árbol. ¡Que meconiada o excrementada de parodia barata! ¡Qué desprestigio para esa televisora i para Colombia que es a la patria que enlodan i al pueblo que ofenden! Ojalá ese extraordinario bachiller marginal que es Mario Silva, haya recogido un video de este mamarracho de intento de ridiculizar sin éxito a tres hombres que, con todo el dolor arrecho i vergonzoso del mundo capitalista, i de los cachorros sumisos, ya están en la Historia grande del Mundo; mientras a su amo, el terrorista i asesino número uno del plantea que también es su víctima (el planeta Tierra), el emperadorcito Bush, lo veremos en lo alto del podio criminal de la historia, rodeado de Hitler i de Stalin, haciéndole el segundo i el tercero. Deberían atreverse a hacer una “obra de teatro o sainete igual, con estos tres personajes brillantes de sangre”. Queremos saber si el Caracol, lo que tiene adentro es un cangrejo ermitaño degenerado.