El cinismo conversa íntimamente con sus portadores escuálidos

Gran parte de la humanidad sabe que la problemática de la criminalidad y las consecuencias para víctimas y victimarios, es  resultado del capitalismo que obliga a nuestros hombres y mujeres del pueblo a buscar medios violentos o “pasivos” para obtener ese capital. La ciencia del capitalismo cuando sentó sus bases, al mismo tiempo, creó el cómo sostener esas bases  y una de sus columnas de sostén es la violencia. El capitalismo crea el delito en todas sus formas para someter las mentes con el miedo, el terror, la desesperanza, el resentimiento y pare de contar. Y una de las grandes adquisiciones que el capitalismo obsequia al pro-capitalista que le “ayuda” a ejecutar su salvaje propósito, es el cultivo del cinismo en sus podridas mentes para aplicar los métodos conocidos por pocos y desconocidos por las grandes mayorías.

El cinismo, es el vicio descarado al interior de cada hombre y mujer anti-humanista, léase  escuálido(a)* que con un poco de observación podemos detectar en cada palabra o acción que ejecute el portador de tan elemental actitud perversa.

Cuando me refiero a víctimas y victimarios, aclaro al momento que voy a referirme al victimario que es aprehendido y “castigado” en  establecimientos para tal fin. Los  privados de libertad en este momento de la nueva historia venezolana, son víctimas del cinismo en nuestra Venezuela socialista, ya que los “diputados” escuálidos pretenden manifestar su dolor hacia la población reclusa, cuando son ellos a través de siglos de conductismo, quienes precisamente, son los responsables de tenerlos en esos lugares que el Gobierno revolucionario trata de humanizar.

La oposición venezolana viene pretendiendo adueñarse de programas de rehabilitación y humanización de las cárceles en nuestro país, de la misma forma que reclaman sesta ticket para amas de casa, salarios para la clase trabajadora y en general, defender derechos de un pueblo que ya sabe quiénes son, y qué buscan con demagogias saborizadas y vacías.  En la interpelación a ministros dada por nuestro Gobierno en la Asamblea Nacional, la bancada opositora ventiló interés por la población carcelaria. El cinismo hizo su agosto y apareció hondo y horondo en algunos de sus más significativos portadores que describimos a continuación. 

El cinismo aflora a la superficie de William Ojeda* y le dice: ¡Hola William! Soy yo desde tu corazón y tu mente deliciosa y nauseabunda que habito contigo porque eres uno de mis huéspedes más queridos; con decirte que puedo compararte con María Corina Rodilla*, una de mis más agraciadas portadoras en toda la historia de la comunidad venezolana. Yo soy el Cinismo y la cara dura de la maldad cuando doy y vuelvo a dar. El latín me llamó cynismus, que equivale a “Carita de yo no fui”, cómo es la tuya y de los 65 más que nos asomamos a la Asamblea Nacional de mis enemigos, y digo asomamos, porque no volvimos. Me encantan los hombres y las marías Corinas que me usan con arte y viven convencidos que soy una ciencia. A los presidentes lacayos mundiales agradezco el uso indiscriminado que hacen de mis encantos, en especial los Uribes y Mubaraeks que se regalan conmigo a los pies de norteamericanos y otros imperiecitos ya caducos.

Soy la maestra mirada y la sonrisa acorinada* externa del engaño y la baladronearía. Soy la cara del ladrón de cuello blanco, léase zuluagasos*, y del cardenal, léase urozasos*,  hablando de Dios, política y pobreza. Soy el cura que bendice las armas con agua bendita. Soy el cura que acompaña al más malo del pueblo, léase adeco*,  hasta el cementerio el día de su muerte. Soy la donación que piden las religiones dueñas de bancos. Soy la cara lavada del periodista de CNN.  Soy la desvergüenza de la mentira porque digo la mentira que sea, como sea, en el lugar que sea y a quien sea, y sobre todo en la Asamblea Nacional de Venezuela con toda la seriedad del mundo; ¡por mi madrecita que es verdad! 

Soy la impunidad de los derechos del hombre, de la mujer, del anciano y del niño. Cínicos le dicen a los hombres, mujeres, niños y ancianos que me usan sin disimulo, es calumnia. Soy la mosquita muerta porque tiro la piedra y escondo la honda. Soy el esquelético del drogadicto que pide para mantener su vicio en las calles de Nueva York. Soy los 40 millones de pobres en el país más poderoso de la tierra que pretende ayudas a los países “pobres” que son dueños de pozos petroleros, minas de todos los metales, fauna y flora,  exuberantes. Soy las miles de toneladas de droga que se consumen en las propias narices del policía mundial. Soy el rostro impávido de la maldad, léase escuálido. La ironía va de la mano conmigo y actuamos sonrientes.

Soy el polvo blanco en la nariz del político norteamericano cuando está dando cátedra de narcotráfico y drogadicción. Soy la poesía al amor en estos tiempos de barbarie en Norteamérica. Soy la práctica y la acción del vituperio. Soy la noticia macabra del Nazi-onal seguida de la noticia de farándula. Soy la religión de toda la alta sociedad mundial. Soy la paz del país que exporta la destrucción y la miseria. Soy lo obsceno y el descaro. Soy el “buen” esposo que golpea. Soy el marido y la esposa infiel que se dicen “te amo”. Soy el político cuarto-republicano y salta-talanquera que regresa por más votos. Soy el elector que elige a sus verdugos. Soy el político tercermundista que roba a sus pueblos para regalarlo a su amo yanqui. Gracias a Antistenes por darme mi peldaño filosófico.

William Ojeda quiso decir algo, pero su incapacidad mental llena del dialogo interno del cinismo no le dejó, y cuando vio a María Corina Rodilla que caía en el mismo trance donde él estaba, William comprendió que el cinismo también la poseía y guardó silencio

*****************************************************

*Escuálido = Especie clorótica pronorteamericana de abultada alma por tanto vicio.

**Para el lector fuera de las fronteras venezolanas, William Ojeda y María Corina Rodilla, son antivenezolanos que hoy se asoman en nuestra Asamblea Nacional dadas las garantías que nuestro Gobierno Democrático y revolucionario les permite.

*Sonrisa acorinada = Risa cínica o caraepiedra orgullosa que muestra María Corina Rodilla en todo acto público.

*Zuluagazos = Hombre o mujer multimillonario que especula para dar empleo.

*Urozasos = Cardenales delegados por la Santa Sede para acabar con lo poco que le queda a la Iglesia Católica en el mundo.

Adeco = Nimio espécimen en natural extinción. 

¡Patria socialismo o muerte!

Chávez es socialismo! 

nandopico@yahoo.com

 



Esta nota ha sido leída aproximadamente 2017 veces.



Hernando Cortés Pico


Visite el perfil de Hernando Cortés Pico para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes: